sábado, 8 de febrero de 2014

CREACIÓN DE LOS CIELOS Y LA TIERRA

CREACIÓN DE LOS CIELOS Y LA TIERRA

s/TJ: 

La ciencia de los hombres de este  mundo no puede resolver el secreto de la creación.  El secreto puede resolverse, y de hecho, ahora es revelado a aquellos  que  temen   Dios  y quienes  por  esta  razón tienen  la "sabiduría de arriba"... Ellos no pueden libertarse de las ligas de sus desviadas suposiciones e imaginaciones  humanas. Ellos  pasan de  un engaño a otro... ("La verdad os hará libres", pág 40)

¿Deberíamos acudir a la ciencia  moderna para establecer lo correcto del relato que da Génesis de las etapas  más primitivas de la historia de la Tierra?  No, y por muy buenas  razones. La ciencia moderna todavía está tratando de hallar sus propias explicaciones para estos mismos asuntos. ¿Cómo, entonces, pueden sus teorías servir apropiadamente como norma por la cual medir la exactitud del relato de Génesis?  ("¿Es la Biblia realmente la Palabra de Dios?", pág 19)  

Análisis

Los TJ nos animan a no acudir a la ciencia moderna para establecer lo correcto del relato que da Génesis de las etapas más primitivas de la historia de la tierra.   Pero, entonces, yo me pregunto, ¿de dónde habrán  sacado los TJ  las detalladas explicaciones  que nos ofrecen a  continuación sobre  lo  que  fue sucediendo  desde  la creación inicial hasta llegar al primer día creativo, si no es de la ciencia?. Quizá haya sido de la ciencia antigua y ésta, por lo visto,  no debe  estar en contradicción con el  contenido de  la Biblia. Por otra parte, el Génesis no dice una palabra sobre esta etapa, que, por otra parte, como luego veremos,  sólo  aparece en  la imaginación de los TJ como diferenciada del resto de la creación. 

s/TJ: 

"En el principio  creó Dios  los  cielos y  la tierra". Y los  cielos comprenden: el sol, la luna, las  estrellas, los planetas y el resto del universo. (Gn 1;1)  ("Base para creer en un nuevo mundo", pág 22)  

Análisis: 

¿Comprenden también "los cielos", la  "región de  los espíritus" dónde habitan los  ángeles?.  Si es que sí, los  ángeles no podían haber sido creados  antes de este momento y si  es que no, ¿cuándo fueron creados "los cielos" o "región de los espíritus"  dónde habitan los ángeles? Los Testigos de Jehová indican que la expresión "En el principio"  se refiere al principio de la creación de  los cielos y  la tierra,  no al principio  en sentido absoluto.

Aunque si  atendemos solamente  al vocablo  hebreo 'bará',  que se traduce por 'creó',  no se puede deducir de ahí  que signifique la creación de la nada, aquí, en  el primer versículo del Génesis, en sentido estricto, significa la acción creadora de Dios,  por las siguientes razones: 

En primer  lugar, aquí  se trata  de una  acción divina  que tiene lugar cuando nada existe fuera  de Dios,  como se  deduce de  la expresión 'berescith', que, como hemos visto, tiene valor absoluto y equivale, por tanto, a  "cuando nada existía".  (Los TJ tienen más difícil esta explicación porque  para ellos la acción creadora de Dios ya se había iniciado con  la creación de el LOGOS y de los ángeles). 

En segundo lugar, esta acción divina  tiene por objeto 'el cielo y la  tierra', expresión  que equivale  a nuestro  'universo', o  al latín  'omnia', o  sea, todas  las  cosas (entre  las que podemos incluir los ángeles).  Por eso, si  la materia fuera anterior a la acción  creadora  de  Dios,  la expresión hebraica  sería  falsa, porque,  al menos  una cosa,  la materia,  no estaría incluida en ella. 

Además,  si  la materia  no  fuese  también  objeto de  la  acción creadora de Dios, Moisés incurriría en contradicción consigo mismo, precisamente al principio del Pentateuco. En efecto, lo que  él  quiere enseñar principalmente  en  sus escritos,  es  el monoteísmo puro (Ex  20).  Pero si la  materia fuese independiente de Dios (no  creada por El), habría que decir que también ella es una divinidad, o bien, que además del  Dios descrito  por Moisés existe al menos otro, que ha hecho la materia.  Ambas conclusiones están en flagrante contradicción con el fin que Moisés persigue al escribir. 

