jueves, 13 de noviembre de 2014

JESUCRISTO ES DIOS. PRIMERA PARTE


PASAJES DE LA BIBLIA QUE APOYAN LA INTERPRETACION DE QUE JESUCRISTO ES DIOS

Pr 8;22-25       

"Diome Yahveh el ser en el principio  de sus caminos, antes de sus obras antiguas.  Desde  la eternidad fui yo ungida; desde los  orígenes antes que la tierra  fuese.  Antes que los abismos, fui engrendrada yo; antes que fuesen las fuentes de abundantes aguas. Antes que los montes fuesen cimentados; antes que los collados, fui yo concebida.  Antes que hiciese la tierra, ni los campos, ni el polvo primero de la tierra.  (NC)

"Jehová  mismo  me produjo  como  el  principio  de  su camino,  el  más temparano de sus logros de  mucho tiempo atrás.  Desde tiempo indefinido fui instalada, desde el comienzo,  desde tiempos anteriores a la tierra. Cuando no había profundidades acuosas  fui producida como con dolores de parto, cuando no había manantiales  cargados pesadamente de agua.  Antes de  que  las montañas  mismas  se  hubieran  asentado, primero  que  las colinas, fui  producida como con dolores  de parto, cuando aún  no había hecho él  la tierra y  los espacios abiertos y  la primera parte  de las masas de polvo de la tierra productiva." (NM)

s/TJ:

Jesús, en  su existencia en los  cielos, era el "Primogénito  de toda la
creación" (Col  1;15).  Fue "el  principio de  la creación de  Dios" (Ap 3;14,  según la  versión  católica de  Straubinger.   No sería  correcto interpretar que "principio"  (griego: arkjé) significa que  Jesús fue el 'principiador' de la  creación divina.  Juan, en  sus escritos bíblicos, usa varias formas de la palabra griega  arkjé más de 20 veces, y siempre tienen el  significado común de  "principio".  Sí, Jesús fue  creado por Dios como el principio de la creación invisible de Dios.

Note la  relación estrecha que hay  entre esas referencias al  origen de Jesús y las expresiones de la "Sabiduría" figurativa en el libro bíblico de Proverbios:  "Yahvéh me creó,  primicia de  su camino, antes  que sus obras más antiguas...  Antes que  los montes fuesen asentados, antes que las colinas,  fui engendrada...   No había  hecho aún  la tierra  ni los campos, ni  el polvo primordial  del orbe" (Pr 8;22-26)(BJ).   Aunque se usa el término "Sabiduría" para personificar  a aquel a quien Dios creó, la mayoría  de los  eruditos concuerda  en que  es realmente  una figura retórica  para  aludir a  Jesús  como  criatura  celestial antes  de  su existencia humana.

Jesús, como la  "Sabiduría" antes de que fuera humano, pasa a decir que "yo estaba allí (con Dios), como arquitecto" (Pr 8;30). En conformidad con  ese  papel   de  arquitecto  u  obrero   maestro  -"artífice",  BC; "aprendiz", Nueva  Biblia Española (NBE)-  que trabajaba con  Dios, (Col 1;16) dice de Jesús  que "por medio de él, Dios creó todo  lo que hay en el cielo y en la tierra" (Versión Popular (VP)).

De modo que  fue por medio de  este obrero maestro, su  socio menor, por decirlo así,  como el Dios Todopoderoso  creó todo lo demás.   La Biblia resume este  asunto así:  "Para nosotros  no hay sino  un solo  Dios, el Padre,  de  quien  vienen  todas  las cosas,  (...)  y  un  solo  Señor, Jesucristo, por quien son todas las cosas".  (1 Cor 8;6, Str.)

Sin  duda, fue  a este  obrero maestro  a quien  Dios dijo:  "Hagamos al hombre  a  nuestra imagen"  (Gn  1;26).   Algunos  han alegado  que  las palabras "hagamos" y  "nuestra" en esta expresión  indican una Trinidad. Pero si alguien dijera: 'Hagamos  algo para nosotros', normalmente nadie entendería que dentro del que hablara hubiera varias personas combinadas en  una sola.   Lo que  se quiere  decir es  simplemente que  dos o  más personas van a  trabajar juntas en algo.  Así, también,  cuando Dios usó "hagamos" y "nuestra", sencillamente estaba  hablando a otra persona, su primera creación  celestial, el obrero  maestro, Jesús antes de  su vida como humano. ("¿Debería creer usted en la trinidad?", pág 14)

Análisis:

En la versión NM, los TJ  traducen (Pr 8;22): "Jehová mismo me  produjo como el principio de  su camino...".  En cambio,  en la  traducción  BJ que  enplean  para este  comentario aceptan "me creó" (?)

Is 7;14

Véase comentario en (Mt 1;23)

Is 9;6

s/TJ:            

"Porque un  niño nos ha nacido,  un hijo se  nos ha dado; y  el gobierno principesco vendrá a estar sobre su  hombro.  Y por nombre se le llamará Maravilloso  Consejero, Dios  Poderoso, Padre  Eterno, Principe  de Paz" (NM)

Análisis:
 
Los  TJ no  dudan que  este versículo  es una  profecía acerca  de Jesucristo, a quien identifican con el "Dios Poderoso"; pero creen que el Hijo es solamente "un  dios", uno de los "muchos 'dioses' y muchos  'señores'" (1Cor  8;5), así  como se  llama a  Satanás, el diablo, "el dios de este sistema  de cosas" (2Cor 4;4).  Ellos ven a jesucristo como  un ser creado, un ángel.  Según  la teología de los TJ,  El no es el  Todopoderoso Dios Jehová.  ("La  Atalaya" de 15.1.92, pág 22)

Los TJ tienen en realidad dos dioses, uno grande y uno pequeño: Un "Dios  Todopoderoso", Jehová,  y un  "Dios poderoso",  Jesucristo; aunque en la práctica, sólo Jehová recibe toda la adoración.

