¿QUÉ SABE DE LOS TESTIGOS DE JEHOVÁ?
Los TJ, en su revista
¡Despertad! del mes de enero de 2016, se presentan a sus lectores al empezar un
nuevo año, tal cual no son, o sea, al revés de lo que son, y lo hacen siguiendo
su método tradicional de decir siempre lo contrario de lo que te dicen que están
diciendo. Por ejemplo: su famoso libretito titulado “¿Qué enseña realmente la
Biblia?” Te dispones a leerlo y lo único que lees es una serie de exposiciones
contrarias a lo que realmente dice la Biblia. Y ya está. Así, los TJ, cumplen
con su tarea que parece ser es explicarte lo contrario de lo que realmente es.
Y con el artículo de este mes, al que hemos hecho referencia, hacen lo mismo.
Se presentan, se quieren dar a conocer, y lo hacen precisamente explicándote lo
contrario de lo que realmente son, creen y hacen, ¡Es un sistema! ¡Ellos
sabrán!
Veamos: Los TJ, en la
pág 7, hacen una exposición de ocho preguntas sobre su personalidad a las que
el lector debe responder con una crucecita para que luego compruebe, en las
páginas 8 y 9, si realmente ha acertado con la respuesta que le tienen
preparada. Y, lógicamente, siguiendo su método de la contradicción, los TJ dan
ocho respuestas que son exactamente las contrarias de las que realmente son.
Vamos a ver, una a una,
las ocho preguntas de la pág 7 y sus correspondientes respuestas de las pág 8 y
9 que analizaré, intentando ser lo más breve posible.
s/TJ:
Primera
pregunta: ¿Diría que los TJ son
cristianos?
Los
TJ contestan: “CIERTO” y entre otras
cosas añaden: ”Nos esforzamos por seguir con sumo cuidado los pasos de
Jesucristo y por vivir de acuerdo con sus enseñanzas. No obstante, hay algunas
cosas que nos distinguen de otras religiones llamadas cristianas…
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: FALSO, ¿por
qué?
Porque en (1Pe 4;15-16),
precisamente cuando el título de “cristiano” se emplea por primera vez en un
escrito cristiano, se dice que en el nombre de “cristiano” se está glorificando a Dios, no a “un dios” como los TJ tratan al Verbo o Hijo de Dios en (Jn 1;1). Y
es que los TJ siguen a un Cristo que no es el que define la Biblia; a un Cristo
en el que se reconoce a un hijo de Dios que ha sido creado, no engendrado, a
pesar de aceptar que es unigénito del Padre; a un hijo de Dios al que no se
puede ni adorar ni siquiera orar; a un hijo de Dios, en suma, del que se dice
que es “un dios”, un dios inventado al que se le atribuyen una serie de ideas
ya abandonadas por la humanidad hace muchos siglos, más de diez, e introducidas
de nuevo en ella principalmente por los TJ y algún que otro grupito. El
verdadero Cristo, el de la Biblia, es adorado y glorificado desde hace casi dos
mil años y seguido en la actualidad por más de mil quinientos millones de
cristianos en el mundo. El Cristo de los TJ es seguido solo por escasamente ocho
millones de personas, o sea, cinco por cada mil cristianos.
s/TJ:
Segunda
pregunta: ¿Diría que los TJ son
creacionistas?
Los
TJ contestan: FALSO. Aunque estamos
convencidos de que Dios creó todas las cosas, no somos defensores del creacionismo.
¿Por qué? Porque hay ideas de los creacionistas que contradicen lo que la
Biblia enseña. Por ejemplo, algunos sostienen que cada uno de los seis días
creativos duró veinticuatro horas. Pero en la Biblia, la palabra día puede
referirse a un período mucho más largo (Génesis 2:4; Salmo 90:4). Otra creencia
que defienden ciertos creacionistas es que la Tierra solo tiene unos cuantos
miles de años. Sin embargo, la Biblia declara que la Tierra y el universo ya
existían muchísimo antes de que empezaran los seis días creativos (Génesis
1:1).
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: CIERTO, ¿por
qué?
