viernes, 18 de agosto de 2017

LA BIBLIA NO ES DE PRIVADA INTERPRETACIÓN

LA BIBLIA NO ES DE PRIVADA INTERPRETACIÓN

TJ:
Los TJ, en “La Atalaya” de diciembre 2015, pág 4-6, aseguran “La Biblia es fácil de entender” (pág 4) y repiten esta aseveración en la (pág 5) “La Biblia es fácil de entender”. Pero antes de girar hacia la (pág 6) nos dicen: “Sin duda es un libro al alcance de todo el mundo. Aunque entenderlo puede ser un desafío…”  Y en la pág 6 se puede leer: “quizá su lectura le confunda”

Análisis: 
¿En qué quedamos? ¿O la Biblia es fácil de entender, o entender su texto puede ser un desafío que hasta llegue a confundirme? Ah, ¡Ya entiendo! Primero hay que hablar de la facilidad para poder entrar en relación con un posible lector o adepto a la doctrina Jehovista. Después, cuando vengan los problemas de entendimiento, que vendrán, ahí estarán los TJ como “ayuda disponible”. ¡No pasa nada! Cerca de ti están los interpretes infalibles de la Palabra divina dispuesto a darte todas las explicaciones que necesites.

En la Biblia leemos que una vez, un funcionario etíope -un funcionario, ¡ojo!, pues de tonto no tendría un pelo- estaba leyendo un pasaje de las Escrituras. El discípulo Felipe se le acercó y le preguntó: “¿Verdaderamente sabes lo que estás leyendo?”  Si tan fácil es entender la Biblia, la pregunta, digo yo, debería haber sonado a impertinencia por parte de Felipe, pero no. El etíope le contestó: “¿Cómo podría hacerlo, a menos que alguien me guiara?”: Entonces Felipe le explicó el pasaje (Hech 8;27-35). ¡Vaya, pues no sería tan fácil de entender si a todo un funcionario se le tuvo que explicar el pasaje!

Y es que los TJ son maestros de la confusión. Dicen que la Biblia es fácil de entender, pero se empeñan en complicarla. Veamos: 

Que en la Biblia leemos: “Esto es mi cuerpo”, pues los TJ se escandalizan y nos dicen que, aunque dijo esto no quería decir lo que se desprende llanamente de estas palabras, sino que quería decir: “esto significa mi cuerpo”. Modifican el texto sagrado ¡y se quedan tan tranquilos!

Que Juan nos dice que el verbo era Dios. Pues no, no puede ser que tengamos que aceptarlo así, de sopetón. Y en vez de profundizar en lo que Juan nos está diciendo, prefieren cortar por el camino fácil: Seguro que Juan quiso decir que el Verbo era un dios, no Dios. Pero si no hay problemas, ¡la Biblia es fácil!

Que en la Biblia se dice que el Hijo es “el unigénito del Padre”, indicándonos claramente el tipo de relación entre uno y otro. Pues ahí está el Comité de Traducción de la Biblia del Nuevo Mundo indicándonos que unigénito, aplicado al hijo, se tiene que interpretar como creado directamente por el Padre. Y ya está, ni diccionarios, ni enciclopedias, ni definiciones, y el que no lo acepte es un impío de armas tomar merecedor de la destrucción en el Gehenna.

Que Jesucristo nos dice que está llegando el momento de la resurrección para su juicio de “justos e injustos”, o sea, de buenos y malos, cojas el texto bíblico por donde lo cojas. Pues los TJ, no aceptan esta facilidad de entendimiento y nos enseñan que los injustos no son los malos, sino una clase intermedia, los que hacen cosas malas sin saber que lo son… porque los malos no resucitarán, habrán sido destruidos…

La Biblia es un libro de ninguna manera fácil, más bien difícil, aunque no demasiado si hay buena voluntad. Pero los TJ lo han envenenado con sus falsas interpretaciones. Realmente, la doctrina de los TJ está fundamentada en la Biblia, pero no en cualquier Biblia de las miles de traducciones que circulan por el mundo, sino, concreta y exclusivamente, en la denominada Traducción del Nuevo Mundo que con toda razón se la consideran suya y que seguramente debe hacer buenas las palabras de su fundador Russell: “Quien se dirige a la Biblia, solamente, en dos años vuelve a las tinieblas” (La Atalaya de 15.9.1910). Seguro que Russell ya debería tener en mente en aquellos años el contenido de la Biblia que los TJ hicieron realidad unos años después.

