jueves, 27 de marzo de 2014

JESÚS, PRIMER HIJO DE DIOS, FUE EL PRINCIPIO DE LA CREACIÓN POR DIOS

s/TJ: 
¿Quién fue el primer hijo de Dios de la región de los espíritus a quien El creó? ("El propósito eterno de Dios va triunfando ahora", pág 26 y 27) 

El Hijo, o la Palabra, es la primera creación de Dios. ("La Atalaya" 15.1.92, pág 20)
Jesús, en su existencia en los cielos...  fue "el principio de la creación por Dios" (Ap 3;14). No sería correcto interpretar que "principio" (griego: arkjé) significa que Jesús fue el 'principiador' de la creación divina.   Juan, en sus escritos bíblicos, usa varias formas de la palabra griega arkjé más de 20 veces, y siempre tienen el significado común de "principio".  Sí, Jesús fue creado por Dios como el principio de la creación invisible de Dios.   ("La Atalaya" de 15.3.63, pág 185-186) 
 
Análisis:  
La región de los espíritus tuvo que ser creada por Dios -siguiendo la doctrina de los Testigos de Jehová- y en ella debería habitar su Hijo y las miríadas de miríadas de ángeles. Así, pues, creó a su Hijo, –siempre según los TJ- a quien siguió la creación de todas “las demás cosas”.

De todo ello deberíamos deducir que el principio de la creación ya no sería el Hijo, sino la morada de Dios o la región de los espíritus, o quién sabe si las miríadas de miríadas de ángeles...

E insistiendo con el tema, si Dios quiso ser Padre, lo más adecuado es que su Hijo fuera engendrado, no creado. Y esto es precisamente lo que dice “¿Debería Vd. creer en la Trinidad?, en su pág. 16) de los propios TJ: “El Hijo Unigénito fue engendrado directamente por Dios”. Crear es hacer algo de la nada y engendrar quiere decir “procrear, propagar la propia especie” (pág. 15). Por lo tanto, si Dios engendró a su Hijo, éste ha de ser de la misma naturaleza que el Padre, o sea, de naturaleza divina. En una palabra, ha de ser Dios. 

Los TJ al decir, por otra parte, que el Hijo es creado, crean un problema entre el Padre y el Hijo y luego nos lo pasan a los "trinitarios". Porque si el Padre es eterno y el Hijo es creado, lógicamente el Hijo tiene una determinada edad que siempre será inferior a la del padre que es eterna. Originada esta diferencia entonces cargan contra los "trinitarios" porque según ellos decimos que el Padre y el Hijo tienen la misma edad. Primero, los "trinitarios" jamás hablamos de edad cuando comparamos al Padre y al Hijo. Y segundo si nuestra fe es que el Hijo fue engendrado en la eternidad, tenemos toda la razón si decimos que son igualmente eternos. No podemos hablar de tiempo ya que en la eternidad no hay medida de ninguna especie. Todo lo que se mueve en la eternidad es igualmente eterno, no se puede medir con más o menos tiempo. 

El versículo (Ap 3;14) es uno de los favoritos de los TJ para tratar de "probar" que Jesucristo es sólo un ser creado, el primer ángel que Dios hizo. 

Pero hemos de decir que "Principio de la creación", puede querer decir "el primer ser creado", pero también puede querer decir "causa primera".  Y ésta es la interpretación que se ajusta mejor a todos los demás textos de las Sagradas Escrituras que de alguna manera pueden relacionarse con este pasaje.  Cuando leemos: "Todas las cosas fueron hechas por El", tanto podemos estar diciendo "por El" como medio instrumental, o "por El" como principio causal, como cuando decimos: "Todo lo hago por mis hijos". La expresión así interpretada da luz para entender (Col 1;16):"Todo fue creado por El y para El". Él es, por tanto, "el principio" (Ap 3;14) -"por El"- y el "primogénito" (Col 1;15) -"para El".