Porque los TJ acusan a
algunos creacionistas de sostener “que
cada uno de los seis días creativos duró veinticuatro horas”, y los TJ,
aceptando la ambigüedad de la palabra “día”
en la Biblia, sostienen que “cada período
o día creativo fue de siete mil años de duración” (“¿Es la Biblia realmente la Palabra de Dios?”, pág 19). Tan
insostenibles son las veinticuatro horas como los siete mil años, y de ello ya
tienen prueba ahora los TJ, cuando después de basándose en los siete mil años
de duración profetizaron el fin del mundo para 1975 y, como tantas otras veces,
no fue así…
Por otra parte, acusan
también los TJ a ciertos creacionistas de que defiendan que “la Tierra solo tiene unos cuantos miles de
años”, diciendo que el universo ya existía "muchísimo antes" de que empezaran
los seis días creativos. Si los TJ han de encontrar todas las verdades solo en
la Biblia, podemos decir que esta no especifica nada acerca del tiempo que los
TJ quieren interponer entre la creación de los cielos y la tierra y el primer
día creativo. Por lo tanto, ¿Por qué no unos miles de años y sí los años que
pueda abarcar la expresión “muchísimo antes”?
No estoy dando ninguna
razón a los creacionistas, solo intento resaltar la falta de coherencia en los
razonamientos de los TJ.
s/TJ:
Tercera
pregunta: ¿Diría que los TJ no aceptan
tratamientos médicos?
Los
TJ contestan: FALSO. Los testigos de
Jehová aceptamos atención médica y tomamos medicamentos. Es más, al igual que
Lucas —médico cristiano del primer siglo—, algunos Testigos son médicos
(Colosenses 4:14). Ahora bien, rechazamos tratamientos que violan los
principios bíblicos. Por ejemplo, como la Biblia manda abstenerse de la sangre,
no aceptamos transfusiones sanguíneas (Hechos 15:20, 28, 29). Sin embargo, sí
buscamos atención médica de calidad para nosotros y nuestras familias. Es más,
otras personas que no son Testigos se benefician de técnicas sin sangre que fueron
concebidas para nosotros. En muchos países, cualquiera puede optar por
tratamientos que no conlleven los riesgos relacionados con las transfusiones,
como las enfermedades transmitidas por la sangre, las reacciones del sistema
inmunitario y los errores humanos.
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: CIERTO, ¿por
qué?
Porque ellos mismos nos
dicen que no aceptan tratamientos que violan los principios bíblicos. Por
ejemplo, no aceptan las transfusiones sanguíneas. Es un grave error, que desgraciadamente
ha costado la vida a muchos de sus seguidores. La Biblia de ninguna manera está
en contra de las transfusiones de sangre (Véase en esta web el tema “La sangre
es principio de vida” bajo la etiqueta “Sangre”)
Por otra parte,
considerar que los métodos sustitutivos, que los hay, han ido apareciendo
gracias a la posición firme de los TJ, es otro error. La razón fundamental es
la crisis de los donantes. Pero estos métodos -según los entendidos- no son
eficaces de inmediato, sino que precisan de varios días después de su
aplicación, por lo que no son utilizables en casos de urgencia o de emergencia,
en enfermedades que presentan cuadros de anemia severa, en leucemia, en
hemorragias internas como producto de úlceras sangrantes, etc.
s/TJ:
Cuarta
pregunta: ¿Diría que los TJ creen en toda
la Biblia?
Los
TJ contestan: CIERTO. Para los testigos
de Jehová, toda la Biblia es “inspirada de Dios y provechosa” (2 Timoteo 3:16).
Eso incluye tanto el Antiguo como el Nuevo Testamento. A fin de no dar a
entender que el Antiguo Testamento es anticuado o que ya no tiene relevancia,
los testigos de Jehová preferimos llamarlo Escrituras Hebreas. Al Nuevo
Testamento lo llamamos Escrituras Griegas Cristianas.
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: FALSO, ¿por
qué?
Porque los TJ se acercan
a la Biblia con una interpretación previa y cambiante de la misma y, por lo
tanto, no creen en los pasajes de la Biblia que no se ajusten a esta
interpretación previa. Esta actitud, les lleva a caer en la tentación de acomodar
dichos pasajes a su interpretación del momento, como veremos al responder la
sexta pregunta de este cuestionario.