Is 43;10-11

"Vosotros sois  mis testigos, dice  Jehová, y  mi siervo que  yo escogí, para que me conozcáis y creáis, entendáis  que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios,  ni lo será después de mí.  Yo,  yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve..." (RV)

Is 44;8

"...No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no conozco ninguno" (RV)

Mt 1;21

"...Dará a luz  un hijo a quien pondrá por  nombre Jesús, porque salvará a su pueblo  de sus pecados"  (NC) (En  relaciùn a (Sl  130;8) :..."Dios redimirá a Israel de todos sus pecados" (NC)

Los TJ traducen en el mismo sentido (NM).

Mt 1;18-25

"...He aquí que una virgen concebirá y  parirá un hijo.  Y le pondrá por nombre "Emmanuel", que quiere decir "Dios con nosotros" (NC) En relación a (Is 7;14): "El  Señor mismo os dará  por eso la señal: He  aquí que la Virgen grávida  da a luz  un hijo  y le llama  Emmanuel" (NC) y con (Is 9;6): "Porque nos ha  nacido un  niño, nos ha sido dado un hijo, que tiene sobre su hombro la soberanía, y que se llamará  maravilloso consejero, Dios fuerte, Padre sempiterno, Principe de la paz".  (NC)

"...¡Miren!  La virgen llegará  a estar encinta y dará a  luz un hijo, y le pondrán por nombre Emmanuel" que, traducido, significa: "Con nosotros está Dios" (NM).  En relación a (Is 7;14): "...Por lo tanto Jehová mismo les  dará a  ustedes una  señal:  ¡Miren!  La  doncella misma  realmente llegará a estar encinta  y ella está dando a luz  un hijo, y ciertamente le pondrá por nombre Emmanuel" (NM),  y con (Is 9;6): "...Porque un niño nos ha nacido, un hijo se nos  ha dado; y el gobierno principesco vendrá a estar  sobre  su hombro.   Y  por  nombre  se le  llamará  Maravilloso Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Principe de Paz".  (NM)

s/TJ:

Dios transfirió  la fuerza  de vida de  Jesús a la  matriz de  María (Mt 1;18-25)  Pero, como  hemos  visto,  aquél no  fue  el  principio de  su existencia.  El mismo declaró que había "descendido del cielo" (Jn 3;13) Por eso fue sencillamente natural que dijera más tarde a sus seguidores: " Y cuando veais  al Hijo del hombre (Jesús) subir  adonde estaba antes" (Jn 6;62)

Milagrosamente, pues, Jehová Dios hizo que  su Hijo naciera como el bebé Jesús en Belén  de Judea.  Jesús creció hasta ser  una hombre perfecto a la edad  de treinta  años, el  equivalente del  hombre perfecto  Adán en Edén.

Análisis:

Dios demostró su amor profundo al mundo con la prueba suprema de “entregarnos"  a su Hijo. Este no sólo se encarnó, no sólo fue "enviado", sino que Dios nos  lo dió, que en el contexto es: lo entregó a la muerte (Jn 3;16)

Por otra  parte, si el  Hijo es una creación  de Dios, o  sea, fue hecho de la  nada, como cualquier otro ser creado, a qué viene la expresión: "Porque tanto amó Dios al mundo..." ¿Dónde está la señal de su amor? ¡Fue mucho más grande la acción  de Abraham dispuesto a sacrificar a su hijo Isaac!  (Gn 22;1 y ss)

¿Qué quiere decir perfecto?, porque sea cual sea su significado ha de ser aplicable a Adán y a  Jesús.  Adán, podía pecar, y de hecho pecó.  Jesús era inmune de pecado: (Jn 8;46) (2Cor 5;21) (Hb 4;15) (1Pe 2;22) (1Jn 3;5)

Mt 3;3

Comparar con (Is 40;3)

Mt 3;16-17

"Bautizado Jesús, salió luego del agua.  Y he aquí que vió abrírsele los cielos y  al Espíritu de  Dios descender como  paloma y venir  sobre él, mientras una voz del  cielo decía: "Este es mi hijo  muy amado, en quien tengo  mis complacencias"  (NC)  y tambien (Mt 17;5): "Aún estaba él hablando, cuando los cubrió una nube resplandeciente, y salió de la nube una  voz  que  decía:  "Este  es  mi Hijo  amado,  en  quien  tengo  mis complacencias; escuchadle"  (NC) y también  (2Pe 1;17): " El  recibió de Dios Padre el  honor y la gloria  cuando de la magnÆfica  gloria se hizo oir aquella voz  que decía: "Este es  mi Hijo muy amado,  en quien tengo mis complacencias" (NC)

