martes, 21 de septiembre de 2021

LA BIBLIA DA ESPERANZA DE UN FUTURO SIN DESASTRES NATURALES

LA BIBLIA DA ESPERANZA DE UN FUTURO SIN DESASTRES NATURALES          (JW.org 21.09.21. Tema de portada de los testigos de Jehová) 

Pensamiento de los testigos de Jehová sobre este tema:

“Los huracanes, los tifones, los ciclones y los tornados causan graves daños, como inundaciones o subidas descontroladas de la marea… millones de personas han sido víctimas de estos desastres y sufren tanto física como emocionalmente. Muchos de ellos pierden su casa, sus cosas e incluso a veces pierden a un ser querido.

Sin embargo, la Biblia puede ayudar a estas personas. De hecho, ya ha ayudado a millones de ellas dándoles consuelo, consejos y una esperanza para el futuro, un futuro sin desastres naturales (2Cor 1;3,4).

Eso se logrará gracias al Reino de Dios, en el que pronto, Jesús gobernará la Tierra a lo largo de un milenio, encargándose de que nadie, en este periodo y nunca jamás, tenga que sufrir por culpa del clima extremo”.

Análisis de este pensamiento

¿Qué dice Jesús a las muchedumbres que le siguen, en (Mt 5;48), como exhortación y resumen de todo lo que les ha estado enseñando?  Les dice: “Vosotros, pues, sed perfectos, como vuestro Padre que está en el cielo es perfecto”. Ahora, no después en un hipotético milenio. Jesucristo nunca habla de este milenio que los TJ se han inventado. Jesucristo siempre habla del momento actual, de su momento. 

¿Qué propone Jesucristo que haga el joven rico para alcanzar la Vida eterna cuando ya éste le ha dicho que está cumpliendo con los mandamientos? Le dice: “Si quieres ser perfecto, ve, vende lo que tienes y dáselo a los pobres. Así tendrás riquezas en el cielo. Luego ven y sígueme”. Ante esta respuesta de Jesús e intuyendo sus dificultades, los apóstoles quedan estupefactos y dicen: “¿Quién, pues, podrá salvarse? Jesús los mira y les contesta:  Para los hombres esto es imposible, pero no para Dios”. No se trata, pues, de una manera de vivir que Jesucristo está situando en una época futura, sino que la está proponiendo como norma de vida a quienes le han empezado a seguir y quieren imitarle. 

Jesucristo nos pide que seamos perfectos ahora, y que lo seamos porque queremos serlo aceptando la ayuda de Dios. Jesucristo no habla de un nuevo y futuro escenario en esta misma tierra que durará mil años a lo largo de los cuales iremos perfeccionándonos. Este escenario solo está en la mente de los TJ. En la Biblia solo está claro que “a los hombres les está establecido morir una vez y después de esto el juicio” (Hb 9;27). No hay una nueva prueba para la humanidad (Rom 2;1-16).  Todo ha de quedar claro en esta vida. 

Los TJ creo que deberían releer, todas las veces que les hiciera falta, los versículos (2Cor 5;6-10) de su propia biblia TNM: “Por lo tanto siempre tenemos buen ánimo y sabemos que, mientras tenemos nuestro hogar en el cuerpo, estamos ausentes del Señor, porque andamos por fe no por vida. Pero tenemos buen ánimo y gran satisfacción más bien en ausentarnos del cuerpo y hacer nuestro hogar con el Señor. Por lo tanto, también estamos teniendo como mira nuestra, sea que tengamos nuestro hogar con él o estemos ausentes de él, ser aceptos a él. Porque todos nosotros tenemos que ser puestos de manifiesto ante el tribunal del Cristo, para que cada uno reciba su retribución por las cosas hechas por medio del cuerpo, según que las cosas que haya practicado, sea cosa buena o vil”. ¿Dónde está el milenio? 

Los versículos de Corintios que acabamos de leer nos dicen que, mientras estamos vivos (“mientras tenemos nuestro hogar en el cuerpo”), andamos por fe. Pero tenemos buen ánimo y gran satisfacción en morirnos (“ausentarnos del cuerpo”) para hacer nuestro hogar en el Señor. Por ello siempre procuramos ser aceptos a él, porque cada uno de nosotros, cuando nos muramos, nos presentaremos ante el tribunal de Cristo y recibiremos la retribución por las cosas que hayamos hecho cuando estábamos vivos (“por las cosas hechas por medio del cuerpo”) Si las cosas son buenas se nos dice en (Mt 25;46), la “vida eterna”, si son viles, “condena o cortamiento eterno”. 

Ver también (Flp 1;21-26) donde Pablo nos cuenta sus inquietudes entre seguir viviendo o morir para estar con Cristo, no para esperar muerto el advenimiento del milenio, sino para gozar ya definitivamente de la vida eterna.  

Espero sus comentarios que puede enviar a: (potablava@hotmail.com)