viernes, 4 de julio de 2014

JUICIO ACTUAL. OVEJAS Y CABRAS. VIDA ETERNA Y CORTAMIENTO

JUICIO ACTUAL. OVEJAS Y CABRAS. VIDA ETERNA Y CORTAMIENTO

s/TJ:

La Biblia  da información acerca  de acontecimientos que están  a muchos años en el porvenir.  Y muestra que no hay razón para temer lo que ha de venir. Pero la pregunta es: ¿Estará usted allí para disfrutar de las cosas buenas  que Dios tiene para entonces?

Eso dependerá de si sobrevive usted a un día de juicio  anterior, a saber, el “juicio actual”, "día de juicio y de la destrucción de  los hombres impíos" (2Pe 3;7). ("Usted puede vivir..." pág, 183)
Análisis:

Los TJ se refieren al Juicio que se describe en (Mat 25; 31-46). Le llamaban “actual” a este juicio porque hasta hace unos pocos años creían -¡tantas cosas han creído!- que desde 1914, o 1918, Jesús estaba ya juzgando a la humanidad y de acuerdo con (Mat 25) clasificando a las personas como ovejas o cabras y, por lo tanto, receptoras de muy distinta retribución, en un caso de vida eterna y en el otro de “cortamiento” o “suplicio eterno”.

A lo largo de su breve historia, los TJ han propuesto para este juicio, cuatro fechas o momentos diferentes, cada una de ellas "verdades claramente expuestas en la Biblia": 

1º) A lo largo del Milenio, o sea, durante el Juicio de los Mil años: "Que la parábola de las ovejas y las cabras se refiere al milenio, claramente lo indica (Mt 25;31-32) (...) El desarrollo de esta parábola tomará lugar después del tiempo de angustia, cuando las naciones sean  vencidas y Satanás esté atado (Ap 20:1-2) y la autoridad del reino  de Dios esté establecida. Antes de esto, la Desposada de Cristo  (La Iglesia Triunfante), se sentará sobre su trono con él, tomando parte  en la ejecución de los juicios del gran día de la ira. Entonces el Hijo del hombre aparecerá (se manifestará) al mundo 'en su gloria' y juntos Jesús y su desposada 'brillarán como el  sol en el reino de su  Padre' ("¿Qué dicen las escrituras concerniente al infierno?", pág 58 y 59)
  
, y especialmente, desde que Adonaí (El Señor) vino a su templo en 1918, aunque la Iglesia aún no ha sido glorificada, Satanás anda suelto para arruinar la tierra, y, lógicamente, sin que haya llegado el Milenio. 

2º) En 1914: La “verdad”  de este juicio actual es que se está cumpliendo desde que Cristo regresó en 1914: “Desde que Cristo regresó y se sentó sobre su trono celestial -año 1914- toda la humanidad ha estado bajo juicio” ("Usted puede vivir..." pág, 183)

3º) En 1918: "Cristo al hacerse presente  en 1914, se sentó en su trono celestial  y -a  partir de  1918 fecha  que coincide  con la venida de  Jesús al  Templo- colocó  a toda  la humanidad  bajo su juicio (Mt  25;31-46) (2Pe  3;7) (1Pe  4;17)." ("Sea Dios  veraz", pág, 273) 

4) En el futuro, en la “gran tribulación”, después de la destrucción de la religión falsa.

La última propuesta, la número 4, la todavía vigente, aparece claramente expuesta en ("La Atalaya" 15/7/2013, págs 3-8). Veamos el escrito en cuestión:

s/TJ:

"¿CUÁNDO JUZGA JESÚS A “LAS OVEJAS” Y “LAS CABRAS”?

Analicemos ahora cuándo se cumplirá otra parte de la profecía que dio Jesús: la parábola sobre el juicio de las ovejas y las cabras (Mat. 25:31-46). Por algún tiempo creímos que el juicio para clasificar a las personas como ovejas o cabras se realizaría durante todo el período que abarcan los últimos días, es decir, de 1914 en adelante. Considerábamos que quienes rechazaran el mensaje del Reino y fallecieran antes del comienzo de la gran tribulación morirían como cabras, sin la posibilidad de resucitar.

En 1995, La Atalaya ofreció una explicación revisada de Mateo 25:31, que dice: “Cuando el Hijo del hombre llegue en su gloria, y todos los ángeles con él, entonces se sentará sobre su glorioso trono”. Se destacó que en 1914 Jesús llegó a ser Rey del Reino de Dios pero no se sentó “sobre su glorioso trono” como Juez de “todas las naciones” (Mat. 25:32; compare con Daniel 7:13). Sin embargo, la parábola de las ovejas y las cabras describe a Cristo principalmente en su función de Juez (lea Mateo 25:31-34, 41, 46). Puesto que en 1914 Jesús no se sentó a juzgar a todas las naciones, no pudo haber empezado a dictaminar quiénes son ovejas o cabras en ese año. Entonces, ¿cuándo empezaría?

