Ver (Jn
1;4)
Jn 2;18-20
Ver (Mt
12;39,40)
Jn 3;16-18
"...Porque tanto amó Dios al
mundo, que le dio su unigénito Hijo,
para que todo el que crea en El no perezca, sino que tenga la vida eterna; pues Dios no ha enviado a su Hijo al
mundo para que juzgue al mundo,
sino para que el mundo sea
salvo por El. El que
cree en El no es juzgado; el que no cree ya está juzgado, porque no creyó en el nombre del unigénito Hijo de
Dios." (NC)
"...Porque
tanto amó Dios al mundo que dio
a su Hijo unigénito, para que
todo el que ejerce fe en él no sea destruÆdo, sino que tenga vida eterna. Porque
Dios no envió a su Hijo al mundo para que juzgara al mundo, sino para que el mundo
sea salvo por medio de él. El que ejerce fe en él no ha de ser juzgado.
El que no ejerce fe ya ha sido juzgado, porque no ha ejercido fe en el nombre
del Hijo unigénito de Dios". (NM)
s/TJ:
"Tanto amó Dios al mundo que dió a su Hijo
unigénito". Mundo se refiere al mundo de la humanidad el
que es redimible.
De
todas maneras la fundación de este mundo
no tuvo lugar con Adán sino con su prole, particularmente para el tiempo de Abel, como Jesús mostró cuando dijo: "La sangre...derramada desde la
fundación del mundo... desde la
sangre de Abel" (Lc 11;50,51) ("¡Despertad!"
de 22.1.68, pág 28)
La
Palabra o Verbo es el "unigénito
Hijo" o "Hijo unigénito"
porque es el único a
quien Dios mismo creó directamente sin la agencia o cooperación de
alguna criatura. ("La Atalaya"
de 15.3.63, pág 185)
Análisis:
Según los
TJ, el Verbo "es el unigénito Hijo" o "Hijo
unigénito" porque es el único a quien Dios mismo creó directamente sin la agencia o
cooperación de alguna criatura. O sea,
que según los TJ, cuando Dios creaba solo,
engendraba, y cuando creaba
acompañado, creaba. Los TJ
deberían explicar los apoyos bíblicos de
esta diferencia.
Engendrar
quiere decir propagar la propia especie
y esto no tiene nada que ver con hacerlo solo o acompañado. Por lo tanto, si Dios engendró a su Hijo (el
Verbo) y únicamente a su Hijo -Unigénito-, ese Hijo tiene que ser Dios de
la misma especie, no un dios inferior. Crear es producir de la nada y esto tampoco tiene que ver con hacerlo solo o acompañado. En una palabra,
si el Verbo fue engendrado, no fue
creado y a la inversa. Queda claro en la Biblia que el Verbo fue engendrado -(Jn
3;16) (Jn 3;18) (Jn 1;14) (Jn 1;18) (1 Jn 4;9) (Heb 1;3) (2 Cor 4;4) (Col
1;15)- y como tal, de la propia especie que la del que lo engendró.
No parece
que el amor de Dios fuera tan grande si
lo que hizo fue darnos a una creación suya...
Mundo
(kosmos), tiene dos sentidos en Juan:
a) El "mundo"
es la
universalidad étnica
contrapuesta a Israel (Jn 4;42)
(6;33-51) (12;47)
b)
Frecuentemente lleva un matiz pesimista: los hombres malos (Jn 1;10) (12;31)
(16;11) (1Jn 2;16) (4;4 y ss) (5;19)
Aquí, pues,
el contraste está entre el "amor" (egápesen) profundo que
el Padre demostró al "mundo"
malo con la prueba suprema que le dió. Pues "entregó
a su Hijo Unigénito”. Este no
sólo se "encarnó", no
sólo fue enviado, sino que lo dio, que
en el contexto es: lo entregó a la
muerte (Gn 22;2) (Hb 11;17) (Mt 21;33-46) ( Mc 12;1-12) (Lc 20;9-19)
Pero
la muerte de este Hijo unigénito tiene
una finalidad salvadora para el "mundo"
malo. Y es que todo el que "crea en
El", y creer quiere decir
valorarlo como el Hijo
de Dios, pero entregándosele como a tal (Jn 6;26 y ss)(15;5) "tenga
la vida eterna"
Jn 5;17-18
"Pero el les respondió: 'Mi Padre
sigue obrando todavía, y por eso obro yo también. Por esto los judíos buscaban, con más ahinco matarle, pues no sólo
quebrantaba el sábado,
sino que decía a
Dios su Padre, haciéndose igual a Dios" (NC)
"Mi
Padre ha seguido trabajando hasta ahora, y yo sigo trabajando.
A causa de esto, realmente, los
judíos procuraban con más empeño matarlo, porque no sólo quebraba el sábado, sino que tambien llamaba a Dios su propio Padre, haciéndose igual a
Dios" (NM)
s/TJ:
Otro
texto bíblico que se da como apoyo para
la Trinidad es Juan 5;18. Este dice
que los judíos (como en Juan
10;31-36) querían matar a Jesús
porque "también llamaba a Dios
su propio Padre, haciéndose igual a Dios".
Pero ¿quién dijo
que Jesús estaba haciéndose igual a
Dios? No fue Jesús.
Él se defendió de
aquella acusación falsa en el
mismísimo versículo siguiente (19):
"Jesús, pues, tomando la
palabra, les decía: '(...) el Hijo no
puede hacer nada por su cuenta, sino
lo que ve hacer al Padre'"(BJ).
En
el estanque de Betzata Jesús había curado instantáneamente a un judío que había
estado encamado durante treinta y ocho años.
Puesto que Jesús había hecho esta buena obra con la ayuda de Dios en el
día de descanso o sábado judío, lo
persiguieron. En respuesta Jesús dijo: "Mi Padre ha seguido trabajando
hasta ahora, y yo sigo trabajando".
Los judíos criticadores pusieron reparos a esas palabras porque leemos: "A
causa de esto, realmente, los judíos procuraban con más empeño matarlo, porque
no sólo quebraba el sábado, sino
que tambien llamaba a Dios su
propio Padre, haciéndose igual
a Dios". O,
como traduce "El
nuevo Testamento-Una Traducción
ampliada (Wuest)": "Haciéndose igual a
la deidad" ("La
Atalaya" 1.6.1965, pág 329)
Al
decir eso, Jesús mostró a los judíos que
no era igual a Dios y, por lo tanto, no
podía obrar por su propia iniciativa.
¿Podemos imaginarnos que alguien
que fuera igual al Dios
Todopoderoso dijera que 'no podía
hacer nada por
su cuenta'? (Compárese
con (Dan 4;34,35)).
