s/TJ:
“Cuando Jesús iba saliendo del templo, sus discípulos
se le acercaron y le señalaron los edificios del Templo. Entonces Él les dijo:
¿Ven todas estas cosas? Les aseguro que de ninguna manera va a quedar aquí
piedra sobre piedra. Todo será demolido (Mt 24;1-2)
"Mientras él estaba sentado
en el monte de los Olivos, cuatro de sus apóstoles vinieron a pedirle una
"señal": "Dinos ¿Cuándo serán estas cosas, y qué será la señal
de tu presencia y de la conclusión del sistema de cosas?” (NM)
(Mt 24;1-3) (Mc 13;1-2) (Lc 21;5-6) ("Usted puede
vivir...", pág 148-149)
"Jesús no solo dio un solo
acontecimiento como "la señal". Habló de muchos diferentes
acontecimientos y situaciones. Además de Mateo, otros escritores bíblicos
mencionaron acontecimientos adicionales que acontecerían durante el tiempo que
los escritores de la Biblia llamaron los "últimos días". (2 Tim
3;1-5) (2Pe 3;3-4)" ("Usted puede vivir...", pág 149)
"Estos acontecimientos,
sucederían dentro de una sola generación para identificar
claramente los "últimos días". Serían como las diferentes
líneas que forman la impresión digital de una persona, una impresión que no
puede pertenecer a ninguna otra persona. Los "últimos días"
contienen su propio grupo singular de marcas, o acontecimientos, que forman una
positiva "impresión digital" que no puede pertenecer a ningún otro
período de tiempo." ("La Atalaya" de 1.9.67, pág 517)
Los apóstoles no saben cómo será la venida de Jesucristo
y la consumación del mundo ni en qué condiciones va a tener lugar, por esto
quieren saber cómo sabrán ellos que todo ello está ocurriendo. Su curiosidad es
lógica. Por esto la respuesta de Jesús es amplia y detallada.
"Jesús indicó que muchos
acontecimientos tomados en conjunto constituirían la
señal de su segunda presencia como Rey.
Primero dijo él que habría guerra
mundial, nación levantándose contra nación y reino contra reino...Puntualmente
1914 presenció la primera guerra mundial..." ("Base
para creer en un mundo nuevo", pág 49)
"Aparentemente las naciones
se airaron en conexión con la cuestión de la dominación mundial, pero realmente
estaban airadas en contra de Jehová Dios y su Cristo, el Rey sacerdote
Jesús." ("Usted puede sobrevivir al Armagedón", pág 98)
Análisis:
Los TJ escriben: "¿Qué estaba diciendo Jesucristo
a sus seguidores futuros? Que esperaran una guerra desastrosa cuyas dimensiones
se desconocían en la historia... ¿De qué guerra estaba hablando Jesús?
¡De la I Guerra Mundial! Fue la primera guerra que llenó la descripción
que dio, porque incluyó, no sólo a naciones, sino a reinos enteros, en efecto a
todo el mundo" ("La Atalaya" de 1.9.67, pág 518).
Y ya está, ya tenemos la profecía perfectamente interpretada y situada.
En ninguna parte de los versículos de la Biblia que
aducen los TJ para enseñarnos las señales que deben seguir -según ellos- a la
segunda venida invisible de Jesucristo, se habla de predicciones que deban
ocurrir a escala mundial. La expresión de Jesucristo: "Se levantará nación
contra nación y reino contra reino", los TJ la interpretan como referida a
la primera guerra llamada mundial y punto.
Antes de la I Guerra Mundial los TJ no opinaban
igual ya que, creían que a lo largo del "Tiempo de los gentiles"
es cuando se cumplirían las señales: guerras, hambre, pestes, terremotos... y
que, al fin, en 1914, ocurriría el Armagedón. Pero, claro, al no ocurrir
el Armagedón cuando estaba previsto, se tuvo que trastocar todo lo dicho y
encontrar nuevas enseñanzas que, de alguna manera, tuviesen el
máximo de coherencia con lo
predicado hasta entonces... por muy enrevesadas que ellas
fueran. Los TJ, en general, hoy en día ya no niegan que realmente
en 1914 ellos esperaban el Armagedón, pero justifican su error por la
falta de entendimiento bíblico e histórico exacto de lo que en realidad
significaba el fin de los tiempos señalados de las naciones... ¡Y se
quedan tan panchos!
Debe tenerse en cuenta, por otra parte, que -según los TJ- Jesús tomó el poder del Reino y arrojó a Satanás en octubre/1914 y que habiendo empezado la I Guerra mundial en 28 de julio de 1914 está claro que nada tiene que ver una cosa con la otra./TJ: