viernes, 9 de mayo de 2014

LA GRAN TRIBULACIÓN (Definición y evolución de esta doctrina)

s/TJ:

El ministerio de Jesús en la Tierra se acercaba a su fin, y los discípulos estaban ansiosos por saber qué les depararía el futuro. Así que, pocos días antes de la muerte de su Maestro, cuatro de los apóstoles le preguntaron: “¿Cuándo serán estas cosas, y qué será la señal de tu presencia y de la conclusión del sistema de cosas?” (Mat. 24:3; Mar. 13:3). Él les contestó con la extensa profecía que se halla en los capítulos 24 y 25 de Mateo. En ella predijo numerosos sucesos de gran interés. Sus palabras encierran un profundo significado para nosotros, pues también nos intriga lo que traerá el mañana.

A lo largo de los años, los siervos de Jehová han estudiado la profecía de Jesús sobre los últimos días con mucho cuidado y pidiendo siempre la guía divina. ¿Con qué objetivo? Comprender mejor en qué momento de la historia se cumplirían los sucesos predichos. Analicemos, por ejemplo, las siguientes tres preguntas: ¿Cuándo comienza la “gran tribulación”? ¿Cuándo juzga Jesús a “las ovejas” y “las cabras”? ¿Cuándo llega, o viene, Jesús? (Mat. 24:21; 25:31-33.) 

Durante algunos años pensamos que la “gran tribulación” había empezado en 1914 con la Primera Guerra Mundial. Y creíamos que Jehová había hecho que “se acortaran aquellos días” en 1918, cuando terminó el conflicto, para que el resto ungido pudiera dar a conocer las buenas nuevas a todas las naciones (Mat. 24:21, 22). Al completarse esta obra de predicación, el imperio de Satanás sería destruido. En resumen, pensábamos que la gran tribulación constaría de estas tres fases: un comienzo (de 1914 a 1918), un período de interrupción (de 1918 en adelante) y un final (en Armagedón)

Tiempo después, tras examinar más a fondo la profecía de Jesús sobre los últimos días, entendimos que parte de ella tiene dos cumplimientos (Mat. 24:4-22). El primero tuvo lugar en Judea en el primer siglo, y el segundo ocurriría a escala mundial en nuestros días. Comprender este hecho arrojó luz sobre otros aspectos de la profecía.

También comprendimos que la primera fase de la gran tribulación no se inició en 1914. ¿Por qué llegamos a esa conclusión? Porque la Biblia revela que comenzaría con un ataque a la religión falsa, no con una guerra entre naciones. Por lo tanto, los acontecimientos que se desencadenaron a partir de 1914 no dieron comienzo a la gran tribulación, sino que fueron un “principio de dolores de angustia” (Mat. 24:8). Estos “dolores de angustia” tuvieron un primer cumplimiento en Jerusalén y Judea entre los años 33 y 66 de nuestra era.

Entonces, ¿qué suceso marcará el comienzo de la gran tribulación? Jesús predijo: “Cuando alcancen a ver la cosa repugnante que causa desolación, como se habló de ella por medio de Daniel el profeta, de pie en un lugar santo (use discernimiento el lector), entonces los que estén en Judea echen a huir a las montañas” (Mat. 24:15, 16). Estas palabras se cumplieron por primera vez en el año 66: el ejército romano (“la cosa repugnante”) estuvo “de pie en un lugar santo” cuando atacó Jerusalén y su templo (considerado santo por los judíos). En el segundo cumplimiento, la Organización de las Naciones Unidas (“la cosa repugnante” de la actualidad) estará “de pie en un lugar santo” cuando ataque a la cristiandad (santa para los supuestos cristianos) y al resto de Babilonia la Grande. Este suceso, descrito en Revelación 17:16-18, dará comienzo a la gran tribulación

Jesús también profetizó: “Aquellos días serán acortados”. Estas palabras tuvieron un cumplimiento inicial en el año 66, cuando los romanos acortaron su ataque. Los cristianos ungidos de Jerusalén y Judea aprovecharon la ocasión para huir, y así se pudo salvar su “carne”, o vida (lea Mateo 24:22; Mal. 3:17). Y en el futuro, ¿qué podemos esperar que ocurra? Durante la gran tribulación, Jehová acortará el ataque de las Naciones Unidas contra la religión falsa para evitar que, junto con ella, sea destruida también la religión verdadera. Esto permitirá que el pueblo de Dios se salve.

¿Qué sucederá tras la primera fase de la gran tribulación? Las palabras de Jesús indican que pasará algún tiempo antes del inicio del Armagedón. Pero ¿qué ocurrirá en ese intervalo? Hallamos la respuesta en Ezequiel 38:14-16 y Mateo 24:29-31 (léalo). Después vendrá el Armagedón, que se corresponde con la destrucción de Jerusalén en el año 70 (Mal. 4:1). Alcanzando su punto culminante en la batalla del Armagedón, la gran tribulación será una experiencia única, “como la cual no ha sucedido una desde el principio del mundo” (Mat. 24:21). Y cuando haya pasado, comenzará el Reinado de Mil Años de Cristo

Esta profecía acerca de la gran tribulación nos fortalece. ¿Por qué? Porque nos garantiza que, sin importar las dificultades que tengamos que afrontar, el pueblo de Dios como grupo sobrevivirá a la gran tribulación (Rev. 7:9, 14). Pero ante todo, nos llena de alegría saber que, en el Armagedón, Jehová reivindicará su soberanía y limpiará su santo nombre (Sal. 83:18; Ezeq. 38:23) (La Atalaya 15/7/2013, pág 3-8)

Análisis:

Los propios TJ nos explican su doctrina y la evolución que ha sufrido la misma a lo largo de los últimos años.