Podemos leer en ("La Atalaya" de 1.3.65, pág 154):
“Concerniente a la Cena del Señor, Mateo, un testigo presencial, escribió: ‘Y
mientras ellos comían, Jesús tomó un pan, y lo bendijo, y lo partió, y
dándolo a los discípulos, dijo: Tomad, comed; esto es mi
cuerpo. Y tomando la copa, dio gracias, y se
la dio, diciendo: Bebed de ella todos; porque esto es mi sangre, la
sangre del Nuevo Pacto, la cual es derramada por muchos, para remisión de
pecados’" (Mt 26;26-28).
Los propios testigos de Jehová se preguntan ¿qué quiso decir Jesús cuando dijo: "Esto es mi cuerpo" y "Esto es mi sangre"? No habiendo ninguna declaración en las Escrituras que diga lo contrario -se contestan- tenemos que concluir que Jesús simplemente quiso decir la cosa más obvia, a saber, que el pan y el vino representaban o significaban su cuerpo, su propio cuerpo de carne y sangre; no que éstos habían llegado a ser realmente su carne y sangre.
Y ni cortos ni perezosos, los testigos de Jehová cambian el Texto Sagrado como les interesa a su personal interpretación. En vez de “Esto es mi cuerpo” y “Esto es mi sangre” escriben “Esto significa mi cuerpo” y “Esto significa mi sangre”
¿Se dan cuenta los testigos de Jehová, que al cambiar estas palabras de Jesús, están quitando al mismo tiempo todo su significado a las propias palabras del mismo Jesús dichas con anterioridad en una sinagoga de Cafarnaúm y que recoge el evangelista Juan en (Jn 6;51-58): “… el pan que yo daré es mi carne, vida del mundo”, “… si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna, y yo le resucitaré el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre está en mí y yo en él ?” ¿Podemos decir que estas palabras tan rotundas, autorizan la obviedad que los testigos de Jehová creen ver en las palabras de Jesús en la cena del Señor?
Los propios testigos de Jehová se preguntan ¿qué quiso decir Jesús cuando dijo: "Esto es mi cuerpo" y "Esto es mi sangre"? No habiendo ninguna declaración en las Escrituras que diga lo contrario -se contestan- tenemos que concluir que Jesús simplemente quiso decir la cosa más obvia, a saber, que el pan y el vino representaban o significaban su cuerpo, su propio cuerpo de carne y sangre; no que éstos habían llegado a ser realmente su carne y sangre.
Y ni cortos ni perezosos, los testigos de Jehová cambian el Texto Sagrado como les interesa a su personal interpretación. En vez de “Esto es mi cuerpo” y “Esto es mi sangre” escriben “Esto significa mi cuerpo” y “Esto significa mi sangre”
¿Se dan cuenta los testigos de Jehová, que al cambiar estas palabras de Jesús, están quitando al mismo tiempo todo su significado a las propias palabras del mismo Jesús dichas con anterioridad en una sinagoga de Cafarnaúm y que recoge el evangelista Juan en (Jn 6;51-58): “… el pan que yo daré es mi carne, vida del mundo”, “… si no coméis la carne del Hijo del hombre y no bebéis su sangre, no tendréis vida en vosotros. El que come mi carne y bebe mi sangre tiene la vida eterna, y yo le resucitaré el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre está en mí y yo en él ?” ¿Podemos decir que estas palabras tan rotundas, autorizan la obviedad que los testigos de Jehová creen ver en las palabras de Jesús en la cena del Señor?