"Después  que fue  bautizado  Jesús salió  inmediatamente  del agua;  y, ¡mire! los cielos  se abrieron, y vio descender como  paloma el espíritu de Dios  que venía  sobre él  y ¡Mire!  tambien hubo  una voz  desde los cielos que decía: "Este es mi Hijo,  el amado, a quien he aprobado" (NM) y también (Mt 17;5):  " ...Mientras todavía hablaba él,  ¡mire! una nube brillante los cubrió  con su sombra, y, ¡mire! una  voz procedente de la nube,  diciendo: "Este  es  mi  Hijo, el  amado,  a  quien he  aprobado; escúchenle" (NM), y también (2Pe 1;17): "...Porque él recibió de Dios el Padre honra y  gloria, cuando palabras como éstas fueron  dirigidas a él por la magnÆfica gloria: "Este es mi hijo, mi amado, a quien yo mismo he aprobado" (NM)

s/TJ:

Al  principio  del  ministerio  de  Jesús,  cuando  él  salió  del  agua bautismal, la  voz de  Dios desde el  cielo dijo: "Este  es mi  Hijo, el amado, a quien he aprobado".  (Mt  3;16-17) ¿Estaba diciendo Dios que él era su  propio hijo, que  se aprobaba  a sí mismo,  que se enviaba  a sí mismo?  No;  Dios el Creador decía  que él, en su  posición de superior, aprobaba al inferior, su Hijo Jesús, para la obra necesaria.

Jesús  indicó la  superioridad de  su Padre  al decir:  "El espíritu  de Jehová está sobre  mí, porque él me ungió para  declarar buenas nuevas a los pobres".  (Lc  4;18) El ungimiento se efectúa cuando  un superior da autoridad o una  comisión a alguien que todavía no  tiene autoridad.  Es obvio  que aquí  el superior  es Dios,  porque ungió  a Jesús  y le  dio autoridad que Jesús anteriormente no tenía.

Jesús manifestó claramente  la superioridad de su Padre  cuando la madre de dos discípulos pidió que sus hijos  se sentaran uno a la derecha y el otro  a la  izquierda de Jesús cuando  él entrara  en su  Reino.  Jesús contestó: "Sentarse  a mi  derecha y a  mi izquierda no  es cosa  mía el concederlo, sino  que es para quienes  está preparado por mi  Padre", es decir, Dios. (Mt 20;23)(BJ) Si Jesús hubiera sido el Dios Todopoderoso, podría haber dado aquellos puestos. Pero Jesús no podía darlos, porque le tocaba a Dios darlos, y Jesús no era Dios.

Las mismas  oraciones de  Jesús son ejemplo  convincente de  su posición inferior.  Cuando  se acercaba el  tiempo en  que Jesús había  de morir, mostró quién era  su superior al orar: "Padre, si  deseas, remueve de mí esta copa.  Sin  embargo, que no se efectúe mi  voluntad, sino la tuya". (Lc 22;42) ¿A quién le oraba?  ¿A una parte de sí mismo?  No; le oraba a alguien enteramente  separado de él,  su Padre, Dios -cuya  voluntad era superior y podía diferenciarse de la  suya-, el Unico que podía 'remover aquella copa'.

Después, cuando estaba  a punto de morir, Jesús clamó:  "¿Dios mío, Dios mío!  ¿por qué me has abandonado?". Mc 15;34)(BJ) ¿A  quién clamó Jesús? ¿A sí  mismo o a una  parte de sí mismo?  De  seguro ese clamor: "Dios mío"  no provino de alguien  que se consideraba Dios.   Y si Jesús fuera Dios,  entonces, ¿quién  lo había abandonado? ¿Se abandonó a sí mismo? Eso no tendría sentido. Jesús dijo también: "Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". (Lc 23;46) Si Jesús fuera Dios, ¿por qué habría de encomendar su espíritu al Padre?

Después de su muerte, Jesús estuvo en  la tumba por partes de tres días. Si fuera Dios, entonces (Hab 1;12) está equivocado cuando dice: "Oh Dios mío, mi Santo, tú no mueres".  Pero  la Biblia dice que Jesús sí murió y que estuvo inconsciente en la tumba. ¿Y quién lo resucitó de entre los muertos? Si verdaderamente estaba  muerto, no se  pudiera  haber resucitado a sí mismo. Por otra parte, si en realidad no estaba muerto, su muerte fingida no habría pagado el precio de rescate por el pecado de Adán. Pero él sí pagó ese precio, porque verdaderamente murió. De modo que fue "Dios (quien) lo resucitó  (a Jesús) desatando los dolores de la muerte".   (Hech 2;24)  El superior,  el Dios Todopoderoso, levantó  de entre los muertos al inferior, su siervo Jesús.

¿Indica que Jesús fuera Dios el  hecho de que pudiera ejecutar milagros, como el de resucitar a ciertas personas?  Pues bien, los apóstoles y los profetas  Elías  y  Eliseo  tuvieron ese poder  también,  pero  eso  no significó que  fueran más que  hombres.  Dios  dio el poder de ejecutar milagros a  los profetas, a Jesús  y a los apóstoles  para demostrar que los apoyaba. Pero eso no significó  que ninguno de ellos fuera parte de una Deidad plural. ("¿Debería creer usted en la trinidad?")

