miércoles, 17 de junio de 2015

DIOS ES OMNISCIENTE. DIOS NO QUISO PROBAR A ADAN Y EVA.

DIOS ES OMNISCIENTE. DIOS NO QUISO PROBAR A ADAN Y EVA.

s/TJ:

Pero  ¿no leemos  acerca  del papel  de Jesús  como  rescatador que  fue "preconocido antes de  la fundación del mundo"?   Esto parecería indicar que  mucho antes  de que  Adán pecara  Dios había  hecho provisión  para rescatar a la humanidad, mostrando presciencia del pecado de Adán.  Pero esto no fue así (1Pe 1;20) ("¡Despertad! de 22.1.68, pág 28)
¿Por cuanto  tiempo se  suponía que  viviera Adán, y  dónde?  No  era el pensamiento  de Dios  que  Adán muriera  y dejara  el  Paraíso de  Edén descuidado.  La  Tierra no había de  ser dejada sin ser  habitada por la humanidad.  Dios  puso delante  de Adán la  oportunidad de  adquirir vida eterna en la Tierra en el  Paraíso de Edén.  Esto, sin embargo, dependía de la  obediencia eterna  de Adán  a su  Creador y  Dios.  Dios  no puso inclinaciones pecaminosas,  en Adán.  Dios  dotó a su hijo  terrestre de las cualidades  que lo asemejaban  a Dios, justicia, sabiduría,  poder y amor, con  un perfecto  sentido moral.   No obstante,  en reconocimiento de Su propia soberanía sobre todo el universo, era propio para Dios, sin que eso  quisiera decir sospechas en  cuanto a Adán, el  que sometiera a prueba a ese hijo terrestre Suyo.  La  prueba que le puso a Adán fue una muy pequeña limitación de su libertad. ("El propósito eterno de Dios va triunfando ahora", pág 42-43)

¿PREVIÓ JEHOVÁ QUE ADÁN PECARÍA?

Jehová Dios  es omnisciente, es decir,  que todo lo sabe,  y perfecto en justicia.  El  tener él  estas dos cualidades  ha planteado  un problema para los sinceros amadores dela Biblia (Dt 32;4) (Rom 11;33-35)

Por eso en  lo que respecta a  la transgresión de Adán  parecería que el que Dios  supiera de  antemano con  certeza que  Adán pecaría  le habría robado a Adán  su libre albedrío, puesto que habría  tenido que obrar de la manera  que Dios previó que  lo haría.  Esto entrañaría  que Dios era injusto, castigando a Adán por lo que tenía que hacer (Gn 3;19).

Es verdad,  algunos, como los  teólogos católicos romanos,  presentan el argumento de  que "la  infalible certeza  de la  presciencia de  Dios de todos  los actos  libres  de las  criaturas, sin  embargo,  no los  hace necesarios,  sino que  las deja  libres."  Aún esta  posición no  parece resolver el problema, porque hay diferencias entre estos teólogos cuando tratan  de  explicar  cómo  "hay armonía  perfecta  entre  el  infalible conocimiento  eterno  de  Dios  y   los  actos  futuros  libres  de  sus criaturas."-Predestination, Grace and Free Will, M.J.  Farrelly (1964).

Pudiera  decirse  que la  presciencia  de  Dios  se relaciona  con  tres esferas.  Muchísimas veces El  predijo que acontecerían ciertos sucesos, y luego él mismo  se encargó de que acontecieran, como  el diluvio en el día de Noé y  las diez plagas sobre el antiguo  Egipto.  Sin embargo, se pudiera decir que  todos éstos implicaron, no tanto  su presciencia como su  omnipotencia,  su Divinidad;  así  como  Dios  mismo indica  en  (Is 43;9-13), donde él desafía a los  dioses falsos a predecir cosas y luego hacer que sucedan, para probar que son dioses.

Otra esfera en la  cual la presciencia de Dios ha de  verse tocante a la manera  de  proceder  que  emprenderían  ciertas  criaturas  con  cierta personalidad.  Por ejemplo,  Dios no solo predijo muchos  de los sucesos de la  vida terrenal de su  Hijo, sino también que  su Hijo permanecería fiel a  él a pesar de  la oposición más  fuerte; por cuya razón  Dios lo levantaría de entre los muertos para  ser usado más para gloria de Dios. (Is 53)  ¿Por qué podía predecir  tan confiadamente Dios que  su Hijo se probaría  fiel?  Sin  duda debido  a su  larga asociación  con su  Hijo; simplemente  no  había  duda en  la  mente  de  Jehová  de que  su  Hijo permanecería fiel prescindiendo de lo que tuviera que aguantar.

Lo mismo, a  cierto grado, se pudiera decir también  concerniente a Job. Jehová Dios pudo depender de Job  para probar que el Diablo es mentiroso porque pudo  leer el corazón  de Job y  había observado el  derrotero de retención de integridad de Job.  De manera semejante Jesucristo, después de su resurrección, insinuó que el apóstol Pedro permanecería fiel hasta el  fin,  debido  a su  asociación  con  Pedro  y  debido a  poder  leer sobrenaturalmente el corazón de Pedro.  (Jb 1 y 2) (Jn 21;15-19).

