miércoles, 30 de agosto de 2023

REFLEXIÓN AL TEMA 12: "¿Qué le ayudará a seguir estudiando la Biblia?" ¡DISFRUTE DE LA VIDA PARA SIEMPRE!

 ¿Es la Biblia la Palabra de Dios?

La Biblia a menudo se conoce como la Palabra de Dios. Y con razón, porque esto es lo que dice ser. El apóstol Pablo, por ejemplo, declara: «cuando recibisteis la palabra de Dios que oísteis de nosotros, la recibisteis no como palabra de hombres, sino según es en verdad, la palabra de Dios, la cual actúa en vosotros los creyentes. ”(1Tes 2;13).

Dios habla a los humanos. A veces lo hace directamente o en sueños, pero el principal medio de comunicación de Dios es a través de la Biblia, tal como está escrito por autores humanos inspirados: “porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.” (2Pe 1;21). Las palabras de Dios fueron escritas y transmitidas a las generaciones posteriores. Este proceso fue guiado por el Espíritu Santo. Por lo tanto, Pablo puede afirmar que la Biblia está escrita por Dios: «Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para argüir, para corregir, para instruir en justicia” (2Tim 3;16).

La Biblia ha sido escrita hace siglos, pero aún es relevante y aplicable. Nunca quedará desactualizada. “ Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre”. (Is 40; 8). Eso hace que la Biblia sea única, no comparable a ningún otro libro.

La Biblia contienen toda la información que necesitamos sobre nosotros mismos, sobre Dios y sobre nuestra relación con Él. Esta información es de vital importancia. La necesitamos para encontrar la vida eterna. 

De hecho, a partir del tema 15 de este curso, se estudiará la personalidad de Jesucristo, conocimiento que también es necesario porque la Biblia nos dice que “la vida eterna es que te conozcan a ti, el único Dios verdadero y a Jesucristo a quien has enviado” (JN 17;3)

La Biblia es como una luz en nuestro camino, que nos conduce a Dios (Sl 119;105). Jesús mismo enfatizó esto: «¡Bienaventurados los que escuchan la palabra de Dios y la guardan!» (Lc 11;28).  (Resumen de “Palabras Bíblicas”)