En el apartado “Enseñanzas bíblicas > Preguntas sobre la
Biblia > El cielo y el mundo de los espíritus > El cielo, de la web www.jw.org de los Testigos de Jehová podemos
encontrar la siguiente pregunta y su correspondiente respuesta. Analizaremos lo
fundamental de la misma:
s/TJ:
Dios ha elegido a un número limitado de cristianos fieles que, tras morir, son resucitados para vivir en el cielo (1Pe 1;3-4). Después de ser elegidos, deben seguir teniendo una fe fuerte y una conducta cristiana, pues de lo contrario no serían dignos de recibir la herencia celestial (Ef 5;5) (Flp 3;12-14).
¿Qué harán allí?
Estos escogidos serán reyes y sacerdotes junto a Jesús durante mil años (Ap 5;9-10) (Ap 20;6).
¿Cuántos irán al cielo?
Análisis:
Los TJ nos dicen
que quienes creemos que todos los buenos van al cielo, estamos equivocados, ya que
solo irán 144.000 y que todos los demás vivirán en la tierra.
Creo sinceramente
que quienes se encuentran en un grave error son los TJ al no percatarse que los
144.000 elegidos en (Ap 14;1-5) son rescatados de la tierra como contrapeso a
la apostasía de los moradores de la tierra del capítulo 13. Los 144.000
representan la totalidad de los elegidos, del mismo modo que en (Ap 7;4-8)
simbolizaban la totalidad de los cristianos. Pero los elegidos de (Ap 14),
igual que la totalidad de los cristianos de (Ap 7) son muchos más. Por eso, los
elegidos que siguen al Cordero como su pastor, constituyen “las primicias” (Ap
14;4) de la masa de los redimidos ofrendadas a Dios y al Cordero.
Si esto no es así, ¿cómo deben interpretarse las claras palabras de Jesucristo que invitaban a
todo aquél que le seguía o le buscaba, a entrar en el reino de Dios o de los
cielos? Veamos algunos ejemplos:
La recompensa de los justos es
grande en el cielo (Mt 5;12) (Lc 6;23); allí reúnen ellos sus tesoros (Mt 6;20)
(Mt 19;21) (Lc 12;32-33) (Mc 10;21) (Lc 18;22) (Col 3;2); reciben de Dios una
morada eterna, en el cielo (2Cor 5;1); se sientan con Cristo en el cielo (Ef
2;6) (Ap 3;21); o están delante de su trono (Ap 7;9); todo ello inmediatamente
después de la muerte, antes de la resurrección (Flp 1;23) (2Cor 5;6-8); son
ciudadanos del cielo que buscan las cosas del cielo (Flp 3;20) (Col 1;5) (Col
3;1) (Hb 10;34) (1Pe 1;4) (Lc 10;20).
s/TJ:
A los “llamados y escogidos” para reinar con Cristo en el reino de Dios también se les conoce como el “rebaño pequeño” (Lc 12;32). Esto demuestra que los escogidos son pocos en comparación con la cantidad total de ovejas del rebaño de Cristo (Jn 10;16).
Análisis:
Este “rebaño pequeño” lo compondrían -según los TJ- los elegidos. Pero veamos que en (Lc 12;32) Jesucristo se dirige a sus discípulos que eran relativamente poco numerosos. Para ello se sirve de una expresión afectuosa: “No temáis rebaño pequeño”. Habla en este momento a sus discípulos (Lc 12;22), no únicamente a los apóstoles. Y a través de ellos se dirige a todos los que quieran seguirle, para quienes será siempre el Maestro amante y cariñoso, lleno de atenciones y delicadezas. Incluso Pedro le pregunta: “Señor, ¿es a nosotros a quienes dices esta parábola o es a todos?” (Lc 12;41). Jesucristo le contesta mediante otra parábola en la que queda claro que se dirige no solo a los apóstoles, ni solo a los discípulos, sino a todo el mundo, ya que habla de siervos que conocen la voluntad de su amo (Lc 12;47) y de siervos que no la conocen (Lc 12;48). Asimismo en otro contexto (Mc 13;37) en el que Jesús también está hablando de la vigilancia, como en (Lc 12;41), e incluso sin que nadie se lo pregunte, explícitamente dice a los apóstoles que están con Él: ”Lo que a vosotros digo a todos lo digo” Por lo tanto, todos los buenos, todos los que siguen la doctrina de Cristo -como hemos visto- van al cielo.