Por otra parte, Dios por medio de Moisés predijo que la nación de Israel en  días  venideros resultaría  infiel.   "Bien  sé yo  que...sin  falta obrarán  ruinosamente,  y  ciertamente   se  desviarán  ruinosamente,  y ciertamente se desviarán del camino acerca del cual les he mandado." (Dt 31;29).  Aquí, de  nuevo, fue profecía, pero no sin  algo de base.  Dios previó que se  apartaría debido a su tendencia hacia  el egoísmo, aunque nunca quedaría sin un resto fiel (Dt 9;6) (Is 1;9).

Considerando ahora la pregunta de que si Dios previó o no que Adán y Eva pecarían, notamos  que esto requeriría  una clase de presciencia  que es diferente  de   lo  susodicho.   No   simplemente  tenía  que   ver  con acontecimientos ni había ninguna base en  la conducta anterior de Adán y Eva sobre la cual Dios pudiera haber predicho que pecarían.  Cuando Dios les dio  el mandato de no  comer del fruto  de cierto árbol para  que no murieran, no había nada en Adán  ni Eva que indicara que desobedecerían. De   hecho,    si   hubiera    habido   esto    hubiera   desprestigiado desfavorablemente a Jehová Dios su Creador.  (Gn 2;15-17) (Dt 32;4-5).

Se  ha raciocinado  que "el  negar a  Dios la  presciencia de  los actos libres,  no  necesariamente  sería  incompatible  con  su  omnisciencia. Puesto que  la omnipotencia no  entraña el poder de  hacer lo que  no es factible,  así  la  omnisciencia  no   entraña  el  poder  de  saber  lo inconocible.   Si la  presciencia de  los  actos libres  es un  concepto contradictorio no hay razón por la que tal conocimiento se le atribuya a Dios.  Pero ésa es una contradicción que no puede probarse."

Bien pudiera  ser que la presciencia  de los actos futuros  libres es un concepto contradictorio, pero dado que evidentemente no se puede probar, tenemos que  hallar otra  solución, y hay  una solución  razonable.  Por ejemplo, aunque  Dios es omnipotente  no utiliza  todo su poder  en toda situación.  Y  así sucede con  su conocimiento infinito, que  incluye su presciencia.  El  tiene la habilidad de  ver y conocer todas  las cosas, pasadas,  presentes  y  futuras,  pero  también  puede  evitarse  cierto conocimiento si opta por hacerlo.   Por consiguiente, Dios puede rehusar examinar el futuro si así lo  quiere.  Y ciertamente parece que optó por no examinar el  futuro en el caso  de Adán y Eva.  ¿Por  qué?  Porque el ejercer presciencia sin ciertas  condiciones previas existentes mediante las  cuales  determinar el  resultado  lógico  que habría  de  esperarse equivaldría a la predestinación del destino eterno de las criaturas.

Sí, Jehová Dios creó a Adán a  su imagen y semejanza.  Por lo tanto Adán tenía, no solo  un organismo perfecto, sino también  la inclinación para hacer lo correcto.   Solo como resultado de su pecado  adquirió su prole otra  tendencia (Gn  8;21). Por  lo tanto,  Dios  no  tuvo razón  para examinar el futuro sospechosamente para determinar qué haría el hombre. Ni fue necesario que Dios examinara el futuro a fin de prepararse para alguna  eventualidad, no  pudiendo las  criaturas de  Dios frustrar  sus propósitos.   
        
Pero,  ¿no leemos  acerca del  papel de  Jesús como  rescatador que  fue "preconocido antes de  la fundación del mundo"?   Esto parecería indicar que  mucho antes  de que  Adán pecara  Dios había  hecho provisión  para rescatar a la  humanidad, mostrando presciencia del pecado  de Adán (1Pe 1;20).

Pero todo  eso depende  del sentido en  el cual se  usa aquí  la palabra "mundo", porque los escritores de la  Biblia la usan en varios sentidos. Evidentemente "mundo"  se usa en estos  textos en el sentido  que lo usó Jesús cuando le dijo  a Nicodemo: "Tanto amó Dios al mundo  que dio a su Hijo  unigénito." (Jn  3;16).  Es  el mundo  de la  humanidad el  que es redimible, la  fundación del  cual no  tuvo lugar con  Adán sino  con su prole, particularmente para el tiempo  de Abel, como Jesús mostró cuando dijo:  "La sangre... derramada  desde la  fundación del  mundo...desde la sangre de  Abel." Así después  que Adán hubo  pecado, pero antes  de los días de Abel, Dios se propuso redimir a la raza humana.  (Lc 11;50-51).

Por eso podemos ver cómo Jehová  Dios puede ser omnisciente, que todo lo sabe, y  no obstante justo, no  ejerciendo su presciencia en  el caso de Adán y Eva. ("¡Despertad! de 22.1.68, pág 27 y ss)

Análisis:

Pero está  claro en (Hech  2;23) que sí  hizo uso de  su presciencia porque  Jesucristo fue  "entregado  por el  consejo determinado  y presciencia de Dios" (NM) (Véase  también: (Rom 16;25) (Rom 8;28-39) (Ef  1;4-11) (Ef  3;5-9) (1Pe  1;20).  Sin  el pecado  de Adán  no hubiese sido entregado Jesucristo, luego...

Los  TJ nos  dicen que  "no fue  necesario que  Dios examinara  el futuro a fin de  prepararse para alguna eventualidad".  Coherentes con esta  interpretación, los TJ enseñan  -como enseguida veremos- que la "fundación del mundo "  fue posterior a Adán, empezando con  Abel.  Y  así Dios, decidió la  salvación del hombre por  su Hijo, una vez Adán hubo pecado. Tanto una como otra interpretación son erróneas.   

Hay, por otra parte, un hecho que explican los TJ cuando se refieren a la creación del mundo que deja claro la  previsión de Dios para el castigo  del mundo. Y es el dosel  de agua que luego  constituyó -según enseñan los  TJ- la fuente del diluvio universal. 


Los TJ tienen  que explicar con mucha  claridad como sobrevivieron los  seres vivos  desde su  creación  hasta el  diluvio, si,  como enseñan, no  llovió sobre la  tierra en  todo este tiempo.   Si el hombre no  hubiese pecado, el dosel  debería seguir en su  sitio y los TJ  deberían ampliar su explicación  a la situación que  en la actualidad presentaría  la Tierra  y los  seres ¿vivos?  que sobre ella nos movemos.   ¿Para qué puso Dios -dentro de  la doctrina de los TJ-  ese dosel sobre  nuestras cabezas sino para  dejarlo caer con ocasión del Diluvio?  ¿No es eso previsión?  Escriben los TJ: "la Tierra necesita agua abundante a  fin de mantener la vida.  El hecho de que tenemos este agua en nuestro planeta Tierra -un rasgo singular  de  la  Tierra  en  el sistema  solar-  nos  muestra  la maravillosa manera  en que  el Creador,  Jehová Dios,  ha provisto para la vida  que El creó aquí".("¡Despertad! de  8.12.67, pág 21) Está claro que con el dosel de agua permanentemente entre el sol y nosotros, la vida en la tierra no hubiese sido posible ni hasta el diluvio, ni, menos, hasta nuestros tiempos.

Esta interpretación de la presciencia de Dios que los TJ nos ofrecen, es contradictoria con la que siguen en  relación a si Dios puso o no  a prueba a nuestros primeros padres.

s/TJ:

El  hombre fue  creado  para vivir  para siempre  como  hombre sobre  la tierra. Por esta  razón Jehová  creó  al primer  hombre en  perfección humana, a la imagen  de Dios y a Su semejanza, y lo  colocó en un jardín perfecto,  en un  paraíso.   Allí  la variedad  de  alimentos crecía  en perfección  para  mantener al  hombre  en  una condición  perfecta  para siempre.  Si después de una prueba el hombre demostrara ser digno de ser justificado  por Dios  y  recibir el  derecho de  vivir  en esta  tierra paradisíaca  para  siempre, al  hombre  se  le  daría el  privilegio  de extender "la mano y de hecho tomar  fruto también del árbol de la vida y comer y vivir para siempre".  Jehová no  le hizo mención de la muerte al hombre  como cosa  que le  acontecería,  excepto si  el hombre  perfecto actuara contra la soberanía de Jehová.   La prueba a que estaba sometido el hombre perfecto  requería sumisión perfecta a  la soberanía universal de  su  Creador... (Gn  3;22)  (Gn   2;15-17)  (Lc  3;38)  ("Usted puede sobrevivir al Armagedón.." pág 33)

Análisis:

En este  texto de  los TJ, está claro  que Dios  puso a  prueba a nuestros primeros padres: si salían airosos de ella, vivirían para siempre en la  tierra paradisíaca que les había  preparado, si no: morirían.  Todo  lo contrario de  lo que  dicen en el  otro texto: "teniendo el hombre la inclinación para hacer lo correcto, Dios no tenía  razón   para  examinar   el  futuro   sospechosamente  para determinar qué  haría el hombre".   ¡Vamos!, que estaba  seguro de que le responderían adecuadamente...  Si Dios es omnisciente, como reconocen  los TJ,  es, precisamente,  porque tiene  presciencia y ésta siempre está  activa... siempre lo sabe  todo... porque si no, hay cosas que no sabría y entonces dejaría de ser omnisciente...

Por  eso, los  TJ, por  su interpretación  de que  Dios se  estaba equivocando en cuanto a la  respuesta de Adán, ¡Dios equivocarse!, concluyen... "Puesto que  todas las  cosas fueron  creadas 'a  causa de  su voluntad', todas tienen  que cumplir el propósito  de Dios.  Jehová les  informó al primer hombre  y a  la primera mujer,  Adán y Eva,  el propósito  que él tenía para ellos, y los consideró  responsables de actuar en armonía con él". ("La verdad que lleva a vida eterna", pág 20)