Por otra parte, hemos de
decir que (2Tim 3;16) solo puede referirse a la Ley y los Profetas, o sea, al
Antiguo Testamento, ya que en aquel momento todavía faltaban muchos años para
que se concretara y se aceptara el Nuevo Testamento. Y, dicho sea de paso, Antiguo no quiere decir anticuado. Parece que los TJ se
confunden, en demasiadas ocasiones, no solo en la interpretación de las frases
de la Biblia sino también en el propio entendimiento de únicamente sus
palabras.
s/TJ:
Quinta
pregunta: ¿Diría que los TJ solo usan su
Biblia?
Los
TJ contestan: FALSO. Los testigos de
Jehová hemos usado muchas traducciones para el estudio de la Biblia. Aun así,
preferimos la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras -disponible
en muchos idiomas-, pues utiliza el nombre de Dios y además es exacta y clara.
Con respecto al nombre de Dios, cierta traducción de la Biblia menciona por
nombre a 79 personas que de alguna manera contribuyeron a publicarla, pero no
incluye ni una sola vez el nombre de su Autor: Jehová. En cambio, la Traducción
del Nuevo Mundo conserva el nombre divino en los miles de lugares donde
aparecía en el texto original.
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: CIERTO, ¿por
qué?
Porque los TJ, si en sus
visitas domiciliarias se encuentran con un interlocutor que, como es
desgraciadamente en la mayoría de casos, tiene dificultades para defender su
fe, le proponen que busque en su propia Biblia el tema, porque “todas son
iguales”. Pero si se encuentran con un creyente que sabe defender su fe, y que
“maneja” bien su Biblia, entonces la Biblia que sale a la palestra por parte de
los TJ siempre es la “suya”, la del Nuevo
Mundo.
Si la Biblia del Nuevo
Mundo es “su” Biblia ¿cómo van a utilizar otra Biblia? Y si en algún caso lo
hacen es puramente anecdótico.
s/TJ:
Sexta
pregunta: ¿Diría que los TJ han cambiado
la Biblia para acomodarla a sus creencias?
Los
TJ contestan: FALSO. Cuando nos hemos
dado cuenta de que alguna de nuestras creencias no encaja con lo que enseñan
las Escrituras, hemos cambiado nuestras creencias. En 1950 comenzamos a
publicar la Traducción del Nuevo Mundo de las Santas Escrituras, pero antes de
ese año utilizábamos las traducciones bíblicas que estaban disponibles y en
ellas basábamos nuestras creencias.
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: CIERTO, ¿por
qué?
Porque si revisamos su
Biblia, ya no digo profundizamos, nos damos cuenta de inmediato que está
acomodada a su particular y previa interpretación en muchos puntos de la misma.
Ello me hace considerar que la apreciación de los TJ al describir su conducta ante
sus propias creencias y la Biblia, constituye una grave distorsión de la
verdad.
¿Es cambiar sus
creencias modificar el texto bíblico en Juan 1;1 para poder leer: “la Palabra era un dios” (en vez de “Dios”),
o más bien es acomodar el texto bíblico a una previa interpretación?
¿Es cambiar sus
creencias modificar el texto bíblico en Heb 1;6 para poder leer: “Pero cuando introduce de nuevo a su
Primogénito en la tierra habitada, dice: Y que todos los ángeles le rindan homenaje” (en vez de “le adoren”) o más bien es acomodar el
texto bíblico a una previa interpretación?
¿Es cambiar sus
creencias modificar el texto bíblico en Mt 26;26 para poder leer: “Tomen,
coman, esto significa mi cuerpo” (en vez de “esto es mi cuerpo”) o más bien es acomodar el texto bíblico a una
previa interpretación?
¿Es cambiar sus
creencias modificar el texto bíblico en Mt 16;24 para poder leer: “Si alguien
quiere venir en pos de mí, repúdiese a sí mismo y tome su madero de tormento y sígame” (en vez de “tome su cruz”) o más bien es acomodar el texto bíblico a una previa
interpretación?
¿Es cambiar sus
creencias modificar el texto bíblico en Hech 2;21 para poder leer: “Y todo el
que invoque el nombre de Jehová será
salvo” (en vez de “el nombre del Señor”)
o más bien es acomodar el texto bíblico a una previa interpretación?