Los TJ, nos dicen: “Hay algunos pasajes de la Biblia que los seres humanos solo entienden cuando llega el momento adecuado… en el período de la historia que Dios escoja… en el momento justo…” (La Atalaya, 2017, número 1, pág 15). Si los TJ realmente creen en esta proposición, deberían dejar a las personas que libremente lean la Biblia y esperar a que sea Dios quien “en el momento adecuado…”, “en el período que escoja…”, “en el momento justo”, les haga entender correctamente lo que están leyendo… Pero no, los TJ quieren que la gente crea la doctrina que ellos han urdido, y sin entretenerse porque el tiempo -según ellos- se acaba.


Por otra parte, a pesar de que los TJ reconocen en (La Atalaya, 2017, número 1, pág 15), que el Padre enviará su espíritu santo para ayudar a quienes leyendo la Biblia intenten entender sus enseñanzas, los TJ dudan de su eficacia y dicen textualmente: “Ya que lo que enseña la Biblia es trascendental para cada uno de nosotros, su mensaje es demasiado importante como para intentar entenderlo leyéndola por nuestra cuenta. Así que lo animamos a que busque ayuda para entender lo que lee”. Busque… a los Testigos de Jehová.
s/TJ:

Es posible que después de leer un texto de la Biblia nos preguntemos: ¿Qué significa esto?  Individualmente se pueden entender las palabras, pero el significado quizá no ("La Atalaya" de 1.9.68, pág 530).


Es fácil entender la Biblia desde el punto de vista de las palabras y frases que utiliza... si las personas que tienen educación limitada se esfuerzan, pronto pueden conseguir conocimiento de la Biblia y una vez que hayan adquirido fe hasta cierto grado, pueden mantenerla viva y hacer que crezca poco a poco mientras mejoran su capacidad de estudio. Es verdad que hay algunas palabras o expresiones arcaicas en las traducciones más antiguas, pero uno puede obtener entendimiento examinando traducciones modernas (La Atalaya 1.9.68, pág 529).

Análisis:

Aunque los TJ aseguran que sólo la Biblia es Palabra de Dios, uno de sus medios de ingresos más notable es el que origina la venta de sus múltiples explicaciones de los pasajes de la Biblia, en forma de libros y revistas que inundan el mundo entero. Y es que los TJ se contradicen cuando critican a la Iglesia que ciertas verdades las explique a la luz del contenido de los Libros Sagrados y del contenido de la tradición que nos ha llegado a través de los siglos y en cambio ellos mismos se están creando su propia tradición a base de los estudios que paralelamente a la Biblia realizan para poderla explicar correctamente. 

Más arriba digo "explicar" que no "interpretar", porque los TJ consideran que la Biblia es tan fácil que "se interpreta sola" (carta de un Testigo de Jehová que se menciona más abajo) Pero esta diferenciación entre "explicar " e "interpretar" no tiene sentido. Si los TJ dicen que la Biblia se interpreta sola ¿por qué reconocen la necesidad de que alguien nos la explique? (La Atalaya 15 de noviembre de 1963, pág 691) o es que no han leído en (2Pe 3;15-17) "Las Escrituras contienen algunas cosas difíciles de entender las cuales los indoctos, las tuercen, lo mismo que las demás Escrituras, para su propia perdición", o bien: "Las profecías -y podríamos decir la Biblia-  no es de privada interpretación".  (2Pe 1;16-20), y también: "Llegado el séptimo mes, los hijos de Israel estaban ya en sus ciudades; y entonces el pueblo, como un solo hombre, se reunió en la plaza que hay delante de la puerta de las Aguas y dijeron a Esdrás que llevase el libro de la Ley de Moisés, dado por Yavé. Llevolo Esdrás ante la asamblea, compuesta de hombres y mujeres, de cuantos eran capaces de entenderla." (Neh 8;1-2), etc.