Es interesante que el contexto de (Jn
5;18) y (Jn 10;30) muestra que Jesús se defendió de acusaciones falsas de judíos que, como los trinitarios, ¡habían llegado a
conclusiones equivocadas!. ("Debería
usted creer en la trinidad")
Es
cierto que los opositores de Jesús le
acusaron de hacerse igual a Dios
por medio de llamar a Dios
su propio Padre, pero al hacer esto ellos tergiversaron los hechos, así como lo
hacen los que enseñan la doctrina
de la Trinidad hoy día ("La
Atalaya" de 1.12.59, pág 709)
Análisis:
Para
valorar bien las expresiones del discurso de Cristo que inicia con estos
versículos, hay que tener en cuenta que Jn no disocia en Cristo, en su
evangelio, el hombre del Verbo; para él, Cristo es siempre el Verbo encarnado.
El
tema central de todo el discurso
al que convergen los demás
elementos que Cristo utiliza, como
partes que van a demostrar la tesis es
el (v23) "para que todos honren al
Hijo, como honran al Padre".
De estas
alegaciones que hace ahora Cristo, y
ya hechas en otras ocasiones,
sintetiza el evangelista lo que esto significaba ante la mentalidad judía: "Por esto los judíos buscaban con más ahinco matarle,
porque no sólo quebrantaba el sábado, sino que decía a Dios su propio Padre, haciéndose a sí
mismo igual a Dios" (v18).
En el monoteismo cerrado del judaismo no cabía una
dualidad de personas en el seno de la divinidad. Al hacerse "igual" (isos) a Dios -pues no sólo
por el contexto, sino que el
adjetivo aquí usado significa verdadera igualdad- es que se decía otro Dios (Jn 10;33). Era estar
en el politeismo. Esta confesión era para ellos blasfemia, y por esto,
conforme a la Ley, "buscaban con más ahinco matarle". La lapidación era la pena normal a los blasfemos.
Los TJ
dicen que Dios está descansando ya que se encuentra en el séptimo día, pero no
es esto lo que nos dice Jesucristo: "Mi
padre sigue obrando todavía, y por eso obro yo también" (Jn 5; 17)
Parrafos
referentes al 7º día: (Is 2;12) (Hb 4;3)
Jn 5;19-21
"...Respondió, pues, Jesús
diciéndoles. En verdad, en verdad os digo que no puede el Hijo hacer nada por sí mismo, sino lo que ve hacer al Padre; porque lo que éste hace, lo hace igualmente el Hijo.
Porque el Padre ama al Hijo y le
muestra todo lo que el hace, y le mostrará aún mayores obras que éstas, de
suerte que vosotros quedeis
maravillados. Como el Padre resucita a los muertos y les da vida, así también el Hijo a los que
quiere les da la vida..." (NC)
"...Por
eso, en respuesta, Jesús pasó a decirles: "Muy verdaderamente les digo: el
Hijo no puede hacer
ni una sola cosa
por su propia iniciativa, sino
únicamente lo que
ve hacer al
Padre. Porque cualesquier cosas
que Aquél hace, estas cosas también
las hace el Hijo de igual manera. Porque
el Padre le tiene cariño al Hijo
y le muestra todas las cosas que él
mismo hace, y le mostrará obras mayores que éstas, a fin de que
ustedes se maravillen. Porque
así como el Padre levanta a los muertos
y los vivifica, así el Hijo también vivifica a los que él quiere". (NM)
s/TJ:
Vez
tras vez Jesús hizo declaraciones como
las siguientes: "El Hijo no puede
hacer nada por su cuenta, sino lo que ve hacer al
Padre". (Jn 5;19) (BJ)
"He bajado del cielo para hacer, no
la voluntad mía, sino la voluntad del que me ha enviado". (Jn 6;38) "Lo que yo enseño no es mío, sino
que pertenece al que me ha
enviado." (Jn 7;16) ¿No es el que envía mayor que el enviado?
Esta
relación se manifiesta claramente en la ilustración de Jesús acerca de la
viña. Él comparó a Dios, su Padre, con
el dueño de la viña, quien viajó al
extranjero y la dejó a
cargo de los cultivadores, quienes representaban al clero judío. Después, cuando el dueño envió un esclavo
para conseguir parte del fruto de la viña, los cultivadores lo golpearon y lo
enviaron con las manos vacías. Entonces
el dueño envió un segundo esclavo, y después otro, y estos recibieron el mismo
trato. Finalmente, el dueño dijo: "Enviaré a mi hijo
(Jesús) el amado. Probablemente
a este lo respeten". Pero los
cultivadores corruptos dijeron:
"'Este es el heredero; matémoslo, para que la herencia llegue a ser
nuestra'. Con eso, lo echaron
fuera de la viña y
lo mataron". (Lc 20;9-16) Así ilustró
Jesús su propio puesto
de enviado por Dios
para hacer la voluntad de Dios,
tal como un padre envía a un hijo sumiso.
Los
seguidores de Jesús siempre lo vieron como siervo sumiso de Dios, no como igual
a Dios.
Oraron a Dios acerca de "tu
santo siervo Jesús, a quien has ungido,(...) señales y prodigios por
el nombre de tu santo siervo
Jesús". (Hech 4;23,27,30). ("¿Debería creer usted en la
trinidad?")
Análisis:
Los TJ al
analizar este pasaje y (1Cor 11;3)
expresan que si Jesús se sujeta al Padre
es inferior a él, y al ser inferior no
puede ser Dios. Para adimitir dicho
argumento hay que acceder a ciertas presuposiciones, entre ellas que la
sujeción implica inferioridad y que se establece con ello una diferenciación de
naturalezas.
Por
ejemplo, en (Lc 2;51) se encuentra que
Jesús se sujetó a José y María. Pocas
personas estarían dispuestas a aceptarque Jesús era inferior a sus padrs, o peor, que era de una naturaleza más baja, que es la consecuencia lógica del argumento de los TJ. El apóstol Pablo
dijo: "estén en sujeción los unos a
los otros" (Ef 5;21) y que
los cristianos "estén en sujeción y sean obedientes a los gobiernos y a
las autoridades como gobernantes"
(Tito 3;1). El apòstol Pedro dijo: "ustedes,
hombres de menos edad, estén en sujeción
a los hombres de mayor edad" (1Pe 5;5)
La sujeción
indica una subordinación, no de
naturaleza como insisten los
TJ, sino de relación. Un hijo puede
estar sujeto a su padre y a la vez el
padre estar sujeto al hijo por ejemplo por ser su subalterno en una
fábrica. Este mismo ejemplo se cumple en
la Biblia con Jesús, ya que él se sujetó
a sus padres (Lc 2;51), más ellos
también -con todas las cosas- se sujetan a él (Hb 2;5-8)
Los TJ no toman en cuenta la enseñanza de la Trunidad, sino que presentan una imagen
distorsionada de quienes la componen.
En completa armonía con el concepto de Trinidad y con el hecho de que el
Verbo se hizo carne, la Biblia presenta
el hecho que Jesús se sujeta al Padre.
Estos pasajes que presentan los
TJ enseñan un patrón en cuanto
a sus relaciones que sirven de
ejemplo a la iglesia cristiana y
armonizan con la descripción bíblica de lo que es una relación correcta.
Igual que en la Biblia la
sujeción no indica una inferioridad,
tampoco lo es la sujeción de
Jesús al Padre.
Jn 5;23
Hay que honrar
al Hijo como se honra al Padre.
Jn 5;26
"...Pues así como el Padre
tiene la vida en sí mismo, así dió también al Hijo tener vida en sí
mismo..." (NC)
"...Porque
así como el Padre tiene vida en sí mismo, así ha concedido también al Hijo el tener
vida en sí mismo..." (NM)
Jn 8;58
"...Antes que Abraham
naciese, era yo".
Entonces tomaron piedras para
arrojárselas; pero Jesús se ocultó y salió del templo". (NC)
"...Antes
que Abrahán viniese a existir,
yo he sido". Por lo
tanto tomaron piedra para tirárselas; pero Jesús
se escondió y salió del templo". (NM)
En relación
a (Sl 90;2) (Jr 1;5) (Prov 8;25)
s/TJ:
En (Jn
8;58) algunas traducciones (por ejemplo,
la Biblia de Jerusalén) presentan a
Jesús diciendo: "Antes que
naciese Abraham, Yo soy". En aquella ocasión, ¿estaba Jesús enseñando, como sostienen los
trinitarios, que a él se le conocía por
el título "Yo Soy"? Y,
según alegan ellos, ¿significa eso que él era el Jehová de las Escrituras Hebreas, puesto que en (Ex
3;14) la Biblia de Jerusalén dice: "Dijo
Dios a Moisés: 'Yo soy el que soy'"?
En
Éxodo 3;14 (BJ) la frase "Yo
soy" se da como título a Dios para indicar que él en realidad existía y haría
lo que prometía. The
Pentateuch and Haftorahs, publicado por
el doctor J.H. Hertz, dice acerca de esa frase: "Para
los israelitas en cautiverio, el significado sería: 'Aunque Él no ha
desplegado todavía Su poder para con ustedes, lo hará; Él es
eterno y ciertamente los redimirá'.
La mayoría de los modernos siguen a Rashi (comentarista
francés de la Biblia y el Talmund) al verter (Éxodo 3;14) 'Seré lo que seré'".
La
expresión de Juan 8;58 es muy diferente de la que se usa en Éxodo 3;14. Jesús no
la usó como nombre
ni título, sino como medio de
explicar la existencia que tuvo antes de ser humano. Por consiguiente, note
cómo vierten Juan 8;58 otras versiones de la Biblia:
1925: "antes que Abraham
fuera criado, yo existo" (Sagrada Biblia, Félix Torres
Amat).
1972: "Antes de que Abraham
naciese, era yo" (Sagrada
Biblia, E. Nácar
Fuster y A. Colunga).
1978: "antes que Abraham
naciese, ya existía yo" (Nuevo
Testamento, Felipe de Fuenterrabía).
1979: "yo existo desde antes que existiera Abraham" (Dios
habla hoy, Versión Popular).
1980: "Antes que Abraham existiera, yo existo" (Sagrada
Biblia, Pedro Franquesa y José M. Solé).
1987: "Antes que Abrahán
llegara a existir, yo he sido" (Traducción
del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras).
Así pues,
la verdadera idea de la expresión griega
usada en este pasaje es que el "primogénito" (Jesús) creado por Dios había
existido mucho antes de que naciera
Abrahán. (Colosenses 1;15;
Proverbios 8;22,23,30; Revelación 3;14).
De nuevo,
el contexto muestra que este es el modo correcto de entender lo que se dijo. Esta vez los judíos quisieron apedrear a
Jesús por afirmar que 'había visto
a Abrahán' aunque, como dijeron, él
todavía no tenía 50 años de edad (v57).
La respuesta natural de Jesús fue decir la verdad sobre su edad. Así que
naturalmente les dijo que 'existía
desde antes que existiera Abraham' (Versión Popular). ("¿Debería creer usted en la trinidad?") ("La
Atalaya" de 15.3.63, pág 172 y ss)
Análisis:
Nótese el
contraste entre el verbo "ser" aplicado a Abrahán y el aplicado a Cristo, como en el prólogo.
La preexistencia eterna que en
(Jn 1;1) se predica del Verbo, aquí la exige Jesús para sí. En efecto, en los v 1 y 2 del primer capítulo de Juan y en otros versículos del mismo, cuando
S. Juan habla de la Palabra emplea el verbo griego "eimi" = ser, estar, existir. Verbo
que no implica que el sujeto del cual se hable tenga un principio, pues
el tiempo imperfecto en que se
halla indica una acción continua en tiempo pasado. Pero, en cambio, cuando
habla de la creación o de Juan el Bautista emplea el verbo "ginomai"
= ser, estar, existir que siempre,
sin excepción, indica un
principio u origen bien definido.
Estos
dos verbos se van intercalando a lo largo de
los primeros versículos del primer
capítulo de Juan
según sea el
caso, utilizándose siempre "eimi" cuando
se refiere a la Palabra
y "ginomai" cuando
se refiere a Jesucristo (la Palabra
hecha hombre y que como tal tuvo un principio)
El Verbo
era ("eimi") y siempre
fue. Es el "Yo era" o "Yo soy"
de (Jn 8;58) en donde se emplea el
mismo verbo "eimi": "Antes
que Abraham existiese, Yo era... o
soy... o existo". Y
fijémonos que en este versículo cuando
se habla de Abraham se emplea el verbo "ginomai"
y en cambio, al hablar de Cristo -que se va revelando Dios- se emplea el verbo "eimi". Cristo emplea la misma forma con que en el
AT se habla de la eternidad de Dios (Sl 90;2) (Jr 1;5) (Pr 8;25).
Con
los TJ a lo máximo que podemos acercarnos en este punto, es que ellos enseñan que Jesús hace mención a su pasado anterior en el cielo y los católicos
que hace mención a su divinidad. Pero yo
creo que hay dos
actuaciones que pueden ayudar
a decidir la interpretación.
En (Jn 8;58) una vez
Jesús ha dicho las palabras en discusión, dice la Biblia
que "entonces cogieron piedras
para arrojarlas contra él. Pero Jesús se escondió y salió del
templo" ¿Por qué le arrojan piedras?. Según los TJ, "esta vez
los judíos quisieron apedrear a
Jesús por afirmar que 'había visto
a Abrahán' aunque, como dijeron, él todavía no tenía 50 años de
edad". No parece que ésta sea razón
suficiente para apedrear a Jesús. En
cambio, sí parece razón suficiente si
los judíos comprendiendo por las
palabras de Jesús que se hacía igual a
Dios consideraban que blasfemaba. (Lv
24;16) (Hech 6;12-58).
Es
interesante en este tema recordar el pasaje de (Jn 18;5-6) en el que a la pregunta de Jesús: "¿A quién buscáis?. Le
respondieron: "A Jesús el Nazareno".
Jesús les dice: "Yo soy" ... apenas, pues, les dijo "Yo soy", retrocedieron y
cayeron en tierra. ¿Por
qué?. Yo creo que el "Yo soy" en los labios de
Jesús tenían una fuerza
divina que los judíos no pudieron resistir. ¿Qué opinan los TJ?
Jn 10;7
Cristo es
el pastor de las ovejas igual que lo es
Jehová. Comparar con (Is 40;10,11) (Ez
34;11,12) (Sl 23;1) Ver (Jn 11;14)
Jn 10;14-15
"...Yo soy el buen pastor y
conozco a la mías y las mías me conocen a mí, como el Padre me conoce y yo
conozco a mi Padre..."(NC)
"...Yo
soy el pastor excelente, y conozco a mis
ovejas y mis ovejas me conocen a mí, así
como el Padre me conoce y yo conozco al Padre..."(NM)
Jn 10;17,18
“Por esto el Padre me ama, porque
yo doy mi vida para tomarla de nuevo. Nadie me la quita, soy yo quien la doy de mí mismo. Tengo poder para darla y
poder para volver a tomarla. Tal es el
mandato que del Padre he recibido” (NC)
Es
por eso que el Padre me ama, porque
entrego mi alma, a fin de que la reciba de
nuevo. Nadie me la ha
quitado, sino que la entrego de mi propia iniciativa. Tengo autoridad para entregarla, y tengo autoridad para recibirla de
nuevo. El mandamiento acerca de esto lo recibí de mi Padre. (NM)
Jn 10;30
"Yo y el Padre somos uno" (NC)
"Yo
y el Padre somos uno" (NM)
s/TJ:
Leyendo
este texto en abstracto, uno, sin duda,
tendría razón al argüir que Dios y Jesús son uno; pero Jehová aconseja: "Adquiere la
sabiduría, y con todas tus adquisiciones, adquiere la inteligencia" (Pr
4;7). Debe apegarse a esta regla todo tiempo, y con más razón en este caso.
Este
texto, (Juan 10;30), suele citarse
como apoyo para la Trinidad, aunque en él no se
menciona a una tercera
persona. Pero Jesús mismo mostró lo que quería decir con que él y el Padre
fueran "uno". Según (Jn
17;21-22), oró a Dios para que sus discípulos "todos ellos sean uno, así
como tú, Padre, estás en unión conmigo y
yo estoy en unión contigo, que ellos también estén en unión con nosotros, (...) que ellos sean uno así
como nosotros somos uno". ¿Estaba Jesús orando para que todos sus discípulos llegaran a ser una sola
entidad? No; obviamente Jesús oraba para que estuvieran unidos en pensamiento y propósito, como lo estaban él y Dios. Véase también (1Cor 1;10)
En (1Cor 3;6-8) Pablo dice: "Yo
planté, Apolos regó (...).
El que planta y el que riega uno son". Pablo no quiso decir
que él y Apolos fueran dos personas en un solo ser; quiso decir que estaban unidos en propósito. La palabra
griega que Pabló usó ahí
para "uno" (hen) es neutra, y literalmente se puede traducir
"una (cosa)", lo que indica unidad en cooperación. Es la misma
palabra que usó Jesús en (Jn 10;30) para describir su relación con el Padre. También es la misma palabra que Jesús
empleó en (Jn 17;21-22). Por eso, cuando usó la palabra "uno" (hen)
en estos casos, hablaba sobre unidad de pensamiento y propósito.
Respecto
a (Jn 10;30), Juan Calvino (quien era trinitario) dijo en su Comentario sobre el Evangelio según
Juan: "Los antiguos dieron mal uso a este pasaje cuando quisieron probar con él que
Cristo es (...) de la misma
esencia que el Padre. Pues Cristo no
arguye sobre la unidad de la sustancia, sino sobre la conformidad de él con el
Padre".
En
el mismo contexto de los versículos que siguen a (Jn 10;30), Jesús afirmó vigorosamente que
con sus palabras no alegaba ser Dios.
Preguntó lo siguiente a los
judíos que equivocadamente habían
llegado a aquella conclusión y querían
apedrearlo: "¿Por qué acusan de blasfemia a mí, a quien
el Padre consagró y envió al
mundo, si digo que soy Hijo
de Dios?".(Juan 10;31-36,
NBE) No; Jesús no afirmó que fuera
Dios Hijo, sino el Hijo de Dios.
La
plena verdad se hace muy patente; es decir, así como Cristo y los miembros de su cuerpo
se consideran como uno, de la misma
manera se considera a Jehová y
Cristo como uno. Todos
son uno en parecer, propósito y organización. Si ésta
no fuera la conclusión lógica, Jesús nunca hubiera dicho: "El Padre mayor es
que yo" (Jn 14;28), y, por consiguiente, "No sea hecha mi
voluntad, sino la tuya"
(Lc 22;42) De manera que todos,
incluyendo a Jesús, están sometidos a la
gran Cabeza, el Dios todopoderoso" ("Que
Dieu...", pág 91-92) ("Let God...", pág 103-104)
Cuando
Jesús dice: "Yo y el Padre somos
uno"(NM) estas palabras deben
entenderse de esta manera: "Nosotros estamos en armonía", "el
Padre y el Hijo trabajan en armonía", "Jehová y su Hijo son una sola
cosa....porque trabajan en armonía, (de manera organizada) y persiguen un mismo
fin".
Respecto
a (Jn 10;30) Juan Calvino (quien era trinitario) dijo en su Comentario sobre el Evangelio según
Juan: "Los antiguos dieron mal uso a este pasaje cuando quisieron probar con él que
Cristo es (...) de la misma
esencia que el Padre. Pues Cristo no
arguye sobre la unidad de la sustancia, sino sobre la conformidad de él con el Padre".
En el mismo contexto de los
versículos que siguen
a (Jn 10;30)
Jesús firmó vigorosamente
que con sus palabras no alegaba ser Dios.
Preguntó lo siguiente a los judíos que
equivocadamente habían llegado
a aquella conclusión y querían apedrearlo: "¿Por qué acusan de
blasfemia a mí, a quien el Padre
consagró y envió al mundo, si digo que soy Hijo de Dios?" (Jn 10;31-36)
(NBE). No; Jesús no afirmó que fuera Dios Hijo, sino el Hijo de Dios. ("Debería usted creer en la
trinidad")
Además,
Jesús no habló de que meramente él y su Padre
fueran uno sino que también habló
de todos sus discípulos como siendo uno: "Para que todos ellos sean uno; así
como tú, oh Padre, ere en mí, y yo
en tí, para que ellos
también sean uno en nosotros;... para que
ellos sean uno, así como nosotros somos uno".
Al
orar que sus discípulos "sean uno
en nosotros" Jesús ciertamente no
quiso decir que sus
discípulos habían de ser
incorporados en una Trinidad, de modo que la Trinidad fuera a
aumentar su número de miembros o Personas de
tres hasta ciento cuarenta y
cuatro mil y tres, de modo que no fuera más un
Dios tres-en-uno sino de entonces
en adelante un Dios muchos-en-uno. ¡Eso es un absurdo!. Jesús dijo que, tal como él y su Padre eran
uno, así se había de hacer uno a sus discípulos. ¿Cómo se hace uno a sus
discípulos? No como un
solo Dios; no como uno solo individuo de muchas personas. No, sino
uno en creencia en el un solo
Dios y en el nombre de aquel a
quien Dios envió; uno en la clase de fruto que producen por el mismo espíritu; uno en la clase de obra; uno en armonía y acuerdo entre
sí; uno en el mismo propósito y objetivo, que es la vindicación de Jehová como
"el solo Dios verdadero" y la salvación de la familia humana por
Jesucristo para la gloria de Dios.
También
son un grupo de familia, puesto que
todos estos discípulos son engendrados
por Dios para llegar a ser hijos
espirituales de Dios y así llegar a ser
los hermanos de Jesucristo. Puesto que la
manera en que todos estos discípulos son uno en la manera en que el Padre celestial y su Hijo
Jesucristo son uno, entonces el Padre y
el Hijo no son los dos uno solo Dios de
más de una persona. El
Padre celestial queda como
"solo Dios verdadero", y
Jesucristo a quien él envió queda el
Hijo del "solo Dios verdadero". Todos
los 144.000 discípulos de
Jesucristo engendrados por espíritu
son uno en el Padre y en el Hijo al estar en unión con ellos, en una especial
relación armoniosa de familia. ("La
Atalaya" de 15.3.63, pág 171-172)
Análisis:
Los TJ dicen que
Jesús nos explica este texto con
toda otra serie de textos. De esta forma parece que la Biblia se convierte en un innecesario
rompecabezas. Cristo nos explica lo que
quiere decir en el propio contexto del versículo (Jn 10;30),
precisamente ahí. Después de
releerse todo el episodio que encierra
el contexto del versículo que
estamos estudiando, podemos llegar, fácilmente, a las siguientes conclusiones:
Los judios
acaban de preguntar a Jesús que les diga
de una vez si es o no es el Mesías. Jesús les dice que por medio de sus obras ,
dando la vida eterna, ya ha demostrado quien es. Como garantía de este poder salvífico que tiene,
finalmente les dice: "Yo y el Padre somos uno" (En
neutro: un solo ser, no una sola persona). Los poderes del Padre son
los del Hijo. Los profetas explícitamente hablaban en nombre
de Dios y a nadie extrañaba, Pero aquí la afirmación es totalmente trascendente, es la comunicación de poderes.
Y si existe esta comunidad o identidad de poderes, presupone ello una unidad e
identidad de naturaleza.
Los TJ
dicen que Cristo es uno con el Padre, como los cristianos lo son con Cristo.
La Biblia, en cambio, lo dice al revés: Los cristianos son uno con Cristo,
como Cristo lo es con el Padre.
No es una
diferencia verbal solamente.
Los TJ
lo que quieren decir con eso es que Cristo es uno con el Padre, como los cristianos lo son con
Cristo. Es decir, "son uno en
parecer, propósito y organización".
Es decir, la unidad de un partido político o de un club de fútbol, poco
más o menos. La unidad de los cristianos con Cristo, es algo mucho más serio y
sobrenatural; se trata de la
participación de la vida misma de Cristo, participación de su vida
común con el Padre en el Espíritu Santo.
Cuando S.
Pablo dice: "Vivo yo, ya no yo,
vive en mí Cristo", o cuando
Cristo nos dice: "Yo soy la vid; vosotros los sarmientos",
ciertamente que no piensan
en ningún "parecer, propósito
y organización" en el
sentido que a esos términos se
les da en los libros de los TJ.
El hecho de
que los cristianos sean uno con Cristo,
como El lo es con el Padre, no tiene por qué implicar una semejanza en todos
los aspectos, mejor dicho es una
semejanza -en un sentido-, y no una
igualdad, porque esto lo precisa el Evangelio sobreabundantemente. Así,
tenemos, que de Cristo se dice que es el Unigénito del Padre, el Hijo
simplemente, en el cual como dice tantas veces S. Pablo, los cristianos reciben la "adopción filial". Es decir
que los cristianos son hijos de Dios por
adopción, y Cristo en cambio, es simplemente "el Hijo".
Cristo
mismo, pues, nos determina el sentido en
el que El es uno con el Padre: es su Hijo natural. Respecto de
los fieles, El es "el camino,
la Verdad y la Vida" (Jn
14;6) El es la vid y los fieles son solamente los sarmientos, que viven de la Vida que él les da.
Así que los
cristianos son uno con Cristo, porque El es para ellos el centro y fuente de la
Vida que les es dada. Y así, son uno con Cristo, como El lo es con el Padre,
porque el Hijo recibe todo del Padre, y de
la propia vida divina
hace partícipes a los
cristianos, como la vid
comunica con la savia su
vida a los sarmientos.
¿Que
hay textos en los cuales
Cristo dice que es menor que el Padre? Pues claro
que los hay. Cristo es Dios y hombre verdadero. Tiene, pues, dos
naturalezas: la divina y la humana,
unidas en una sola persona. Como Dios,
es igual al Padre; como hombre, aunque
perfectísimo, es inferior a El. Por eso el mismo Cristo dice que es inferior al Padre, y S. Pablo afirma que es menor que los ángeles. Pero no como
Dios, sino como hombre. Como Dios recibe
toda la exaltación que se merece en
el capítulo primero de Hebreos.
Pasajes del
Nuevo testamento en los que se habla de la unidad entre el Padre y el Hijo y
entre estos y nosotros:
(1 Jn 1;3): "Lo que hemos visto y oído os lo anunciamos a vosotros, a fin de que vivais tambien en
comunión con nosotros. Y esta comunión nuestra es con el Padre y con su Hijo
Jesucristo."
(Jn
17;20,21): "Pero no ruego sólo por estos,
sino por cuantos crean en mí por su palabra,
para que todos sean uno como tú padre
estás en mí y yo en tí, para que también ellos sean en nosotros."
(Jn
17;22,23): "Yo les he dado la gloria
que tu me diste a fin de que sean uno
como nosotros somos uno. Yo en ellos y tú
en mí, para que sean consumados en la unidad."
(Jn 10;30):
"Yo y el Padre somos una sola
cosa"
(Jn 17;11):
"Padre santo, guarda en tu nombre a estos que me has dado para que
sean uno como nosotros."
(Gl 3;26-29): "Todos,
pues, sois hijos de Dios
por la fé en Cristo Jesús. Porque cuantos en Cristo habeis sido
bautizados, os habéis vestido de Cristo.
No hay ya judio o griego, no hay siervo o libre, no hay varón o hembra, porque todos sois uno en Cristo Jesús."
(1Jn 3;24):
"El que guarda sus mandamientos permanece en Dios y Dios en él; y nosotros
conocemos que permanece en nosotros por
el
Espíritu que nos ha dado."
(Jn 14;23):
"Si alguno me ama, guardará mi
palabra, y mi Padre le amará y vendremos a él y en el haremos morada."
(1Jn
4;12,13): "Si nosotros nos amamos mutuamente Dios permanece en nosotros y
su amor es en nosotros perfecto. Conocemos que permanecemos en El y El en
nosotros en que nos dió su Espíritu."
(1Jn
4;15): "Quien confiese que Jesús
es el Hijo de Dios Dios permanece en El y El en Dios."
(1Jn 4;16):
"Dios es caridad, y el que vive en
caridad permanece en Dios y Dios en él."
(1Jn
2;24,25): "Lo que desde el
principio habéis oído, procurad que permanezca en
vosotros. Si en vosotros permanece lo
que habéis oído desde el
principio, también vosotros permaneceréis en el Hijo y en el Padre
y ésta es la promesa que El nos hizo, la vida eterna."
Los TJ nos
dicen Jesús llamó a Dios el "único
Dios verdadero" (Jn 17;3) Al
referirse a Dios, nunca habló de
él como de una deidad que consistiera en una pluralidad de personas. El comentario sobre este "uno" los TJ deberían aplicarlo a (Jn 10;30) "Mi Padre y yo somos uno". En este
caso, la misma expresión esta referida a dos personas, por lo tanto su razonamiento no vale. Al decir que Jehová es uno debemos precisar,
por el contexto, en que sentido es uno.
En este caso es uno dentro de su naturaleza divina en frente de los
pueblos circundante que admiten varios dioses.
Jn 10;33
s/TJ:
s/TJ:
Los TJ admiten que en (Jn 10;33) los judíos quieren apedrear a Jesucristo, pero no por blasfemia a Dios, sino a... un dios
Análisis:
Los judíos lo entienden a la primera, pues a continuación dice el evangelista que "trajeron piedras" para apedrearlo como blasfemo, pues dijeron que "tu, siendo hombre, te haces Dios" (Jn 10; 31-33). Ante esta acusación de blasfemia Jesús, lejos de sacarles la idea de la cabeza, les confirma la misma idea proponiéndoles como prueba de que dice la verdad, algunos milagros que había realizado en nombre de Dios. En lugar de retractarse de lo dicho, Nuestro Señor lo reafirma más, al añadir: "El Padre está en mí, y yo en el Padre" (Jn 10;38). (Esta idea la repite en (Jn 14;9-11) y (Jn 17;21) Y los judíos insisten en querer lapidarlo pero "El se deliza de entre sus manos" (Jn 10;39).
Los TJ para no tener que aceptar lo que sencillamente dice el texto, recurren al mismo subterfugio que en (Jn 1;1) traduciendo el v33 en vez de "Tu, siendo hombre, te haces Dios" por "Tu, aunque eres hombre, te haces a tí mismo un dios" (con artículo indeterminado y dios con minúscula) Por lo tanto, debiéramos concluir, que, aunque los TJ admiten que le quieren apedrear por blasfemo, no es por blasfemia a Dios, sino a... un dios. ¿Pero no han escrito los TJ, como hemos visto más arriba, en ("Que Dieu...", pág 91-92) ("Let God...", pág 103-104), "en (Jn 10;30), Jesús afirmó vigorosamente que con sus palabras no alegaba ser Dios. Preguntó lo siguiente a los judíos que equivocadamente habían llegado a aquella conclusión y querían apedrearlo"?. Claramente los TJ nos están diciendo que los judíos habían llegado -aunque equivocadamente según ellos- a la conclusión de que Jesús era Dios, no dios. ¿Entonces, por qué corrigen el texto cambiando Dios por "dios".
Los TJ en (Jn 5; 18-21) que es una situación similar traducen que Jesús se hace igual a Dios (no "un dios") (?)
¿Por qué en (Jn 5;18), los Testigos de Jehová traducen "Dios", y en cambio en (Jn 10;33), traducen "un dios"? ¿Pero no nos han enseñado que en (Jn 5;18) esta expresión no la dice el evangelista sino que lo que hace el evangelista es transmitir lo que creía el pueblo judío? ¿Es que
en (Jn 10;33) ya han cambiado de opinión y ahora ya no creen que es "Dios", sino "un dios"?
¿Conocían ya los judíos que Jesús era un dios? ¿De dónde? ¿Como se puede deducir de la frase: "Yo y el Padre somos una sola cosa", que Jesús era "un dios"? (Jn 10;30)
La reacción de los judíos no se hace esperar: "De nuevo los judíos cogieron piedras para apedrearlo" . Para apedrearlo como blasfemo, pues dijeron que "tú, siendo hombre, te haces Dios" (Jn 10;31-33). Sin embargo, Jesús, lejos de sacarles la idea de la cabeza, les confirma la misma idea proponiéndoles como prueba de que dice la verdad, algunos milagros que había realizado en nombre de Dios. En lugar de retractarse de lo dicho, Nuestro Señor lo reafirma más en cierto sentido, al añadir: "El Padre está en mí, y yo en el Padre" (Jn 10;38). (Esta idea la repite en (Jn 14;9-11) y (Jn 17;21) Y los judíos insisten en querer lapidarlo pero "El se dliza de entre sus manos" (Jn 10;39).
¿Por qué en (Jn 5;18), los Testigos de Jehová traducen "Dios", y en cambio en (Jn 10;33), traducen "un dios"? ¿Pero no nos han enseñado que en (Jn 5;18) esta expresión no la dice el evangelista sino que lo que hace el evangelista es transmitir lo que creía el pueblo judío? ¿Es que
en (Jn 10;33) ya han cambiado de opinión y ahora ya no creen que es "Dios", sino "un dios"?
¿Conocían ya los judíos que Jesús era un dios? ¿De dónde? ¿Como se puede deducir de la frase: "Yo y el Padre somos una sola cosa", que Jesús era "un dios"? (Jn 10;30)
La reacción de los judíos no se hace esperar: "De nuevo los judíos cogieron piedras para apedrearlo" . Para apedrearlo como blasfemo, pues dijeron que "tú, siendo hombre, te haces Dios" (Jn 10;31-33). Sin embargo, Jesús, lejos de sacarles la idea de la cabeza, les confirma la misma idea proponiéndoles como prueba de que dice la verdad, algunos milagros que había realizado en nombre de Dios. En lugar de retractarse de lo dicho, Nuestro Señor lo reafirma más en cierto sentido, al añadir: "El Padre está en mí, y yo en el Padre" (Jn 10;38). (Esta idea la repite en (Jn 14;9-11) y (Jn 17;21) Y los judíos insisten en querer lapidarlo pero "El se dliza de entre sus manos" (Jn 10;39).
La blasfemia estaba castigada con la lapidación ya desde Moises (Ex 22; 27-28) (Lev 24;16) En tiempo de Jesús, blasfemia no era sólo una palabra insultante y difamatoria contra Dios, ni una maldición de su nombre, era algo más amplio. Todo hecho que implicase arrogarse derechos o atributos de Dios, era considerado blasfemia. Por eso, entre otras cosas, Jesús fue acusado de blasfemia (Mt9;3) (Mt26;64-66) (Mc2;7)(Lc5; 21)(Mc 14; 64) Con más razón lo acusan en esta ocasión ya que no sólo se arroga un derecho o un atributo: se iguala a Dios.
A los TJ se les puede preguntar ¿pero es que la blasfemia en tiempo de Moises, se refiere a varios dioses?, ¿no queda claro que la blasfemia es una ofensa a Dios, al único Dios, Yhavé?. Los TJ pueden, si quieren, aceptar Dios y "un dios" pero la blasfemia sólo tiene que ver con Dios. Y como un detalle accesorio podemos decir que en la biblia del NM de los TJ, insertan "un" sin corchetes, todo lo contrario de lo que indican en su introducción que van a hacer cuando para clarificar el texto crean que es necesario añadir alguna palabra o expresión que no se encuentra en el original y que sea consistente con ésta. Ver (Jn 5;17-18)
Jn 11;14
Ver (Jn
10;7)
Jn 11;25-26
Cristo,
como Dios, es el redentor o
la resurrección Véase (Job
19;25-27)
Jn 12;38-41
Comparar
con (Is 6;1)
"El que me contempla , contempla también al que me ha enviado"
s/TJ:
Podemos
ver a Jehová Dios mediante su creación; podemos verlo al leer acerca de sus acciones en la Biblia; también podemos verlo mediante las
palabras y los hechos de Jesucristo.
Este mismo dice en Juan 12;45: "El
que me contempla, contempla también al que me ha enviado". En Juan 14;9 vuelve a decir: "El que me ha visto a mí ha visto al Padre también". Colosenses 1;15 afirma: "(Jesús)
es la imagen del Dios invisible". Y Hebreos
1;3: "(Jesús) es el
reflejo de (la) gloria (de
Dios) y la representación exacta
de su mismo ser".
Jehová
envió a su Hijo no solo para proveer un rescate, sino para dar un ejemplo digno
de imitar, tanto en palabra como en hechos.
Jesús habló las palabras de
Dios. En
Juan 12;50 dijo: "Las cosas que hablo, así como el
Padre me las
ha dicho, así
las hablo". No
obró independientemente, sino que
hizo lo que Dios le mandó. En
Juan 5;30 dijo: "No puedo
hacer ni una sola cosa por mi propia iniciativa". (Juan 6;38.)
Jesús vio a
personas leprosas, minusválidas, sordas, ciegas y endemoniadas, así como a personas que se lamentaban por la
muerte de seres queridos. Enternecido,
curó a enfermos y levantó a muertos. Vio las muchedumbres desolladas y desparramadas en sentido
espiritual, y empezó a enseñarles
muchas cosas. No
solo enseñaba con
palabras apropiadas, sino con palabras llenas de
gracia que procedían de su corazón y llegaban directamente al corazón de sus oyentes; el resultado era que
estos se sentían atraídos a él, pues
acudían temprano al templo para
oírlo y estaban
pendientes de él,
escuchándole con gusto. Multitudes se congregaban para
oírlo, y decían que 'jamás había hablado otro hombre
como él'; los oyentes quedaban
atónitos por su modo de enseñar. (Juan 7;46; Mateo 7;28,29; Marcos 11;18;
12;37; Lucas 4;22; 19;48; 21;38.) Y cuando sus enemigos procuraron entramparlo con preguntas, les
volvió las tornas y los hizo callar.
(Mateo 22;41-46; Marcos 12;34; Lucas 20;40.)
Jesús
proclamó que "el reino de los cielos
se (había) acercado", e instó a los oyentes a seguir "buscando primero el
reino". Envió a otros a
predicar que "el reino de los cielos se (había) acercado"
y a "(hacer) discípulos de gene
de todas
las naciones", y les
dijo que fueran testigos de
Cristo "hasta la parte más distante de la tierra". Hoy día hay casi cuatro millones y medio de testigos de Jehová que siguen las pisadas de Cristo y hacen
estas cosas. (Mateo 4;17; 6;33; 10;7; 28;19; Hechos 1;8.) ("La Atalaya" de 15.6.93, pág 16 y
17)
Ver (Jn
14;7-11)
Jn 12;46
Ver (Jn
1;8-9)
Jn 13;14
A Jehová
se le llama el Señor verdadero en (Ex 23;17). Aquí se aplica el título de Señor a Cristo.
Jn 14;1
"No se turbe vuestro corazón; creeis en Dios,
creed también en mí" (NC)
"No se les perturbe el corazón. Ejerzan fe en Dios, ejerzan fe también en
mí". (NM)
Jn 14;6
Ver (Jn
1;4)
Jn 14:7-11
"...Si me habéis conocido,
conoceréis también a mi Padre. Desde ahora le conocéis y le habéis
visto. Felipe le dijo: Señor, muéstranos al Padre y nos basta.
Jesús le dijo: Felipe, ¿tanto
tiempo ha que estoy con vosotros y no me
habéis conocido? El que me ha visto a mí ha visto al Padre;
¿cómo dices tú: muéstranos al
Padre? ¿No crees que yo estoy en el Padre y el Padre en
mí? Las palabras que yo os digo no las
hablo de mí mismo; el Padre que
mora en mí, hace sus obras. Creedme que yo estoy en el Padre y el Padre en mí; a lo menos creedlo por las obras” (NC) En relación a (Jn
1;18)... “A Dios nadie le vió
jamás; Dios Unigénito , que está en el
seno del Padre, ése nos le ha dado a conocer”. (NC)
"...Si ustedes
me hubiesen conocido, hubieran
conocido a mi Padre también; desde este momento lo
conocen y lo han visto. Felipe le dijo: "Señor, muéstranos al Padre y nos basta".
Le dijo Jes£s: "¿He estado
con ustedes tanto tiempo, y aún así, Felipe, no has llegado a conocerme? El
que me ha visto a
mí ha visto al Padre (también).
¿Cómo es que dices:
"muéstranos al Padre? ¿No crees
que yo estoy en unión con el Padre
y el Padre está en unión
conmigo? Las cosas que
les digo a ustedes no las hablo de
por mí; sino el Padre que
permanece en unión conmigo está haciendo sus obras.
Créanme que yo estoy en unión con
el Padre y el Padre está en unión conmigo; de otra manera, crean a causa de las
obras mismas. (NM) ..A
Dios ningún hombre le ha
visto jamás; el dios unigénito que está
en la posición del seno para con el
Padre es el que lo ha explicado. (NM)
s/TJ:
Lo
que dijo Jesús es muy diferente a: 'Yo
soy el Padre'. Jesús acababa de
decirle a Felipe y a
los otros apóstoles fieles
que él se iba a Dios
su Padre; y por
lo tanto, ¿cómo podía
Jesús decir al mismo instante que Felipe, cuando miraba a Jesús, estaba mirando al Padre?. Jesús no pudo haber querido decir
eso, porque él separó a Dios su Padre
de sí, como cuando dijo:
"Creéis en Dios, creed también en
mí" (Jn 14;1). ¿Por qué la
expresión "también en mí", si
Jesús fuera Dios mismo?. Felipe le
preguntó a Jesús:"Señor, muéstranos al Padre", y Jesús contestó que
eso era lo que había estado haciendo
todo el tiempo, a saber, mostrándoles el Padre. El había estado explicando
quien era su Padre celestial. Había estado mostrándoles cómo era su Padre
celestial. Imitaba a su Padre. Era como
él, tanto que cuando uno veía a Jesús
era como ver a su Padre. ("La
Atalaya" de 15.3.63, pág 174)
Análisis:
Felipe le
pide que le muestre al Padre. Y Jesús le regaña porque Felipe todavía no le ha
conocido. :"¿Tanto tiempo ha que
estoy con vosotros y no me habéis
conocido?”. Jesús le está
diciendo a Felipe que el Padre a
quien él quiere que le muestre, de alguna manera es
igual que él. No
le está intentando decir,
como maliciosamente indican los
Tj en el artículo
mencionado que enseñan los trinitarios, 'Yo soy el Padre'. Realmente,
si como nos dice Jesús por dos veces consecutivas: "Yo estoy en el Padre y el Padre está en mí",
es que de alguna manera el Padre y el
Hijo, siendo dos personas distintas, se
funden en una misma naturaleza, que ha de ser divina, de manera que conociéndolos, al ver al Hijo es
como si vieras al Padre y al ver al
Padre es como si vieras al Hijo.
Jn 16;13-15
"...pero cuando viniere
Aquél , el Espíritu de verdad, os
guiará hacia la verdad completa, porque
no hablará de sí mismo, sino que hablará
lo que oyere y os comunicará las cosas venideras. El me glorificará porque tomará de lo mío y
os lo dará a conocer. Todo cuanto tiene el Padre es mío; por
esto os he dicho que tomará de lo mío y os lo hará conocer". (NC)
"...sin
embargo cuando llegue aquél, el espíritu de la verdad, él los guiará a toda la verdad, porque no hablará por su propio impulso, sino que hablará las cosas que
oye, y les declarará las
cosas que vienen. Aquél me glorificará
porque recibirá de lo que es mío, y se lo declarará a ustedes. Todas las
cosas que el Padre tiene son
mías. Por eso dije que recibí de
lo mío y se (lo) declara a ustedes".(NM)
Jn 17;2
“Padre...glorifica a tu Hijo para
que el Hijo te glorifique, según el poder que le diste sobre toda carne,
para que a todos los que tú le diste les dé El la vida eterna”
(NC)
“Padre...glorifica
a tu hijo para que tu hijo te glorifique a tí, como le has dado autoridad sobre toda carne,
para que, en cuanto a todo (el número de los) que les has dado, les
dé vida eterna”. (NM)
Jn 17;5
"...Ahora tú, Padre,
glorifícame cerca de tí mismo con la
gloria que tuve cerca de tí antes que
el mundo existiese. (NC)
...Así es que
ahora, Padre, glorifícame al lado de
tí mismo con la gloria que tenía
al lado de tí antes que el mundo fuese. (NM)
En relación
a (Lev 24;16): Véase (Jn 10;30-39)
Análisis:
La misma que
tenía antes de que el
mundo (kosmos) existiese, porque
la persona es la misma.
Uno mismo es el que preexiste antes de la
creación y el que existe
ahora en la humanidad. "Antes de que el
mundo (kosmos)”.... es un
modo concreto de expresar la eternidad. "kosmos" tiene aquí un sentido universal, que abarca
todo lo que no es Dios. Así, el Padre y
el Hijo quedan al otro lado del mundo y
del tiempo (Jn 1;1-3). La
traducción de este versículo (Jn 17;5)
según NM es "Así
es que ahora, Padre, glorifícame al lado
de tí mismo con la gloria que tenía al lado de tí antes que el mundo fuese". La traducción del los PCJ es : "Y
ahora, glorifícame tu, Padre, en tí, en la gloria que tenía en tí, antes de que
el mundo existiese"