JESÚS ENVÍA NO SÓLO A SUS ONCE APÓSTOLES SINO A TODOS LOS DISCÍPULOS
s/TJ:
Los TJ dicen que no fue
sólo a los once apóstoles, sino a todos los discípulos que Jesucristo
envía a predicar… ("La Atalaya" de 1.5.64, pág 272)"
En Mateo 5;14 Jesús dijo
a sús discípulos:
"Ustedes son la luz del mundo". Habían de
seguir sus pisadas. Por su modo de vivir y por su predicación, debían dirigir a otras personas a Jehová, la Fuente de la verdadera iluminación. Como
Jesús, tenían que dar a conocer
el nombre de Jehová y sostener
su soberanía. Al igual que
Jesús, habían de proclamar
el Reino de Dios como
la única esperanza de la humanidad. También tenían que desenmascarar las falsedades religiosas, las obras que pertenecen a la oscuridad y al personaje inicuo que está detrás de todas estas
cosas. Los seguidores
de Cristo debían hablar
a las personas por todas partes acerca de la provisión amorosa que Jehová ha hecho para
nuestra salvación mediante
Jesucristo. Los cristianos primitivos cumplieron con celo esa asignación, pues predicaron primero en Jerusalén y Judea y luego en Samaria, tal como había mandado Jesús. (Hechos 1;8)
No obstante, la predicación de las buenas nuevas no habría de limitarse a
esos territorios. Jesús
mandó a sus seguidores
que "(hicieran) discípulos
de gente de todas las
naciones". (Mateo 28;19) Cuando
Saulo de Tarso se convirtió al cristianismo, el Señor dijo específicamente que
Saulo -quien llegó a ser el
apóstol Pablo- no solo
predicaría a los judíos, sino a
los gentiles también.(Hechos 9;15) Con
la ayuda del espíritu santo, Pablo comprendió lo que eso implicaba. Por lo
tanto, discernió que la profecía de Isaías
42;6, que se cumple directamente en Jesucristo, también es un mandato implícito para todos los que ejercen fe en Cristo. Por eso,
en Hechos 13;47 Pablo citó de Isaías, al
decir: "Jehová nos ha impuesto
el mandamiento con estas
palabras: 'Te he nombrado como luz de
naciones, para que seas una salvación
hasta la extremidad de la tierra'". ("La Atalaya" de 15.1.93, pag 11)
Así, la Biblia nos
dice que los primeros seguidores de Cristo fueron "testigos de (Jesús)
tanto en Jerusalén como en
toda Judea, y en Samaria, y hasta la parte más distante de
la tierra". (Hechos 1;8) Como Jesús había
predicho, su predicación y
enseñanza produciría nuevos
creyentes, a quienes habría que bautizar que fueran sus seguidores.
El primer ejemplo que recogen las Escrituras sucedió en
Jerusalén el día del Pentecostés de 33
E.C. Aquel día el apóstol
Pedro "se puso de pie con los
once" y habló de Jesús el Mesías a las multitudes.
El relato nos dice que a causa del discurso "se sintieron heridos
en el corazón" y le preguntaron
qué debían hacer. Pedro respondió: "Arrepiéntanse, y bautícese cada uno de
ustedes en el nombre de Jesucristo para
perdón de sus pecados". Después
"los que abrazaron su palabra
de buena gana fueron bautizados,
y en aquel día unas tres mil almas
fueron añadidas". (Hechos 2;14;41)
Los relatos posteriores aclaran que los
discípulos escuchaban el mensaje cristiano,
creían en las buenas
nuevas y se arrepentían antes
de bautizarse. (Hechos
8;12,13,34-38; 10;34-48;
16;30-34; 18;5,8; 19;1-5)
¿Con qué propósito?
¿Por qué pidió Jesús
que sus discípulos se bautizaran? Porque
era un símbolo adecuado de su
dedicación de todo corazón a Dios. Tenían que predicarse las "buenas nuevas" por toda
la Tierra y había que hacer discípulos de "gente de todas las naciones". (Mateo 24;14; 28;19) Esto significaba
que Dios ya no tenía una relación exclusiva con la nación
judía, formada por personas dedicadas a él desde que
nacían. Cornelio y su familia fueron los
primeros gentiles, es decir,
no judíos, que aceptaron la
verdad acerca de Jesucristo y se bautizaron.
La sumersión en agua indicaba que los bautizados habían muerto
tocante a a llevar una vida centrada en
sí mismos. El que se
les levantara del agua simbolizaba que
desde ese momento viván para hacer
la voluntad de Dios, a quien
ponían en primer lugar en la
vida, tal como hizo Jesús. (Mateo
16;24) El bautismo "en el
nombre del Padre y del Hijo
y del espíritu santo"
mostraba que habían aprendido y
aceptado la verdad referente a cada
uno de ellos y que los
reconocían como lo que en realidad son. (Mateo 28;19; compárese con Hechos 13;48) El
bautismo era tan solo un paso inicial que indicaba obediencia a Dios y sumisión a su voluntad.