Por otra parte, los propios TJ reconocen en La Atalaya, también de este mes, 2016/1, pág 5, que mentir es "decir algo falso a alguien que tiene derecho a saber la verdad. También incluye manipular o distorsionar hechos para confundir a alguien, omitir detalles clave con el fin de engañar..." Y terminan diciendo: "Así que dejen las mentiras y díganse siempre la verdad" (Ef 4;25). Pues eso...
Por otra parte, los propios TJ reconocen en La Atalaya, también de este mes, 2016/1, pág 5, que mentir es "decir algo falso a alguien que tiene derecho a saber la verdad. También incluye manipular o distorsionar hechos para confundir a alguien, omitir detalles clave con el fin de engañar..." Y terminan diciendo: "Así que dejen las mentiras y díganse siempre la verdad" (Ef 4;25). Pues eso...
s/TJ:
Séptima
pregunta: ¿Diría que los TJ no participan
en actividades de la comunidad?
Los
TJ contestan: FALSO. El mensaje bíblico que predicamos
beneficia a la comunidad. Por ejemplo, ha ayudado a muchas personas a librarse
de la adicción al alcohol y las drogas. Además, impartimos clases de alfabetización
por todo el mundo y, gracias a ello, millones han aprendido a leer y escribir.
También socorremos a las víctimas de desastres naturales y brindamos ayuda
práctica a Testigos y a otras personas. Además, les ofrecemos el consuelo y el
apoyo emocional que tanto necesitan en los momentos difíciles.
Análisis:
Yo diría que la
respuesta correcta es: CIERTO, ¿por
qué?
Porque al contrario de
lo que nos dicen los TJ, el mensaje bíblico que predican no puede beneficiar a
nadie ya que están esparciendo por el mundo -como hemos visto- una idea falsa
de Dios, de Jesucristo y de la fe en general. Por otra parte, su idea de
prójimo deja mucho que desear.
“Ciertamente -razonan los TJ en (La Atalaya de estudio de fecha 15 de noviembre de 2015, pág 21 y 22)-, usted no puede hacerse prójimo de alguien a menos que llegue a conocerlo, a menos que hable con él. Y especialmente usted se interesará en averiguar si conoce a Dios, porque si no lo conoce, entonces la acción como buen prójimo es familiarizarlo con Dios y con sus propósitos amorosos. De modo que hay necesidad de aprovecharse de toda oportunidad para compartir su fe con otros, para que ellos también reciban las bendiciones de Dios”.
“Ciertamente -razonan los TJ en (La Atalaya de estudio de fecha 15 de noviembre de 2015, pág 21 y 22)-, usted no puede hacerse prójimo de alguien a menos que llegue a conocerlo, a menos que hable con él. Y especialmente usted se interesará en averiguar si conoce a Dios, porque si no lo conoce, entonces la acción como buen prójimo es familiarizarlo con Dios y con sus propósitos amorosos. De modo que hay necesidad de aprovecharse de toda oportunidad para compartir su fe con otros, para que ellos también reciban las bendiciones de Dios”.
Vemos,
pues, que los TJ nos dicen que hemos de seleccionar las personas con las que de
alguna manera vamos a ser su prójimo. "¿De quién está usted
anuente a hacerse prójimo?", -nos dicen que hemos de
preguntarnos-, o dicho de una manera más entendedora, ¿Con quién
consiente usted a hacerse prójimo? Esto quiere decir que con algunos
mejor no ser su prójimo… Por otra parte nos enseñan: "Ciertamente
usted no puede hacerse prójimo de alguien a menos que llegue a conocerlo, a
menos que hable con él..." O sea, que si no llega a conocerlo
tampoco puede hacerse su prójimo. Y, finalmente, una vez ha decidido consentir
en ser el prójimo de alguien lo será para compartir con él sus conocimientos de
religión.
Creo,
sinceramente, que la enseñanza de los TJ con relación a este tema no tiene nada
que ver con la que Cristo nos enseñó por medio de la “parábola del buen
samaritano”. ¿Acaso el buen samaritano entró en consideraciones religiosas,
intelectuales o políticas cuando vio al "hombre" malherido
en el suelo, preguntándose si sería judío, o samaritano, o un sacerdote, o
rico, o pobre, si lo conocía o no lo conocía?; NO, sino que "viéndole,
se movió a compasión". Incluso decidió ayudarlo estando a
una cierta distancia, porque el Evangelio dice a continuación: "acercose".