Veamos unos párrafos entresacados de una carta de un Testigo de Jehová -superintendente para más detalle- escrita en 8 de agosto de 1964: "La sociedad (se refiere a la Watch Tower que es la que organiza a los TJ) se limita a explicar la Biblia, no a interpretarla... porque la Biblia se debe entender no interpretar, cambia mucho el significado de la palabra... si para algunos es difícil de entenderla para nosotros no... "  Y debe ser verdad si se tiene en cuenta las palabras de este superintendente en  otros pasajes de la carta mencionada: "Tenemos  mucha base para asegurar que somos los únicos que practicamos la verdadera religión correcta... tenemos un conocimiento tan amplio de la Palabra de Dios que realmente nunca terminaríamos de hablar... " Y en otra carta anterior del 3 de julio de 1964:  "Tenga en cuenta que la sociedad Watch Tower antes de publicar nada, tiene mucho cuidado en lo que escribe y dice en sus publicaciones, pues son millones de personas las que leen estas revistas. No pueden hacer errores ni inexactitudes en sus temas, son muchísimas personas que hacen este trabajo, pues antes no va el material a la prensa de imprimir, ha tenido que ser revisado y estudiado cuidadosamente y la base de todo, es la Sagrada Biblia. No hay errores, créalo."   Y todavía en otra carta del 19 de agosto de 1964: "Nosotros -los TJ- entendemos los párrafos de la Biblia tal como son; ni más ni menos, no les damos el sentido que no tiene, porque por sí solo se interpretan..." Y, finalmente, en otra carta del 26 de agosto de 1964: "Los TJ es la organización visible de Dios aquí en la tierra..."  

El fundador de los TJ, Russell, nos dice: "Quien se dirige a la Biblia, solamente, en dos años vuelve a las tinieblas. Al contrario, si lee los "Estudios de las Escrituras" (Resultados de los estudios de las Escrituras efectuados en 1872 por Russell y unos cuantos discípulos y que reunieron en siete tomos) con sus citas, aunque no haya leído una sola página de la Biblia, al final de dos años estará en la luz" (La Atalaya de 15.9.1910). Ante estas palabras de Russell ¿cómo debemos entender las leídas más arriba cuando nos dicen que "la Biblia se interpreta sola"?    
Al fin y al cabo, los TJ hacen lo mismo que critican a los católicos en cuanto al hecho de aconsejar que no se lea la Biblia sin tener en cuenta las correspondientes explicaciones y comentarios que, al respecto, ofrecen las distintas iglesias y que, de alguna manera, resumen los estudios realizados a lo largo del tiempo. Precisamente para salvaguardar la veracidad de estas explicaciones, unos y otros tienen que procurar que no se tergiversen pasándolas celosamente de generación en generación... y esto es lo que, en parte, constituye la Tradición.  Claro que, los TJ, no quieren ni oír hablar de la Tradición, pero por otro lado no cesan de publicar, desde su origen hace ya más de 125 años, revistas y libros que contienen sus comentarios e interpretaciones de la Biblia y que, como hemos visto anteriormente, han considerado en multitud de ocasiones, incluso superiores a la propia Biblia a la que han tratado de apartar.

s/TJ:

Así como lo había hecho durante su vida humana, de igual modo después de su resurrección de entre los muertos, Jesús grabó en la mente de sus seguidores   la importancia y confiabilidad   de las   Escrituras. "Comenzando desde Moisés y todos los Profetas él les interpretaba cosas tocantes a él mismo en todas las Escrituras".   Él sabía que la única manera en que ellos podían tener una fe firme era mediante el tener un conocimiento “acertado” de la Palabra de Dios.  (La Atalaya" de 1.12.59, pág 709) 

Análisis:

Ya hemos visto que La Biblia no se interpreta sola. El propio Jesucristo -como reconocen los TJ-  la interpretaba a sus seguidores, ya que el conocimiento que debían tener de la Biblia debía ser "acertado".

Pero los TJ, a lo largo de su relativamente corta historia, se han equivocado en infinidad de veces no sólo en cuestiones proféticas -muy dados a ellas-  sino también en las exposiciones doctrinales de sus temas que han cambiado de continuo. 

La Sociedad Watch Tower dice, que ellos reciben el entendimiento bíblico de manera progresiva y claro, entonces puede caber algún fallo, ya que son humanos: "En la mayoría de las cosas los Testigos de Jehová son como toda otra persona... a veces cometen errores, pues no son perfectos, ni inspirados ni infalibles".  ("Los Testigos de Jehová en el siglo XX", en el párrafo tercero de la página 3) Pero desde su principio a finales del siglo diecinueve hasta hoy, todos los representantes y guías de esta religión han afirmado de manera dogmática que todo cuanto escriben en sus libros y revistas es revelado.  Se pueden aducir infinidad de párrafos de sus libros y revistas, por ejemplo: "Los TJ... consideran de importancia vital que sus creencias estén basadas en la Biblia y no en simples especulaciones humanas ni credos religiosos" "Los Testigos de Jehová en el siglo XX", en el párrafo cuarto de la página 3).  Las contradicciones de los TJ en el tema de la interpretación y de la revelación son continuos.

La Atalaya disculpa a Russell de sus errores sobre el Armagedón y el inicio del Reino de Jesucristo diciendo: "Es cierto que los estudiantes de la Biblia que escribieron aquellos artículos no tenían entonces el entendimiento bíblico e histórico exacto de lo que en realidad significaría el fin de estos tiempos señalados de las naciones como entendemos estos asuntos hoy en día.   ¿Pero quién puede culparlos por ello...?   ("La Atalaya" de 1.12.84) Los TJ suelen presentar en defensa de sus continuos errores a través de los años, el versículo: “Pero la senda de los justos es como la luz brillante que va haciéndose más y más clara hasta que el día queda firmemente establecido" (Prov.  4;18): “Así la Sociedad, dicen, va recibiendo el entendimiento bíblico de forma progresiva según la necesitan los individuos afectados” ("La Atalaya" de 1.11.64, pág 648).  
Pero si razonamos, comprenderemos que una cosa es revelación progresiva y otra muy distinta es revelación contradictoria.  Una cosa es aumento de luz, y otra que nos cambien el foco. El conocimiento progresivo, que claramente es el que nos va dando la propia Biblia a medida que vamos avanzando a través de sus páginas, no tiene nada que ver con el conocimiento contradictorio continuo que presenta el desarrollo de la doctrina de los TJ a través de sus escritos. Además, ningún profeta por los que Dios habló tuvo que rectificar por haberse equivocado, ni recibió la "luz" a plazos...  

Y si leemos todo el pasaje de Proverbios, desde le v14 al v19 inclusive, veremos que allí no se dice nada de revelaciones ni de conocimiento intelectual, sino del proceder del justo y del inicuo.  Además, el conocimiento progresivo, que claramente es el que nos va dando la propia Biblia a medida que vamos avanzando a través de sus páginas, no tiene nada que ver con el conocimiento contradictorio continuo que presenta el desarrollo de la doctrina de los TJ a través de sus escritos. 

s/TJ:

Jehová... reconoce la capacidad y limitación del hombre para absorber cosas nuevas... debido a tales limitaciones, incluyendo la carga añadida de la imperfección humana por la rebelión que ocurrió en el jardín de Edén, Jehová provee verdades espirituales a medida que el hombre puede absorberlas.  ("La Atalaya" de 1.11.64, pág 648)  

Análisis:

Fijémonos que los TJ dicen que "Jehová provee verdades espirituales a medida que el hombre puede absorberlas". Y es verdad. Por lo tanto, cada cosa nueva que Jehová provee ha de ser una "verdad". Cuando los TJ enseñaban con la "evidencia" de sus palabras y razonamientos que Jesús murió en una cruz, lo estarían enseñando así porque así Jehová se lo habría revelado ya que el hombre estaría en disposición de absorber esta verdad. No puede ser de otra manera según hemos leído. Cuando más tarde los TJ empezaron a enseñar que Jesús no murió en una cruz, ya que esto es una enseñanza que proviene del Diablo, sino que murió en un simple madero, ha de entenderse que Jehová dijo algo así a los dirigentes de los TJ: "Yo hace años os revelé que Jesús murió en una cruz como una verdad evidente y exacta porque el hombre entonces sólo estaba preparado para absorber esta verdad, de otra manera no lo hubiese entendido. Pero ahora, el hombre ha progresado en su entendimiento de mi Palabra y ya puede conocer otra verdad evidente y exacta que demuestra que la anterior lejos de ser una verdad evidente es una enseñanza que el Diablo ha metido desde hace muchos años en la cabeza a los miembros de la cristiandad. La verdad evidente y exacta que ahora yo os revelo… hasta la próxima, es de que Jesús no murió en una cruz sino en un madero..."  

Realmente esto no es serio. Si los TJ quieren hacernos creer que Jehová les revela la verdad, esta verdad para que realmente sea tal ha de ser inmutable. Jehová no puede revelar hoy una cosa como verdad y mañana decir que esa verdad era una mentira y que ahora la verdad es otra cosa totalmente distinta y aun contradictoria. Aquí no hay progresión. ¿Cuál será la nueva verdad? De hecho, los TJ han enseñado cosas que han cambiado no una sino hasta más veces. ¿Cómo puede exigirnos Dios que estemos dispuestos a dar nuestra vida por unas "verdades" que nos ha revelado si luego, él mismo, nos cambia estas verdades? ¿No parece esto un juego?  
Yo creo que este tema debe plantearse a la inversa, o sea, que el hombre va en busca de Dios y en este caminar va profundizando en sus pensamientos, lee la Biblia, mira el universo, investiga a sus semejantes... hasta que, llegado a un cierto punto, Dios le revela por medio de sus profetas, de Jesús, de su Iglesia, la verdad definitiva de un tema -he dicho definitiva- o de alguna manera le dirige hacia la verdad como resituándolo en el camino apropiado para llegar a ella. Pero los TJ no lo entienden así. Los TJ se dirigen a la Biblia y tratan de entenderla porque la Biblia es la Palabra de Dios. Y cuando de un determinado tema su clase dirigente llega a una conclusión, para ellos aquello se convierte en una verdad revelada por Dios y la enseñan por todo el mundo. Y la organización exige que sus adeptos sean capaces de dar la vida por ella. Si luego, por algún otro razonamiento, o descubrimiento, o simplemente porque creen que estaban equivocados, la clase dirigente cambia la primera verdad, de nuevo es Dios quien les ha revelado la nueva verdad y a partir de entonces exigen a sus adeptos que se olviden de la primera verdad y enseñen la segunda con la misma disposición de ánimo.  

Los  propios Testigos  de Jehová, en la  pág 4  del artículo  más arriba mencionado,  reconocen que es "lamentable"  la avalancha de falsas alarmas que se están dando  en relación al fin del mundo, y aun reconociendo, por otra parte,  que ellos también han propuesto fechas que han resultado erróneas, parece ser que no quieren ser acusados de colaborar activamente en esta avalancha, insinuando que sus predicciones han de considerarse "verdaderas advertencias" -aunque erróneas, digo yo- frente a las de los demás que sí son "falsas alarmas"  

Decididamente, los Testigos de Jehová ya no saben que inventarse para no reconocer que sus continuas predicciones erróneas y sus constantes cambios doctrinales les hacen caer de pleno entre los que Jesucristo llama "falsos profetas" (Mt 24;24). Los Testigos de Jehová, citan, en la pág 4 de su artículo, este mismo versículo de Mateo pero aplicado, claro está, solamente a los demás que han hecho predicciones erróneas, a ellos NO, porque, ¿cómo podrían haber sido tildados de "falsos profetas" aquellos cuyo mensaje "no es de un hombre, sino de Jehová Dios el Altísimo", y que los publican a través de la propia revista -"La Atalaya"- que Jehová "ha escogido para dar a conocer al mundo de la humanidad la revelación de su voluntad"?   

s/TJ:
“Puesto que las verdades de Jehová se revelan progresivamente, tenemos que ser progresivos al adquirirlas. El atrasarse por desatender el conocimiento que Jehová provee para estar al día, o el adelantarse con especulaciones y filosofías más allá de lo que Jehová ha provisto pone en peligro nuestra vida”.  ("La Atalaya" de 1.11.64, pág 655)  

“¿Hemos malinterpretado la Biblia alguna vez los TJ porque no era el momento adecuado? Sí. Pero al llegar el tiempo de Dios para aclarar ciertos temas, ajustamos nuestro entendimiento de inmediato. Creemos que así imitamos a los apóstoles de Jesús, que fueron humildes y modificaron su manera de pensar cuando él les hizo ver que estaban equivocados” (La Atalaya 2017, núm 1, pág 15)

Análisis:

O sea, los TJ deciden que están en sintonía con la revelación de Dios, cuando defienden una doctrina que les es de su interés, y entonces llenan las páginas de sus revistas de expresiones tales como: conocimiento exacto, todo es revelado, en los escritos de los TJ no hay errores ni exactitudes, las opiniones contrarias proceden del demonio, la Biblia se interpreta sola, etc. etc.  Cuando por cualquier razón deciden cambiar la doctrina que hasta entonces habían considerado verdadera, por otra totalmente diferente o incluso contraria, entonces nos hablan de progreso en la revelación Divina y por lo tanto toca modificar la anterior interpretación. Con relación a este cambio, entonces se habla en sus revistas -si se habla de ello- con expresiones tales como: entendimiento progresivo, los TJ son humanos y pueden cometer algún fallo, no son perfectos, ni inspirados, ni infalibles, etc, etc. Y la organización de los TJ queda a salvo porque su actuación resulta siempre -hagan lo que hagan- ser la correcta, tanto cuando se consideran infalibles, como cuando se consideran humanos sometidos a cualquier fallo; tanto cuando consideran que la Biblia se interpreta sola, como cuando consideran que debe estudiarse la Biblia a fondo para conseguir un conocimiento “acertado” de su contenido, etc, etc.

Veamos lo que escribe el propio Russell en ("El plan divino de las edades", pág 10): "Aun cuando en esta obra procuraremos y esperamos con éxito presentar a los lectores interesados e imparciales el Plan de Dios... negamos terminantemente que esto sea el resultado de una sabiduría o capacidad extraordinaria de parte del autor. La luz del Sol de Justicia (Cristo) en esta 'aurora del milenio' es la que revela como verdad presente las cosas que aquí se tratan." 

Y así en tantos y tantos libros y revistas. Otro ejemplo lo tenemos en el libro ("Vindicación" de Rutherford, en el tomo I, pág 20,41,197,251,312 y 314) en todas estas páginas se menciona la palabra 'revelación' de Dios a ellos, pero como muestra podemos leer un párrafo de la pág 197. Dice así: "Ahora Dios revela a su pueblo el significado de las profecías escritas hace mucho tiempo, para que puedan recibir ánimo y conocer que se encuentran en lo correcto"   Así repiten: "La Atalaya es una revista basada en la Biblia... no es sectaria; se apoya enteramente en la Biblia" (Folleto: "Vida en el nuevo orden de Dios", pág 6) ¡En su particular Biblia, claro!

s/TJ:
¿No pertenecen a Dios las interpretaciones? (Gn 40;8) ¡Qué palabras tan sabias! Todo estudiante de la Biblia del día moderno debe actuar con esa misma humildad. Debemos hacer a un lado el orgullo y solicitar ayuda a Dios para descubrir la interpretación correcta de su Palabra (1Tes 2;13) (Sant 4;6) ("La Atalaya" 1/2/2015, pág 12-15)

Jesucristo fue el primero que dejó que las Escrituras se interpretaran a sí mismas… Los discípulos de Jesús siguieron ese modelo de usar unos textos bíblicos para comprender el significado de otros versículos…

Cuando leemos la Biblia, ¿cómo podemos imitar el ejemplo de Jesús y sus fieles discípulos?... En primer lugar, examinemos el contexto inmediato del pasaje en cuestión. Si le cuesta entender algún versículo aún después de haber examinado su contexto, quizá le resulte útil compararlo con otros textos, siempre teniendo en cuenta el sentido general de la Biblia…

En resumen, cuando leemos las Escrituras, debemos tener en cuenta el contexto y el sentido general de la Biblia. Así, pues, imploremos la ayuda de Jehová para entender su Palabra… Esforcémonos, pues, por examinar el contexto y consultar otros versículos relacionados... (Resumen de la doctrina de los TJ sobre el proceso a seguir en la interpretación de la Biblia: La Atalaya del 15/8/2006 (Ed estudio), pág 12-15).

Análisis:

En infinidad de lugares, de una y otra manera, los TJ repiten esta doctrina sobre la interpretación de la Biblia. Aportan algunos pasajes bíblicos para reforzarla. Por ejemplo: “No te apoyes en tu propio entendimiento” (Prov 3;5). "¿No es de Dios la interpretación de los sueños?" (Gn 40;8).  Es vital que uno siga pidiéndole a Dios la sabiduría necesaria para comprender las escrituras (Sant 1;5). 

A pesar de esta doctrina tan clara de los propios TJ sobre cómo debemos interpretar las escrituras, o sea: contexto inmediato del pasaje en cuestión, comparación con otros textos relacionados siempre teniendo en cuenta el sentido general de la Biblia intentando no apoyarnos en nuestro propio entendimiento, pedir a Dios la sabiduría necesaria para comprender, etc…  los TJ llevan a cabo en su literatura y en su Traducción del Nuevo Mundo de las Sagradas Escrituras, un sistema “sui géneris” que pasan de todas esta doctrina e interpretan la Biblia como mejor les interesa.

Veamos un célebre versículo:

Los TJ, escriben: "Y mientras ellos comían, Jesús tomó un pan, y  lo bendijo, y lo partió, y dándolo a los discípulos,  dijo: Tomad, comed;  esto es  mi cuerpo.  Y  tomando la copa, dio  gracias, y se la  dio, diciendo: Bebed de  ella todos; porque esto es mi sangre,  la sangre del Nuevo Pacto, la  cual es derramada por muchos, para remisión de pecados" (Mt 26;26-28) (1Cor 11;23-26). Al instituir  el Memorial de  su muerte,  ¿qué quiso decir  Jesús cuando dijo: "Esto es mi cuerpo", y, "Esto es mi sangre"? No habiendo ninguna declaración en  las  Escrituras  que diga lo  contrario,  tenemos que concluir que Jesús  simplemente quiso decir la cosa más  obvia, a saber, que el pan  y el vino representaban o significaban  su cuerpo, su propio cuerpo de carne y sangre; no que éstos habían llegado a ser realmente su carne y  sangre. ("La Atalaya" de 1.3.65, pág 154) ("Vida eterna en libertad de los hijos de Dios", pág 129) 

"No habiendo ninguna declaración en las Escrituras que diga lo contrario, -dicen los TJ en los textos referenciados-  tenemos que concluir...", y en este punto parece que tendrían que seguir diciendo lo que sí realmente es obvio, "… en forzosamente aceptar que las palabras de Jesús hemos de entenderlas tal cual las dijo".  Pues no, los TJ siguen diciendo que Jesús simplemente quiso decir todo lo contrario de lo que dijo y así traducen en la Biblia del Nuevo Mundo: “esto significa mi cuerpo” en vez de “esto es mi cuerpo” y “esto significa mi sangre” en vez de “esto es mi sangre” … Y así, también aparece, sin ninguna explicación al respecto, en “¿Qué enseña realmente la Biblia?”, pág 206-207)


Aunque la interpretación fuera obvia -que no lo es, ni mucho menos- ello no autorizaría a los TJ a añadir en su traducción del "Nuevo Mundo" palabras o expresiones que hagan decir a Jesucristo lo que ellos quieren que diga y no lo que, sencillamente, Él dijo.   Y todo ello, por: 

Primero: porque el original no lo dice y los TJ así lo reconocen en el comentario de ("La Atalaya" de 1.3.65, pág 154), cuando escriben: "Al instituir el memorial de su muerte, ¿qué quiso decir Jesús cuando dijo: “Esto es mi cuerpo",  "esto es mi sangre?"

