Según los testigos de Jehová: “los de genio apacible o los justos mismos heredarán la tierra” y “residirán para siempre sobre ella” (interpretando que, literalmente, (Mt 5;5) y (Sl 37;29) se están refiriendo al planeta Tierra). (“La Atalaya”, 2019/3, pág 10)
Surgen varias preguntas que al final resumiré en una. Veamos:
“Los que tienen conciencia de su necesidad espiritual”, ¿son justos?, porque … “a ellos pertenece el reino de los cielos” (Mt 5;3) o “de Dios” (Lc 6;20).
“Los de corazón puro”, ¿son justos?, porque … “ellos verán a Dios” (Mt 5;8).
“Los pacíficos”, ¿son justos?, porque … “se les llamará hijos de Dios” (Mt 5;9).
“Los que han sido perseguidos por causa de la justicia”, ¿son justos?, porque … “a ellos pertenece el reino de los cielos” (Mt 5;10).
“Quienes sean vituperados y perseguidos por mi causa”, ¿son justos?, porque … “grande es su galardón en los cielos” (Mt 5;11) (Lc 6;23).
Resumiendo:
“Los que tienen conciencia de su necesidad espiritual”,
“Los de corazón puro”,
“Los pacíficos”,
“Los que han sido perseguidos por causa de la justicia”,
“Quienes sean vituperados y perseguidos … por mi causa”.
¿Son todos ellos justos?
Tanto si la respuesta es ¡SÍ! como si es ¡NO!, teniendo en cuenta que la retribución de todos estos está ubicada en el cielo, ¡¿QUIÉNES CONCRETAMENTE HEREDARÁN LA TIERRA?!
