jueves, 25 de septiembre de 2014

LOS PRIMEROS CRISTIANOS SON UNGIDOS Y RECIBEN EL ESPÍRITU SANTO

s/TJ:

En el Pentecostés del año 33, unos ciento veinte hombres y mujeres fieles recibieron la oportunidad de formar parte del grupo de 144.000 que gobernará con Jesús durante el Día del Juicio. (Hech 1;12-15) (Hech 2;1-4).

"En el día quincuagésimo de su resurrección de entre los muertos  el Señor Jesucristo derramó espíritu santo desde el cielo y fundó una Congregación de otros hijos de Dios engendrados por espíritu" ("Vida eterna en libertad de los Hijos de Dios', pág 382).

Todos los discípulos reunidos en aquella ocasión fueron declarados justos y bautizados con espíritu santo y así se convirtieron en los primeros “cristianos ungidos”, primer paso para que obtuvieran la recompensa celestial. En efecto, los discípulos de Jesús vieron el espíritu santo asentarse en la forma de lenguas como de fuego sobre la cabeza de los reunidos

A partir de ese momento, Satanás los sometería a muchas pruebas, y ellos tendrían que mantenerse leales a Jehová. Solo recibirían la corona de la vida si eran fieles hasta la muerte (Ap 2;10).

En el día de Pentecostés, los discípulos también comprendieron por primera vez que las palabras de (Sl 16;10) se referían al resucitado Jesucristo. El salmista había dicho: "No dejarás [Jehová Dios] mi alma en el Seol. No permitirás que el que te es leal vea el hoyo". Los discípulos se dieron cuenta de que este pasaje no podía hacer referencia al rey David, pues su tumba permanecía con ellos. No es de extrañar que unas tres mil personas de las que oyeron la explicación de la nueva luz quedaran tan convencidas que se bautizaran ese mismo día. (Hech 2;14-41) ("La Atalaya" de 15.5.95, pág 11).

Sólo los pertenecientes a la "manada pequeña" de 144.000 "elegidos", es decir, los "ungidos", reciben al espíritu santo y son engendrados espiritualmente por él. Por eso "... El (Cornelio) y sus compañeros gentiles creyentes recibieron en aquel tiempo el espíritu santo con el cual los 'escogidos' de Dios son sellados..." ("Entonces queda terminado el misterio de Dios", pág 223).

Análisis:


Los TJ abren una clasificación para los cristianos que no aparece en la Biblia por ninguna parte: "cristianos ungidos". Son los 144.000 cristianos ungidos que gobernarán con Jesucristo desde el cielo el Reino de Dios y como se dice más adelante, reciben el espíritu santo y son engendrados espiritualmente por él.

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