jueves, 27 de febrero de 2020

CENA DEL SEÑOR. 144.000

CENA DEL SEÑOR. 144.000

Comentarios o análisis general al artículo de estudio 5 que se titula “Iremos con ustedes” y que los TJ han de estudiar del 30 de marzo al 5 de abril de 2020, según “La Atalaya” – edición de estudio – de enero 2020.
“Queremos ir con ustedes, porque hemos oído que Dios está con ustedes” (Zac 8;23)

Estas palabras del libro de los profetas son las palabras finales del capítulo 8 en el cual se describe el amor de Yahvé por su pueblo, comentando las promesas de bendición sobre Jerusalén (v1-8), la exhortación al trabajo (v9-17), la cesación del ayuno (v18-19) y la vocación de las gentes (v20-23). De hecho, la perspectiva del profeta se abre hacia un horizonte luminoso universalista. Viene la hora de la plena glorificación del Dios de los judíos. Como en (Is 2,1-4), Sión se convertirá en el centro de atracción de todos los pueblos. Los judíos serán envidiados por ser el pueblo escogido de Dios, y por eso los gentiles se acercarán a éstos como seres privilegiados, pidiendo participar del culto al verdadero Dios: Hemos oído que con vosotros está Dios (v.23). No se podía ofrecer vaticinio más consolador para aquellos pobres contemporáneos de Zacarías, que con la mayor penuria y con el desprecio y hostilidad de las poblaciones gentiles levantaban penosamente los muros del templo. El profeta quería hacerles ver que las antiguas promesas anunciadas por los grandes mensajeros de Dios tenían aún vigencia, y que, aunque el retorno y reconstrucción del país devastado no había ido al ritmo que idealmente aquéllos habían anunciado, sin embargo, la sustancia de sus vaticinios se realizará, y Jerusalén será realmente el centro y punto de convergencia de todos los pueblos.

Nada tiene que ver con el contexto, la interesada y particular interpretación que de estas últimas palabras de Zacarías efectúan los testigos de Jehová.

Por otra parte, los testigos de Jehová indican que, ya que todavía quedan algunos “ungidos” entre los siervos de Dios de hoy día, puede que algunos se pregunten ¿debemos preocuparnos si el número de participantes del pan y del vino en la Conmemoración aumenta?

La respuesta de los propios testigos de Jehová es rotunda. No. Y la razón que presentan es la siguiente: "Jehová sabe quiénes son verdaderamente ungidos (2Tim 2;19), pero los hermanos que durante la Conmemoración cuentan a los que comen del pan y beben del vino no lo saben. Por eso, la cifra total incluye a los que creen que son ungidos, pero en realidad no lo son. Algunos que solían participar ya no lo hacen. Y otros creen que gobernarán con Cristo en el cielo debido a problemas emocionales o mentales. Así que no sabemos con exactitud cuántos ungidos quedan en la Tierra".

La respuesta no aclara nada, ya que la inclusión en las cuentas de los que creen que son ungidos se ha dado siempre. Yo creo que los testigos de Jehová de a pie deben seguir preguntándose ¿por qué si nunca se ha hecho distinción entre los realmente ungidos de los que creen serlo, ahora, desde el año 2006, que fue el punto más bajo con 8.524, no cesa de aumentar el total, alcanzando, en el año 2019, la cifra de 20.526 con un 250% de incremento frente al año 2006?

Y no hemos de olvidar que según La Atalaya 15/8/1996, pág 30-31, “hay buena razón  para pensar que el número de 144.000 cristianos ungidos se completó décadas atrás”.