(JW.org 17.09.21. Tema de portada de los testigos de
Jehová)
Pensamiento de los testigos de Jehová sobre
este tema:
“La tecnología (mensajes de
texto, correo electrónico, videoconferencias y redes sociales) puede afectar a
las personas poco a poco, sin que se den cuenta y de formas que ni se imaginan”
(¡Despertad! 2021/2, pág 3)”.
“si usted
controla bien la tecnología y no permite que esta la controle a usted,
podrá mantenerse en contacto con sus amigos e incluso fortalecer su amistad con
ellos” (¡Despertad! 2021/2, pág 6)
“Igual
que hace más de doscientos años la gente no podía confiar en todo lo que
publicaban los periódicos, tampoco podemos confiar hoy en mucho de lo que
circula por Internet. Gracias a las nuevas tecnologías, en la actualidad
disponemos de una enorme cantidad de información. Pero debemos ser muy
cuidadosos, pues además de información útil y veraz, encontramos mucha que es
inútil, falsa e incluso peligrosa” (“La Atalaya de estudio” del 15 de octubre
de 2015, pág 3).
Análisis de este pensamiento:
Resumiendo
el tema que presentan los TJ en “La Atalaya de estudio” del 15 de octubre de
2015, y ahora nos recuerdan detalladamente en su “¡Despertad! 2021/2”, podríamos
decir, de acuerdo con (Prov 14;18), que “el que cree todo lo que le dicen es un
ingenuo y, por eso, heredará necedad. En cambio, el que se preocupa por
discernir la verdad de la mentira en todo aquello que le dicen, es prudente, y,
por eso, se coronará de sabiduría”.
Pero,
desgraciadamente, esta última forma de actuar, que es correctísima, los TJ solo
entienden que debe aplicarse para examinar la religión y las costumbres que
ahora profesan los que todavía no han entrado en la organización de los TJ,
porque una vez en ella, los TJ han de someterse a lo que diga la organización
sin ningún tipo de discusión (“La Atalaya” 1.5.84) (“La Atalaya” 15.5.84).
Esta
manera de actuar que los TJ exigen a sus miembros, está en contra
flagrantemente, del “juicio crítico” al que, según ellos mismos enseñan, los
cristianos han de someter sus creencias ¿O es que los TJ no son cristianos?
(“La Atalaya” 15.11.92, pág 3) (Rom 12;1-2) (1Tes 5;21) (“Usted puede vivir…”,
pág 31) (“La verdad que lleva a la vida eterna”, pág 13)
Siguiendo en esta
línea de comportamiento que los TJ exigen concretamente a sus adeptos, leemos
en ("La Atalaya" de 1.3.93, pág 22):
"Si prestamos atención a la dirección que Jehová nos da a través de
su Palabra y organización, haremos las cosas a su manera, lo que resultará en
que nos ahorremos, por ejemplo, el escollo de caer en discusiones baladíes con
aquellos que lo único que quieren es argüir o disputar sobre meras palabrerías”.
Y es que, para los TJ, cualquier objeción a su doctrina se convierte en “mera
palabrería” por mucho que se intente, no que te den la razón, sino, simplemente,
que “entren en razón”.
¿Por qué un TJ no ha
de poder revisar con plena objetividad la Historia y la Arqueología para
convencerse a sí mismo de si Jesucristo, por ejemplo, murió en una cruz o en un
madero? Pero no los apuntes de la
Historia o de la Arqueología que le proporcionan los mismos TJ, sino libremente,
consultando aquellos libros o aquellos estudios que considere más objetivos,
más técnicos, más especializados, provengan de dónde provengan.
El problema, pues, de todo ello no está en la tecnología, sino en las intenciones y en la actitud de quienes la utilizan, ya sea para lo bueno como para lo malo. La tecnología es un conjunto de herramientas y de procedimientos que, sin duda, nos ayudarán en nuestra búsqueda de la verdad… si la utilizamos libremente para ello.