Jesús es bien conocido por los milagros que ejecutó. Se compadecía de la gente que sufría, y con gusto usaba los poderes que Dios le había dado para ayudarla (Mc 1;40-42) (Mt 15;30-31) (Mt 15; 32-38) (Lc 7; 11-17)

Sin embargo,  los milagros  que Jesús ejecutó  fueron sólo  de beneficio temporal.  Las  personas a las que  él curó volvieron a  tener problemas físicos.  Y las personas a quienes resucitó murieron de nuevo.  Pero los milagros  de Jesús  probaron que  él había  sido enviado  por Dios,  que realmente era el  Hijo de Dios.  Y  probaron que, con el  poder de Dios, todos  los problemas  humanos pueden  ser resueltos.   Sí, mostraron  en escala pequeña  lo que acontecerá  en la Tierra  bajo el reino  de Dios. ¡En ese tiempo se alimentará a los hambrientos, se sanará a los enfermos y hasta se  levantará a  la vida  a los muertos!  Y nunca  más causarán desdicha  la  enfermedad  y  la   muerte  ni  otras  aflicciones. ¡Qué bendición! (Ap 21;3-4) (Mt 11;4-5)

Análisis:

Los TJ en ("La  Atalaya" de 1.10.92, pág 12) nos  dicen que una de las pruebas de que Jesús era el Mesías es el hecho de que "Jehová mostró  que aprobaba  a su  ungido ("Mesías")  al facultarlo  para efectuar grandes obras... ejecutó milagros, como el de alimentar a muchedumbres hambrientas y curar a enfermos. Hasta  resucitó a muertos... Jesús ejecutó muchos de sus milagros ante testigos       oculares, a veces ante miles de  personas a la vez. Ni siquiera sus enemigos  podían negar  estos hechos... si los  seguidores de Jesús hubieran tenido la inclinación de idear  esos cuentos... en realidad ¿hubieran estado dispuestos a  morir por una fe basada en simples mitos que  ellos mismos habían ideado? No.  Los milagros que ejecutó Jesús son hechos históricos".

O sea, que cuando interesa, "los milagros no significan que sean más que  hombres" quienes lo realizan, y por lo tanto Jesús era igual, en este sentido, que los apóstoles, que Elias y que Eliseo. En  cambio, también cuando interesa, los  milagros que hizo Jesucristo son especiales ¡Hasta resucitó a muertos!, y prueban que Jesús era un personaje extraordinario, ni más ni menos que ¡el Mesías!:  "Estas pruebas... identifican a Jesús como el Mesías" ("La Atalaya" de 1.10.92, pág 13)  ¿Y por qué ahora no son iguales los  milagros de los apóstoles, de Elías o de   Eliseo, identificándolos en el mismo sentido como Mesías?.

Mt 6;9,10

El Reino de los cielos es de Dios y de Cristo.  Ver (Ef 5;5) (Ap 11;15)

Mt 10;37

"...El que ama al padre o a la  madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama al hijo o a  la hija más que a mí, no es digno de mí ”.  (NC)

Análisis:

En consonancia con (Mt 22; 34-39) “...Los fariseos oyendo que había hecho enmudecer a los  saduceos, se juntaron en torno de El, y le preguntó uno de ellos, doctor, tentándole: Maestro, ¿cuál es el mandamiento más grande  de la Ley?  El le dijo: Amarás al Señor, tu  Dios, con todo tu  corazón, con toda tu  alma, y con toda tu mente.  Este es el más grande y el primer mandamiento. El segundo, semejante a éste, es: Amarás  al prójimo como a tí mismo” (NC) La misma respuesta da en (Mc 12;28-34) y en (Lc 10;25-37). O sea, que por una parte nos dice que el primer mandamiento es "amar a Dios" y el segundo "amar al  prójimo" y por otra parte, nos dice que "el que ame más a sus padres...que a El, no es digno de El". Se está  situando claramente por encima del prójimo de más nivel que podemos tener. Y si por encima del prójimo sólo esta Dios, entonces...¡nos está declarando su divinidad!

Ante este razonamiento, los TJ dicen que en (Mt 22;34-39) le preguntan acerca del mandamiento más grande de la Ley y que al ser Jesús posterior a la Ley, por  esto no da ninguna indicación sobre sí mismo.  ¿Quiere esto decir que  la respuesta en tiempo de Jesús tenía que ser: "Amarás al Señor  tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, y con toda tu mente. Este es el más grande y el primer  mandamiento.  El  segundo es  amar a  Jesús y  el tercero, semejante a estos es: Amarás al prójimo como a tí mismo". Además de no tener sentido este razonamiento  ya que de alguna manera nos estaría engañando,  resulta que  en Lc, en  el pasaje  que podemos considerar relativamente paralelo, la  pregunta se plantea de otra manera y  en cambio la respuesta  es idéntica, por lo  que nuestra conclusión queda  reafirmada.  En efecto,  en (Lc 10;25-28)  es un doctor de la Ley que le pregunta a Jesús: "¿Qué haré para alcanzar la vida  eterna? y la respuesta  es la misma: "Amar  a Dios...y al prójimo  como a  tí  mismo”  No  aparece  el amor  a  Jesús en  la respuesta.  ¿Dónde colocamos las palabras de (Mt 10;37)?

Los TJ traducen con el mismo sentido ambos pasajes.

Mt 11;27

“...Todo me ha sido entregado por mi  Padre, y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, y nadie  conoce al Padre sino el Hijo y aquel  a quien el Hijo quisiere revelárselo”.(NC)

“...Todas las cosas me han  sido entregadas por mi Padre, y nadie conoce  plenamente al Hijo  sino el Padre, tampoco  conoce alguien plenamente al  Padre ino el  Hijo y cualquiera  a quien el  Hijo quiera revelarlo”.(NM)

Los TJ  aún reafirman  más el  sentido de  las palabras  al añadir "plenamente".

Mt 12;6-8 

“...Pues yo os  digo que lo que  aquí hay es más grande  que el templo... Porque el Hijo del hombre es señor del sábado” (NC)

“...Pues yo  les digo que algo  mayor que el templo  está aquí...  Porque Señor del sábado es lo que el Hijo del hombre es” (NM)

Comparar con (Ex 31;15)

Análisis:

Para un judío  de la época de  Cristo, nada había en  el mundo más grande que  el templo  de Jerusalén. Reivindicar, por lo tanto, para él mismo y para  su obra una  dignidad superior a la del templo,  era colocarse por encima  de toda  autoridad y  dignidad humana e igualarse al mismo Dios.

El reposo sabático es de institución divina (Gn  2;2,3). Proclamarse "Señor del  sábado" es proclamarse "dueño" de su legislación, de su institución; es proclamarse dueño del mismo. Moisés legisló esto, en nombre de Dios. Pero Cristo no se pone en la línea de  Moisés, sino en el mismo "señorío"  de la legislación del sábado. Si Dios es el "dueño" del sábado y Cristo el "Señor" del sábado, Cristo se está proclamando Dios.

Mt 16;15-17

"...Y  él les  dijo:  Y  vosotros, ¿quién  decís  que  soy?  Tomando  la palabra Simón Pedro, dijo:  Tú eres el Mesías, el Hijo  de Dios vivo.  Y Jesús respondiendo, dijo:  Bienaventurado tú, Simón Bar  Jona, porque no es la  carne ni la sangre  quien eso te  ha revelado, sino mi  Padre que está en los cielos" (NC)

"...El les dijo: "Pero ustedes, ¿quién dicen que soy?".  En contestación Simón  Pedro  dijo: "Tú  eres  el  Cristo, el  Hijo  del  Dios vivo"  En respuesta Jesús le dijo: "Feliz eres,  Simón hijo de Jonás, porque carne y sangre no te (lo) reveló, sino mi Padre que está en los cielos." (NM)

Mt 23;34

En (2Cor 36;15,16) se dice que  Jehová envía a los profetas.  Aquí se dice que es Cristo quien los envía.

Mt 25;31-33

Cristo es omnipresente como Dios  y domina las naciones.  Comparar con (Ag 2;7) Ver (Ap 21;23-24)

Mt 25;31-46

Cristo será  el juez.  En (Hb  12;13) dice que Dios  será el juez. Así  también  en (1Pe  4;5,6).   Ver  (2Tim  4;1) y  (2Cor  5;10). Comparar con (Ecls 12;14).

Mt 26;63-65

“...Pero Jesús callaba, y el pontífice le dijo: Te conjuro por Dios vivo; dí si  eres tú  el Mesías,  el Hijo de  Dios.  Díjole  Jesús: Tú  lo has dicho.  Y yo os  digo que un día vereis al Hijo del  hombre sentado a la diestra  del Poder  y  venir sobre  las nubes  del  cielo.  Entonces  el pontífice rasgó sus vestiduras, diciendo: Ha blasfemado.  ¿Qué necesidad tenemos de más testigos?  Acabáis de oir la blasfemia”.  (NC)

...Entonces el  sumo sacerdote rasgo  sus prendas exteriores  de vestir, diciendo:  "¡Ha blasfemado!   ¿Qué  más necesidad  tenemos de  testigos? ¡Miren!  Ahora han oído la blasfemia.  (NM)

Análisis:

La indignación de Caifás no proviene de que Nuestro Señor se llame Hijo de  Dios en el sentido  de Hijo de adopción.   Muchos judíos, antes y después de Nuestro Señor, se habían llamado hijos de Dios, sin haber sido acusados de blasfemos (comparar con el texto arriba citado, (Jn 10;31-33). Pero Jesús reclama más: pretende sentarse a la derecha del Padre, es decir, a la derecha  de Dios; pues, en el lenguaje bíblico, el Poder equivale al nombre de Dios. Ahora bien, esta  expresión designa,  en  las  lenguas orientales, una prerrogativa que no pertenece más que al hijo propio y al heredero legítimo. Hablar de esta manera, era hacerse igual a Dios, llamarse Dios. De aquí la indignación de Caifás y su acusación de blasfemo, que los judíos repitieron delante de Pilato: "Nosotros tenemos ley y, según la ley, debe morir, porque se  hizo Hijo de Dios" (Jn 19;7).

En este  momento tan  solemne de  su vida y  para la  historia del mundo, si Jesús no  fuese verdaderamente Dios, hubiera desengañado a Caifás y a los  judíos.  Pues, callándose, no solamente engañaba a aquellos, sino a todos los hombres que leyeran este relato.  No obstante, no  sucede así: se  le condena,  porque se hace  igual a Dios.  No sólo esto: acepta  además ser condenado por este motivo. Luego es que lo es verdaderamente.

Mt 28;17

Los discípulos adoran a Jesús

Mt 28;19

“...id, pues; enseñad a todas las  gentes, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo”.  (NC)

“...Por  lo  tanto vayan  y  hagan  discípulos  de  gente de  todas  las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del espíritu santo” (NM)

Mc  2;5-12

(Curación de un  paralítico) Perdona los pecados de un paralítico lo que motiva que unos escribas piensen que blasfema porque ¿Quien puede perdonar pecados  sino sólo Dios?. Jesús les dice: “¿Qué es más fácil  decir al  paralítico: Tus pecados  te son  perdonados o decirle: Levántate  toma tu camilla  y vete?  Pues para que veais que el Hijo del hombre tiene poder en la tierra para perdonar los pecados yo te digo: Levántate toma tu camilla y vete a tu casa”. Y así lo hizo. (NC)

La traducción de los Tj puede considerarse idéntica (NM)

Lc 1;43

“...¿De  dónde a  mí que  la madre  de  mi Señor  venga a  mí?”.  (NC) 

En relación  a (Lc  1;38)...Dijo María:  "He aquí  a la  sierva del  Señor, hágase en mí según tu palabra" (NC)

...¿Pues a qué se debe que tenga yo este (privilegio), de que venga a mí la madre de mi Señor? (NM)

Análisis:

La  misma Virgen  en (Lc  1;38) se  llama a  sí misma  "Sierva del Señor" ¿De que Señor se está hablando sino de Dios?

Isabel dice, de hecho, la Madre  de mi Dios porque en el original, la palabra Señor indica Dios, pues no dice simplemente la madre de mi Señor, sino la  madre de "el" mi Señor.  Y  cuando a la palabra Señor se le anteponía el artículo "el" Señor era sinónimo de Dios,

Lc 10;25-29

"Levantose un  doctor de  la Ley  para tentarle  ( a  Jesús) y  le dijo: Maestro, ¿qué haré para alcanzar la  vida eterna?, El le dijo: "Qué está escrito  en la  Ley?  ¿Cómo  lees?"  Le constestó  diciendo: "Amarás  al Señor, tu  Dios, con todo  tu corazón, con toda  tu alma, con  todas tus fuerzas, y con toda tu mente, y al prójimo como a tí mismo".  Y le dijo: "Bien has respondido.  Haz esto y vivirás".  El, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: "¿Y quién es  mi prójimo?" Tomando Jesús la palabra le expuso la "Parábola del samaritano" (NC)

s/TJ:

El  amor nos  impulsa a  compartir. No cabe  duda de  que su  relación personal con Dios es un asunto  particular. Usted es la  persona que tiene que determinar si ha dedicado su vida al Crador o no. Usted es el que puede hacer un voto ante Dios, y es  su responsabilidad personal el esforzarse por vivir  en armonía con tal obligación. Ningún otro puede hacerlo por usted. Y con el  tiempo individualmente  tenemos que someternos al escrutinio del gran Juez, pues el apóstol Pablo escribió: "Todos estaremos de pie ante el  tribunal de Dios" (Rom  14;10) Cada uno será considerado responsable por sus propios hechos.

Sin embargo  esto no significa  que el  cristiano puede llevar  una vida apartada en su propio rincón y disfrutar de su religión privada, porque el  rasgo singular  del  cristianismo es  su  actitud extrovertida. En seguida del amor a Dios está el amor  al  prójimo.  ¿Y  quién es  su prójimo? No sólo los vecinos que viven  en su calle y  en su vecindad. No sólo  los que  asisten a  los mismos  servicios religiosos  que usted asiste.  No sólo los de la misma clase o nación. Jesús explicó quién es su prójimo  por medio de su  parábola del buen samaritano. Recuerde su pregunta  con  relación  a  esa  parábola: "Quien de  estos tres (el sacerdote, el levita o el  samaritano) te parece haberse  hecho prójimo del que cayó entre los salteadores?"  (Lc 10;36) De modo que la pregunta realmente es: ¿De quién está usted anuente a hacerse prójimo?

Ciertamente usted no puede hacerse prójimo de alguien a menos que llegue a conocerlo,  a  menos que  hable  con  él.   Y especialmente  usted  se interesará  en averiguar  si  conoce a  Dios, porque  si  no lo  conoce, entonces la  acción como buen prójimo  es familiarizarlo con Dios  y con sus propósitos amorosos.   De modo que hay necesidad  de aprovecharse de toda oportunidad para compartir su fe  con otros, para que ellos también reciban  las bendiciones  de Dios.   Bajo inspiración  el apóstol  Pablo escribió para explicar  que la voluntad de Dios es  "que hombres de toda clase sean salvos y lleguen a un conocimiento exacto de la verdad" (1Tim 2;4)  Ese  debería ser  su  deseo  también.  Ciertamente  debemos  estar aunentes a  compartir con nuestros semejantes  cualquier conocimiento de religión que poseamos.

Sin embargo,  quizá usted crea  que no sabe  lo suficiente acerca  de su religión, y  no quiere ser  hallado falto.   Eso se comprende,  pero ¿es buena  razón  para  rehusar  hablar acerca  de  religión,  para  rehusar compartir la  información que tenga?   El mejor derrotero será  llegar a entender  las enseñanzas  de  la  Biblia para  que  usted pueda  ofrecer razones  y  textos  en  apoyo  de  su  creencia.   De  otra  manera,  es exactamente como si uno estuviera  disfrazado de cristiano, mientras que de  hecho  sabe  muy  poco  en  cuanto  al  cristianismo.   ¡Cuanto  más satisfactorio es saber lo que usted cree y por qué lo cree!" ("¡Despertad! de 22.2.68, pág 6)

Análisis:

Véase (Mt 10;37)

Véase BIC V (págs 838 y 839) en la que queda claro que el prójimo es cualquier  persona que pasa  por mi lado  y que necesita  de mi amor.

(Mt 22;34  y ss) y  (Mc12;28 y ss)  proponen la misma  cuestión de forma un  poco diferente pero  para llegar a la  misma conclusión. En Mt es un fariseo el que hace la pregunta y en Mc un escriba.

Lc 14;25-26

"... Se le juntaron numerosas muchedumbres y, vuelto a ellas, les decía : Si alguno viene a mí y no aborrece a su padre, a su madre, a su mujer, a sus  hijos, a  sus hermanos  y aun  su propia  vida, no  puede ser  mi discípulo..." (NC)

"... Ahora bien, grandes muchedumbres viajaban con él, y él se volvió y les dijo: "Si alguien viene a mí y no odia a su padre y madre y esposa e hijos y hermanos y hermanas, sí, y hasta su propia alma, no puede ser mi discípulo." (NM)

        Véase comentario en (Mt 10;37)

Lc 24;27

Ver (Mt 12;39,40)

Jn 1;1

"...Y la Palabra era Dios" (NC)

"...Y la Palabra era un dios" (NM)

Jn 1;2-3

"El estaba al principio en Dios. Todas las cosas fueron hechas por El, y sin El no se hizo nada de cuanto ha sido hecho" (NC)

"Este estaba  en (el) principio  con Dios.  Todas las cosas  vinieron a existir por medio de  él, y sin él ni siquiera una  cosa vino a existir" (NM)

s/TJ:

Las palabras de los versículos son claras en su entendimiento

Análisis:

Los TJ siguen hablando del "un dios', por esto dicen "éste", "él", cuando deberían  seguir hablando -según  el texto original-  de la Palabra, y, por tanto, decir: "ésta", "ella".

(Jn 1;1-3) es claramemente progresivo en su exposición:

Primero nos dice que el Verbo, la Palabra, o la Sabiduría de Dios ya era  en el principio,  para continuar diciéndonos que  el Verbo era una misma cosa con Dios, por lo que concluye, lógicamente, que el Verbo era Dios.

En el segundo versículo, como compendio del primero, nos dice que, en consecuencia, el Verbo ya era  una misma cosa con Dios desde el principio.   Por eso  puede decir,  con toda  tranquilidad, en  el versículo tercero,  que "Todas las  cosas fueron hechas por  El, y sin El  no se hizo nada  de cuanto ha sido  hecho", aunque sabemos por el Génesis  y por otros pasajes  de la Biblia, que  Dios es el creador de cielos y tierra.

La doctrina de los TJ no explica las palabras de Juan.  Veamos: En  el primer versículo se nos  dice que "al  principio (de  la creación) era el Verbo", queriéndonos  decir con ello que el Verbo fue creado  anteriormente en  un  momento  único. Dios, que no disponía de Sabiduría, fue lo suficientemente lúcido para crear su propia sabiduría en la  persona de  un ser al  que llamó Verbo o Palabra. Lógicamente, este ser creado por Dios estaba “con" Dios, no podía estar de otra manera. Concluyendo, que este ser, al ser el preferido de Dios por ser el primero, era "un dios".

El compendio del segundo versículo es, lógicamente, que "el Verbo estaba con  Dios" al principio de la creación de los  cielos y la tierra. Pero aquí  viene un grave problema, porque si Jesucristo es una creación de Dios, Juan no puede seguir diciendo que: "Todas las cosas  fueron hechas por  El" (En  el "Todas" tiene  que estar incluído el Verbo y entonces  resulta que el  Verbo se hizo a sí mismo (?)) y "sin El no se hizo nada de cuanto ha sido hecho" (Si el Verbo fue hecho, según este párrafo el Verbo se hizo a sí mismo (?)) (Ver: Col 1;15-17) (1Cor 15; 25-28) Comparar con (Is  40;28).  Ver (Col 1;16)

Jn 1;4

Cristo, igual  que Dios, es la  vida. Comparar con (Sl  36;9) (Jn 14;6) (Jn 1;25) (1Jn 5;11,12)

Jn 1;9

"...Era la  luz verdadera  que, viniendo  a este  mundo, ilumina  a todo hombre" (NC) 

"...La  luz verdadera  que da  luz a  toda clase  de hombre  estaba para venir al mundo" (NM)

Análisis:

En (Heb 1;2,3) se dice que el Hijo es "resplandor" de la gloria de Dios, pero es  que en este versículo se dice que es la "luz verdadera". En relación a (Sl  104;1,2)  (2Sam 22;29) (Is 60;19,20) (Ab 7;26) (Mt 17;5) (1Tim 6;16) (1Jn 1;5). En todos       estos versículos se dice de Dios que es la luz o que habita en una luz inaccesible.