Finalmente la  tradición hebrea  siempre interpretó el  'bará' del primer versículo del Génesis en el sentido estricto de creación de la nada: "Dios  ha creado todas las cosas de  la nada" (2Mc 7;28). El historiador Flavio Josefo y  el filósofo Filón aseguran que los hebreos  sostenían que  Yavé había  sacado todas  las cosas  de la nada.  Y los primeros cristianos de Jerusalén, que procedían todos del judaísmo, comenzaban así una  de sus oraciones a Dios: "Señor, tú que hiciste  el cielo y la  tierra, y el mar y  cuanto en ellos hay" (Hech 4;24) 

s/TJ: 

Bueno, ¿qué dice el relato de Génesis en la Biblia?  Primero, dice, Dios creó "los cielos  y la tierra".  Entonces procedió a  preparar la Tierra para que el hombre la habitara ("¿Es la Biblia realmente la Palabra de Dios?", pág 12)
  
Dios, mediante  su espíritu  santo -que  es su  fuerza activa-  creó los cielos, la  Tierra y toda cosa  viviente (Sl 33;6) (Gn  1;2) (Sl 104;30)  ("Usted puede vivir...", pág 37) 

En este punto empezó  la semana creativa que se describe  en en el libro del Génesis  y que  sólo tiene  que ver  con el  desarrollo final  de la tierra y  la colocación de  vida sobre  ella...   ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 10) 

Análisis

Según  los TJ,  primero,  Dios crea  "los cielos   la tierra"  y después de miles  de millones  de años  en los  que la  tierra va formando lentamente su estructura, Dios  inicia un período de seis días, (que se convertirán exactamente  en 42.000 años por  obra y gracia de los cálculos que efectúan  los TJ) en el que procederá a la preparación de esta Tierra para que pueda acoger al hombre.  Y, ¿por qué separan  los TJ la creación en dos  partes?  Porque muy a su pesar han tenido que reconocer  que la formación de la tierra y del universo  en general exige miles  de millones de años,  o sea, que desde "el principio" a lo que se entiende por primer día de la creación pasaron miles de millones de años.  Pero  no queriendo dejar de aceptar  como exactos los años que la  Biblia da para los distintos personajes y hechos que en ella aparecen y se narran, no pueden dividir en  seis  días  iguales todo  el  tiempo  que ha transcurrido desde "el principio" hasta el último día de la creación, porque entonces los períodos y las fechas se les escapan.  En este  caso, por ejemplo, Adán no podría estar a unos 6.000 años de  distancia de nosotros, sino a muchos  más y por ahí no pasan.

Los TJ,  pues, no aceptan que  la frase inicial de  la Biblia: "Al principio creó Dios los cielos  y la tierra", expresa, en resumen, la obra creadora  de Dios que luego  se declara en el  resto de la sección del primer  capítulo.  No se dan cuenta los  TJ que además de ser la  interpretación que pide el contexto, lo  dice muy claro el Éxodo: "... pues en seis días  hizo Yavé los cielos y la tierra el mar  y cuanto en ello  se contiene..." (Ex 20;11) (Ex 31;17) (NM).  No se trata, pues, de dos actuaciones distintas.

En la  Biblia hay dos  relatos de  la creación.  El  primero, que, según  los expertos,  está  basado en  la 'tradición  sacerdotal', abarca (Gn 1;1) a (Gn 2;3)  y se considera un relato 'cosmogónico' ya que en él se describe la formación del cosmos.  El segundo, que esta basado en la 'tradición Yavista', abarca (Gn 2;4) a (Gn 2;20) y  se considera  un relato 'antropológico' ya  que éste  tiene su principal preocupación en el hombre, considerándose una ampliación y un complemento de la narración de la creación del hombre, que no había encontrado  lugar en  la simetría  de la  primera narración. Aunque en el primer relato parece que la hierba y los árboles son creados antes que el hombre (Gn 1;11-13) (Gn 1;26) contrariamente al segundo en el que el hombre es creado antes que las plantas (Gn 2;4-10), muy bien podría referirse,  en  este  segundo, a la vegetación del propio jardín de Edén. (s/TJ, que no aceptan las distintas tradiciones que dieron origen al relato del Génesis y a otros, consideran que  el  primer relato  es  'cronológico' y  el segundo 'por orden de importancia')  

En la lengua hebrea no  hay un vocablo que corresponda exactamente al  "kosmos" de  los griegos,  y por  eso la  expresión "cielos  y tierra" es una locución redundante  para designar el mundo visible en su doble manifestación de orbe terráqueo y espacio sideral.  