Segundo: porque su interpretación no se basa en la Biblia, que está clarísima, sino en su personal interpretación, tal como los TJ explican en su escrito y que al quererla plasmar en el texto sagrado fuerzan un cambio en las palabras de Jesús.

Tercero: porque si los TJ examinan otros textos de la Biblia relacionados con (Mt 26;26-28) que estamos interpretando, por ejemplo (Jn 6;48-58) verán que dice que para tener vida eterna  se tiene que comer su carne (no lo que significa su carne) y beber su sangre (no lo que significa su sangre). Por eso se pusieron a contender los judíos unos  con otros diciendo: "Como puede este hombre darnos su carne a comer?” (Jn 6;52), exactamente lo mismo que dicen hoy en día los TJ. Entonces, Jesús  les dijo: "Muy verdaderamente les digo: A menos que coman la carne del Hijo del hombre y beban su sangre no tienen vida en ustedes.  El que se alimenta  de mi carne y beba mi sangre tiene vida eterna...  Porque mi  carne es verdadero alimento, y mi sangre es verdadera bebida.  El que se alimenta de mi carne y bebe mi sangre  permanece en unión conmigo,  y yo en unión  con él...El que se alimenta de este pan vivirá para siempre." Las palabras de Jesucristo son rotundas. No admiten ni simbolismos ni figuraciones. ¿No será que los TJ se olvidan de practicar lo que ellos mismos aconsejan en estos casos: pedir a Dios la sabiduría necesaria para comprender?

Y si examinan (1Cor 11;23-29) leerán que  S. Pablo relata la cena del Señor y trata  de corregir  a los  corintios  su mala  actuación. Era  una ocasión  de oro  para clarificar  las palabras  de Jesús.   Y así, cuando les  cuenta que "Jesús  en la noche en que  fue entregado, tomo el  pan..." al relatar  las palabras que a  continuación dijo Jesús, podría haber dicho: "Esto significa mi cuerpo...esto significa mi carne" y los corintios hubiesen agradecido la interpretación. Pero no. ¿O es que los TJ tienen más autoridad que el propio S. Pablo para interpretar las palabras que dijo Jesús y por esto las modifican tranquilamente? 

Cuarto: porque  en el prólogo  de la traducción del  Nuevo Mundo, los Testigos de Jehová, dicen textualmente:  "...se  hace  el esfuerzo de traducir el texto griego del modo  más  literal posible.. Por eso,  cuando se introducen palabras  consistentes con el  contexto para  hacer la traducción clara  y comprensible,  se encierran  las palabras insertadas entre corchetes..."

En  este caso, la traducción literal “esto es mi cuerpo” “esto es mi sangre” está clarísima –como los mismos TJ han empezado aceptando- por lo tanto no es necesario añadir palabra consistente alguna y si tienen la tentación de hacerlo como de hecho lo hacen, una mínima coherencia exige poner palabras entre corchetes, que no hacen.

y Quinto: porque son los TJ los que acusan a quienes no aceptan sus doctrinas de que leen en los versículos de la Biblia más de lo que estos realmente dicen. ("La  Atalaya" de 15.1.92, pág 21)  ¿Y no es este sistema de  añadir palabras al texto del  original, cuando no son necesarias, hacerle decir más de lo que realmente dicen?

Hemos visto como los TJ no respetan su propia doctrina sobre la interpretación de la Biblia en un texto fundamental de las Sagradas Escrituras. Si revisáis el tema “Errores y diferencias en la Traducción del Nuevo Mundo de  los TJ” bajo la etiqueta “Traducción del Nuevo Mundo”, encontraréis muchos textos que han sido traducidos e interpretados como les ha convenido a los TJ a fin de poder apoyar de la mejor manera su particular visión de la Biblia y del Cosmos en general.