Jn 1;18

"A Dios  nadie lo  vio jamás; Dios  Unigénito, que está  en el  seno del Padre, ése nos le ha dado a conocer" (NC)

"A Dios ningún hombre  lo ha visto jamás; el dios  unigénito que está en la posición del seno  para con el Padre es el que  lo ha explicado" (NM)

s/TJ: 

Aunque a Jesús se le llama frecuentemente en la Biblia el Hijo de Dios, nadie en el primer siglo siquiera pensó que él fuera Dios Hijo. Hasta los demonios, quienes  'creen que hay un solo Dios', sabían por  su experiencia en las regiones celestiales que Jesús no era Dios. Por eso, correctamente,  reconocían a  Jesús como  el "Hijo  de Dios", que tiene existencia separada (St  2;19) (Mt  8;29). Y cuando Jesús  murió, los soldados  romanos, aquellos  paganos  que estaban  cerca,  ya sabían  lo suficiente como para  decir que lo que habían oído  de los seguidores de Jesús  tenía  que ser  correcto,  no  que  Jesús  fuera Dios,  sino  que "ciertamente este era Hijo de Dios". (Mt 27;54)

Por consiguiente,  la frase  "Hijo de  Dios" alude a  Jesús como  un ser creado que  tiene existencia  separada, no como  parte de  una Trinidad. Por ser el Hijo de Dios, no podía ser Dios mismo, porque (Jn 1;18) dice: "A Dios nadie le ha visto jamás" (BJ).

Los discípulos  creían que Jesús era  el "un solo mediador  entre Dios y los hombres", y no Dios mismo.  (1 Tim 2;5) Puesto que por definición un mediador es alguien separado de  los que necesitan mediación, implicaría contradicción el que Jesús correspondiera a cualquiera de las 
partes que estuviera tratando  de reconciliar.  Eso  habría sido fingir que  era lo que no era.

La Biblia habla clara y consecuentemente en cuanto a la relación de Dios con Jesús. Solo Jehová Dios es Todopoderoso. Creó directamente a Jesús antes de  que viviera en la Tierra como humano. Por eso, Jesús tuvo principio, y jamás podría  ser igual a Dios en  poder ni  en eternidad ("Debería usted creer en la trinidad")

Análisis:

"A Dios nadie lo vió jamás". No le vieron, pues, ni Moisés (Ex 32;22,23), ni  Isaías (Is 6;1,5). No vieron a Dios "facialmente"; sus manifestaciones fueron teofanías simbólicas. La naturaleza divina es inaccesible al ojo humano (1Jn 3;2)

De la regla general "A Dios nadie lo vió jamás", se excluye el Unigénito, que es Dios y por eso “está en el seno del Padre” (Jn 6;46) (Jn 8;38) (Jn 3;11-13)

"Está", presente de duración, estuvo y está. Es la razón de por qué pudo hablar de Dios. "En el  seno": frase figurada para indicar la intimidad y la afección:(Lc 16;22) (Nm 11;12) (Dt 28; 54,56) (2Sam 12;3) (1Re 3;20) ( Rut 4;16) (Jn 13;23). Por esto, con la expresión "Dios Unigénito que está en el seno del Padre" se está acusando la  constante intimidad y afección  entre ambos, por lo que, estando en sus secretos, puede comunicarlos.

"A Dios ningún hombre lo ha visto jamás; el dios unigénito que está en la posición del seno para con el Padre es el que lo ha explicado" (NM). Jesús  sí ha sido visto por la gente, y esto es base para que los TJ concluyan que  no es Dios. Lo curioso de (Jn 1;18) es que la Biblia aplica la misma declaración a Jesucristo en (1Tim 6;16). La siguiente declaración se encuentra en el libro ("Ayuda para entender la  Biblia", pág 548): "Por tanto el Hijo llegó a ser de nuevo invisible a la vista humana, morando en la luz inaccesible, a quien ninguno de  los hombres ha visto ni puede ver". Si ningún hombre ha visto ni al Padre ni al Hijo, ¿cuál es la diferencia?.

El argumento  de los TJ se  basa en un entendimiento  errado de la Biblia.  (Hech 7;55-60)  dice del mártir Esteban: "Mas él estando lleno de espíritu santo, miró con fijeza al cielo y alcanzo ver la gloria de  Dios y a  Jesús de  pie a la  diestra de Dios,  y dijo: ¡miren! contemplo los cielos abiertos y  al Hijo del hombre de pie a la diestra de Dios".

Por otra parte, hablando del Padre, Isaías escribe lo siguiente: "el año en que murió  el rey Uzías  yo... conseguí ver  a Jehová, sentado en un  trono excelso y elevado... y procedí  a decir: "¡Ay de mí!...  porque hombre inmundo de  labios soy, y en  medio de un pueblo inmundo de labios estoy morando; pues mis ojos han visto al Rey, Jehová de los ejércitos, mismo!" (Is 6;1-5).

¿Cómo se puede interpretar (Jn 1;18) y (1Tim 6;16), si de ambos la Biblia dice  que ningún hombre ha  visto y a la vez  que sí han sido vistos?   El rey Salomón  ofrece la respuesta en  (2Cr 6;18): "¿Verdaderamente  morará Dios  con la  humanidad sobre  la Tierra? ¡Mira!  El  cielo, sí,  el cielo  de los  cielos mismos,  no puede contenerte; ¿cuánto menos,  pues, esta casa que  yo he edificado?" El  hombre, por  ser  muy limitado,  no  puede ver  a  Dios en  su totalidad.  Ni los  cielos de los cielos le  puede contener.  Pero Dios sí se puede manifestar al hombre en una manera limitada. Tal fue la experiencia de Isaías. Tal fue la experiencia de Esteban. Lo mismo sucedió cuando Jesús estuvo en la Tierra