La profecía de Jesús sobre los últimos días revela que él empezará a actuar como Juez de todas las naciones después de la destrucción de la religión falsa, y no antes. Los sucesos que ocurrirán durante ese tiempo se registran en Mateo 24:30, 31. Al analizar estos versículos, nos damos cuenta de que Jesús predice acontecimientos similares a los que menciona en la parábola de las ovejas y las cabras. Entre otras cosas, profetiza que el Hijo del hombre vendrá con gloria y acompañado de ángeles; que todas las tribus y naciones estarán reunidas delante de él; que los que sean juzgados como ovejas “[alzarán] la cabeza” porque les espera “la vida eterna”, y que quienes sean juzgados como cabras “se golpearán en lamento” al comprender que irán al “cortamiento eterno”, es decir, la destrucción (Mat. 25:31-33, 46).

¿A qué conclusión nos llevan estos datos? A que Jesús juzgará a las personas de todas las naciones como ovejas o cabras cuando venga durante la gran tribulación. Entonces, en el Armagedón, el punto culminante de la gran tribulación, las cabras serán “cortadas” para siempre, o destruidas. ¿Qué efecto tiene entender estos hechos en nuestra actitud hacia la predicación? Sin duda, nos ayuda a ver la importancia de avisar a las personas. Hasta que comience la gran tribulación, están a tiempo de cambiar y seguir el camino estrecho que “conduce a la vida” (Mat. 7:13, 14). Aunque es cierto que hoy día muchos ya reflejan características de cabra o de oveja, el juicio definitivo en que serán clasificados como tales se efectuará durante la gran tribulación. Así que no es momento de aflojar el paso. ¡Démosle a todo el que podamos la oportunidad de escuchar y aceptar el mensaje del Reino!" ("La Atalaya" 15/7/2013, págs 3-8)

Análisis:

¿Qué quiere decir para los TJ que Jesús juzgará a todas las naciones? Según los TJ, que solamente se pondrá bajo juicio del Rey a la “humanidad”  que viva a partir del momento en que se inicie este juicio. Veamos:

s/TJ:

Durante el día del juicio actual, nuestro Rey entronizado, Cristo Jesús, como Juez, efectuará una separación de la gente como "cabras" a su izquierda,  o como  "ovejas"  a  su derecha  (Jn  5;22).  ("Usted puede vivir..." pág, 183) ("La Atalaya" de 1.7.93, pág 19)

"Cabras" son los  que de  entre los vivos,  a partir de  entonces, con  el tiempo muestran que son  pecadores que no se  arrepienten, inicuos, endurecidos en su  práctica de  la injusticia.   Por tanto, porque  no ayudan  a los "hermanos"  ungidos de  Cristo  en  el servicio  de  estos  a Dios:  son destruidos.  Cuando mueren van al Gehena de dónde no se resucitará.  (Mt 25;31-46) (Jn 17;12) (Mt 23;33) (Mt 12;32) (Hb 6;4-6) (Hb 10;26-27)   ("Usted puede vivir..." pág, 183) ("La Atalaya" de 1.3.92, pág 15)  

"Ovejas" son los  que de entre  los vivos, a partir  de entonces, apoyan  en todo sentido a  los "hermanos" de Cristo: serán bendecidos con vida bajo la gobernación del reino. Cuando mueren van al Hades. Dios se encargará de que la esperanza  de ellos de vivir para siempre en  el paraíso en la Tierra se  realice mediante el  resucitarlos de entre los  muertos.  (Mt 25;31-46)  ("Usted puede vivir..." pág, 183) ("La Atalaya" de 1.3.92, pág 15) 

Análisis:

El Juicio de las ovejas y de las cabras, los TJ lo entienden  como un acontecimiento que  se desarrollará  de  una manera  muy distinta  a  la que  nos explica  el evangelio  de S.  Mateo porque  -según los  TJ- ni "veremos al Hijo del hombre venir sobre las nubes", porque será invisible, ni se reunirán "todas las naciones" (NM)  o "todas las gentes"  (NC) ya que sólo juzgará a los que estén entonces vivos, ni los juzgados tomarán  entonces posesión de la retribución que les corresponda, ya que ello no ocurrirá hasta el "Día del juicio de mil años" después del Armagedón para las ovejas (y aun así podrán ir al gehena según les vaya) y cuando mueran, para las cabras. Y por otra parte, la distinción entre "ovejas y "cabras" no tiene nada que ver con los motivos que explican los TJ. Cristo nos considerará "ovejas" o “cabras" según hayamos amado o no a nuestro prójimo (como queda claramente de manifiesto en este y en tantos pasajes del Nuevo Testamento). En el momento de la verdad, lo único que tendrá valor  es el amor al prójimo que hayamos manifestado cuando éste ha tenido hambre, sed, ha estado enfermo, en la cárcel, desnudo, sin techo, etc... ´

Finalmente, después de este juicio, queda claro que se han acabado las pruebas. El destino tanto para unos como para otros, es definitivo porque es eterno... "partirán al cortamiento eterno"... o a la "vida eterna". La Biblia dice: "Y por cuanto a los hombres les está establecido morir una vez, y después de esto el juicio (Hb 9;27).