Jesucristo es la base, el fundamento, el origen, la causa primitiva de la creación de Dios. Es el mismo mensaje que presenta no sólo (Col 1;15-18), sino también (Gn 1,26) (Jn 1;3) (Hb 1;2) (Hb 1;10-12).

s/TJ: 
Los individuos que así opinan dicen que la expresión griega (en Ap 3;14) para el Principio de las criaturas de Dios quiere decir el origen (o fuente principal) de las criaturas de Dios. Entre los que prefieren esta idea se cuenta al célebre helenista Henry Alford. No obstante, en su obra The Greek New Testament, Alford concede: “La simple palabra “arkhé” permitiría el significado de que Cristo es el primer ser creado (¡Despertad! del 8 de agosto de 1979, pág 28 y 29)

Análisis: 
Los TJ se callan la continuación: “Pero toda consideración de los requerimientos del contexto y de la Persona de Cristo según se expone en este libro contradice tal punto de vista” (The Greek New Testament, volumen III, pág 588). No conformándose con descontextuar las declaraciones de un erudito, acto seguido tergiversan a otro. Dicen:

s/TJ:
Según dice The Espositor’s Greek New Testament, para entender que Revelación 3;14 quiere decir que Jesús es la fuente activa de la creación, en vez de la primera persona creada, uno tendría que interpretar arkhé como se hace en la filosofía griega y la literatura sapiencial (no bíblica) de los judíos (¡Despertad! del 8 de agosto de 1979, pág 28 y 29)

Análisis: 
Los TJ sacan esta cita de su contexto, porque al contrario de lo que dicen, el Expositor’s compara (Ap 3;14) con Colosenses y (Jn 1;3), para concluir con una base bíblica en que los tres pasajes describen a Jesús como el creador. Pero, es más, en ningún lugar del Expositor’s ni se dice ni se implica que se “tiene que interpretar arkhé como se hace en la filosofía griega y literatura sapiencial”.

Es interesante ver como el término principio “arkhé” se aplica también a Dios Padre en (Ap 21;6) y (Ap 22;13)

Por otra parte, en el NT, se designa a Jesús como "primicias" (1Cor 15; 20-23); "jefe": (Hb 12;2); "cabeza": (Ef 1;22) (Ef 4;15) (Ef 5;23) (Col 1;18) (Col 2;10) (Col 2;19). Estas palabras traducen el griego "arche", o derivados (Véase punto 675 de la "Concordancia greco-española del Nuevo Testamento” de Hugo M. Petter). "Arche" es la raíz griega de palabras como arzobispo, arquitecto, monarquía y otras que se refieren a alguien que es jefe de otros. La Traducción del Nuevo Mundo traduce el plural de la misma palabra como "autoridades de gobierno" en (Lc 12;11). De modo que no hay fundamento para la afirmación de que (Ap 3;14) convierte a Jesucristo en un ser creado. 

"Principio" indica siempre prioridad con relación a alguien o a una cosa.   Esta prioridad puede referirse a tiempo (y entonces significa realmente comienzo o principio) o a categoría y dignidad 
(y entonces viene a significar poder, autoridad).  No obstante, al ser la lengua hebrea poco apta para expresar nociones abstractas, lo que la Biblia llama "principio" equivale a "comienzo", "cabeza" o "primicias", es decir, lo que viene primero.   Se puede decir, pues, que el principio de todo es Dios; se le llama, en efecto, “el Primero y el último”: (Is 41;4) (Is 44;6) (Is 48;12); él es el comienzo, así como el fin, de todo (Ap 21;6) (Ap 1;8).  En el NT, en diversas ocasiones, también se designa a Cristo como principio, primero y último de toda la creación, de todo lo que existe, de la Iglesia y de los resucitados, siendo unos y otros una nueva creación. (Col 1;18) (Ap 1;18) (Ap 2;8) (Ap 3;14) (Ap 22;13).