¿Esperó entonces el buen samaritano a hablar con él para ver si realmente
reconocería la ayuda que se le iba a prestar o a preguntarle si creía en Jehová
o en Cristo, o alguna otra cosa por el estilo? NO. El Evangelio sigue: “le
vendó las heridas, derramando en ellas aceite y vino, le hizo montar en su
propia cabalgadura, le condujo al mesón, etc". Queda también claro que
el buen samaritano no se dedicó a hacer una exposición de sus creencias a fin
de compartirlas con el herido.
El buen
samaritano, como buen prójimo ("próximo") del "hombre"
herido, satisfizo como buenamente pudo sus necesidades más perentorias.
Seguramente si hubiese tenido sed, le hubiese dado agua, si hambre, comida, si
hubiese estado desnudo, le hubiese dado ropa... también le hubiese hablado del
Reino de Dios si este fuera el caso... Pero, ¿no nos juzgará Cristo por todo
esto, antes de concedernos la vida eterna? ¿No nos preguntará si hemos sido
buenos samaritanos a lo largo de nuestra vida? El doctor de la Ley, ¿no le
había preguntado... qué haré para alcanzar la vida eterna? Creo que
la respuesta es todo un programa para nuestra vida de cristianos: "Vete
y haz tú lo mismo"
Ahora
podemos comprender la manera que los TJ tienen de entender el Evangelio. Dicen
en ("La Atalaya" de
15.6.68, pág 363) :"¿Qué
posición tiene Vd. ante Dios ahora mismo? ¿Ha hecho usted algo que merezca su
aprobación, algo más, es decir, de lo que ha hecho la gente de las religiones
paganas? Sí, usted probablemente ha sido caritativo y ha tratado de obrar
justamente para con sus semejantes. Pero, ¿no han hecho eso mismo personas de naciones
llamadas 'paganas'?". Pero, digo yo, ¿no dice el Evangelio
todo lo contrario? (Mt 5; 43-48)
s/TJ:
Octava
pregunta: ¿Diría que los TJ menosprecian a personas de otras religiones?
Los TJ
contestan: FALSO.
Seguimos este consejo bíblico: “Respeten a todo el mundo” (1 Pedro 2:17, El
libro del Pueblo de Dios). En efecto, respetamos a todos, sin importar cuáles
sean sus creencias religiosas. Aunque en algunos países hay cientos de miles de
Testigos, no presionamos a los políticos o legisladores para que restrinjan o
proscriban a otros grupos religiosos. Tampoco hemos emprendido campañas para
que se promulguen leyes que impongan nuestros principios y valores a los demás.
Agradecemos que se nos trate con respeto y nos esforzamos por tratar al prójimo
con respeto también (Mateo 7:12).
Análisis:
Yo diría
que la respuesta correcta es: CIERTO, ¿por qué?
Porque la
práctica de los TJ con sus interlocutores es variable según sea la respuesta
que reciban a sus interpelaciones. Es realmente atenta cuando contactan con
alguna persona que no conocen e inician con ella sus primeros escarceos. Cuando
la fluidez de la conversación se atasca porque empiezan las preguntas, ya las
caras no son tan sonrientes y se tensan las facciones. Si la conversación se
prolonga incluso en nuevas entrevistas sin sacar un resultado positivo a los
intereses de los TJ, empiezan a escucharse expresiones como: “falta de
interés”, “ganas de embrollar las cosas”, “pérdida de tiempo”, y los TJ
acaban en el mejor de los casos despidiéndose o desapareciendo de la
circulación sin más. En una ocasión, hace unos años, se me ocurrió decirle a un
TJ que puesto que éramos hijos de un mismo padre, él y yo podíamos
considerarnos hermanos. Me espetó un; “¡Nosotros
no podemos ser hermanos porque no tenemos una misma fe!” Me quedé de una pieza.
Por otra
parte, cualquiera que no sea TJ debe estar dispuesto a dar razón de su fe. Pero
el TJ, no da razón de la suya y además no tiene tiempo que perder ni para
defenderla, ni para escuchar la razón del interlocutor pues su tiempo está
dedicado totalmente a conseguir nuevos adeptos ¡¡debido a la urgencia del momento!!
Sus explicaciones se deben aceptar sin rodeos porque es la verdad. Quien
no las acepta es un impío cuyo destino es la destrucción en el Armagedón.