Las escrituras no
apoyan el concepto religioso muy difundido de que el bautismo es un sacramento, es
decir, una ceremonia religiosa que imparte mérito -gracia, santidad o beneficio
espiritual- al que se bautiza. Por
ejemplo, la bula pontificia del
papa Eugenio IV citada en el artículo anterior dice con respecto al
bautismo: "El efecto de este sacramento es la remisión
de todo pecado, tanto
el original como el
actual, e igualmente de todo
castigo debido al pecado. Como resultado, a los que se bautizan no se les exige satisfacción de los pecados pasados; y si mueren antes de cometer
pecado, alcanzan inmediatamente
el reino del cielo y la visión de
Dios".
Sin embargo, Jesús se bautizó
aunque "no cometío
pecado". (1 Pedro 2;22)
Además, según las Escrituras, la remisión de pecados
viene tan solo mediante el
sacrificio de rescate de Jesucristo.
Ananías instó a Saulo de Tarso: "Levántate, bautízate
y lava tus pecados
mediante invocar (el) nombre
(de Jesús)". (Hechos
22;12-16) Sí, la salvación solo es posible gracias a
la sangre derramada de Jesús y
a que se 'invoque su nombre' con
fe. (Hebreos 9;22; 1 Juan 1;7).
¿Cómo entendemos, entonces, las palabras de Pedro de 1 Pedro
3;21? Allí dice: "Lo que
corresponde a esto ahora también los
está salvando a ustedes, a
saber, el bautismo (no el desechar la suciedad de la carne, sino la solicitud hecha a Dios para una buena conciencia), mediante la resurrección de
Jesucristo". Pedro estaba
comparando el bautismo a la experiencia
de pasar a través de las aguas del Diluvio (versículo 20). Noé demostró que confiaba plenamente en Dios construyendo el arca para mantener viva a su familia. (Hebreos
11;7) De igual modo, las personas pueden salvarse de este sistema malvado si ejercen fe en Jehová Dios y su provisión para la salvación por medio de Jesucristo.
También deben actuar en
consonancia con esta fe.
Al arrepentirse de sus pecados, volverse del mal
camino y dedicarse sin reservas
a Jehová Dios en oración, le solicitan una buena conciencia. Sin embargo,
el perdón de los pecados y la salvación son posibles gracias al
sacrificio de Jesús y su resurrección, mediante la cual presentó a Dios en los
cielos el valor de aquel sacrificio. (1
Pedro 3;22).
("La Atalaya" de 1.4.93,pág 4 y ss)
Análisis:
Pero... (Mt 28;16-20): Sólo a los once
(Mc
16;15-18): Sólo a los once
(Hech
10;39-42): Sólo a los once
Jesús entre
sus discípulos elige a doce (Lc
6;13) a quienes llama apóstoles que significa
"el que recibe una misión determinada",
"mensajero", "embajador". ¿Cuál es esa misión? "Para que estuvieran con El y para enviarlos
a predicar" (Mc 3;14)
Se dice claramente en (Hech 1;2) que Jesucristo antes de ser elevado al cielo, tomó sus disposiciones acerca de los apóstoles que se había elegido,
a los cuales, después de su pasión, se dio a ver en muchas ocasiones, apareciéndoseles
durante cuarenta días y hablándoles del reino de Dios.
En
Pentecostés sólo están los doce apóstoles.
Los
israelitas perseveraban en oír la
enseñanza de los apóstoles: (Hech 2;42) (Hech 8;25) (Hech 10;42)
Los doce,
convocando a la muchedumbre
de los discípulos, dijeron: "No es razonable que nosotros abandonemos el ministerio de la Palabra de Dios para servir a los nuevos... nosotros debemos atender a la oración y al
ministerio de la palabra". (Hech
6;2)
Los apóstoles constituyen sobre diversos ministerios a los
discípulos(Hech 6;6) (Hech 8;17)
Elección de
Matías (Hech 1;15-26)
Como hemos visto,
los TJ dicen que: "No
fue sólo a los once apóstoles, sino
a todos los discípulos..." ("La
Atalaya" de 1.5.64, pág
272). Aunque en
("De paraíso perdido a
paraíso recobrado", pág 146)
se puede leer: "Después
que Jesús fue resucitado de entre los
muertos él dijo a sus apóstoles: "Toda potestad..." y en ("La
Atalaya" de 1.10.92,
pág 20), escriben: "Jesucristo les dijo
a sus seguidores que debían
ir y hacer discípulos..." ¿En
que quedamos? ¿Fue sólo a
sus apóstoles, fue a sus discípulos, fue a sus seguidores...?