s/TJ: 

Durante muy largo tiempo. la tierra fue una bola de gas caliente y, sin duda, se parecería mucho al sol como lo vemos hoy ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 9) 

"Envolvía a  la tierra  un "manto  de oscuridad" que  se debía  -según se cree- a  una grande y  espesa nube  de polvo, la  cual no dejaba  que la  gloria de la tierra  y su brillo pasara de la  tierra misma, ni permitía que pasara a la tierra la luz del sol y otras estrellas." ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 10) 

"Después  de muy  largo  tiempo,  la tierra  empezó   enfriarse.   al enfriarse lentamente  cambió de una bola  de gas ardiente a  una bola de líquido hirviente" ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 10) 

"Muy lentamente,  durante miles y miles de años... se formó una corteza sobre este líquido que se endureció al pasar el tiempo.  A medida que la tierra continuó  enfriándose su corteza se  hizo más y más áspera. Hoy esta corteza forma el suelo sobre el cual caminamos...  De hecho pasaron miles de millones de años." ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 10)("Base para creer...", pág 22)("La Atalaya" del 15.2.65, pág 106) 

Análisis

Desde "el principio"  al primer día de la creación,  se acepta por los  TJ que pudieron pasar miles de millones  de años...  "se reconoce ahora que el universo tiene una edad que se calcula en miles de millones de años" ("La Atalaya" de 15.6.65, pág 106).  De todas maneras, a  veces parece que se resisten a  aceptarlo de buen grado, por ejemplo en ("¡Despertad!" de 22.7.68, pág 30)
  
s/TJ: 

A medida que se iba enfriando (la tierra) algunos vapores se condensaron y llegaron a formar mares que cubrieron toda la tierra. ("Base para creer...", pág 24)
  
Al tiempo  que la tierra se  enfriaba se fueron formando  a su alrededor espesas nubes de vapor de agua,  que descansaban sobre la superficie del océano como una neblina muy espesa y húmeda. ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 11)

Después que  la tierra se  había enfriado, su  corteza se cubrió  poco a poco de  agua hasta que  lo único que había  era un océano  grande sobre toda ella.  Esto quiso  decir que la tierra ya no  estaba caliente y por lo tanto no brillaba como antes.  Seguía en completa oscuridad (Gn 1;2) ("De paraíso perdido a paraíso recobrado", pág 10) 

Análisis: 

Aunque los Tj hoy enseñan estas teorías, años antes -como en todo- habían enseñado otras completamente distintas.  Así en ("La verdad os hará libres", pág 58-60) explican con todo detalle... y con "la evidencia" siempre por delante... que la tierra  llegó a estar completamente envuelta con acuosos y mineralizados cintos, a semejanza de bandas apretadas suspendidas en las alturas alrededor del globo terrestre.  Había una serie de anillos moviéndose en las alturas en dirección al ecuador,  así la  apariencia de  nuestro planeta  era semejante   la  de Saturno  en  el presente. (Ver contenido de las  páginas indicadas de "La verdad  os hará libres" en "Los falsos manejos de los TJ", pág 83-85)
  
Aunque los TJ despreciaban a los científicos, copiaron  sus teorías y fallaron. Creyeron que  la Tierra fue  desprendida del Sol.  Hoy esto  no lo admiten. El libro  citado anteriormente, en su pág  55, se  puede leer:  "Ya sea  que la masa de  materia que componía  la Tierra  haya sido  arrojada del  ígneo Sol  alrededor del cual gira, o  cuánto tiempo antes de eso la masa de la Tierra había sido formada, el registro no lo dice". Hoy  desechan  esta teoría.   

El  libro  ("Nuevos cielos   nueva tierra", pág 36), dice: "La  teoría que  una vez  gozó de  mucha popularidad  y que decía que  el  globo terrestre  era de origen secundario, es decir, que su masa  fue extraída de la masa del Sol por el poder de atracción de  algún sol todavía más grande que iba pasando, ahora ha sido abandonada por casi todos los científicos". Ya que el relato  de la Biblia no dice nada de  cómo ni cuándo fue formada la Tierra, lo mejor sería callar   no  adelantarse apuntando teorías humanas y que  luego tienen que cambiarse porque resultan absurdas. Y menos  tener el  atrevimiento de decir que Dios se lo  ha revelado y que  por eso ellos las  defienden ya que saben más que los científicos.