¿QUIÉN ES JESUS SEGÚN LA BIBLIA?
Según los testigos de Jehová, en el mundo hay muchas personas famosas. Algunas son muy conocidas en su propia comunidad, ciudad o nación, y otras en el mundo entero. Pero el hecho de que usted sepa el nombre de alguien famoso no significa que conozca a esa persona, es decir, que esté enterado de los detalles de su pasado o de cómo es en realidad.
Aunque ya han pasado unos dos mil años desde que Jesús vivió en la Tierra, en todo el mundo se habla de él. Sin embargo, existe mucha confusión sobre quién fue en realidad. Algunos dicen que fue tan solo un hombre bueno. Otros piensan que no fue más que un profeta. Y hay quienes creen que Jesús es Dios y debemos adorarlo. ¿Será esto cierto?
Es importante que usted sepa la verdad sobre Jesús. ¿Por qué? Porque la Biblia dice: “Esto significa vida eterna, el que estén adquiriendo conocimiento de ti, el único Dios verdadero, y de aquel a quien tú enviaste, Jesucristo (Jesús)” (Jn 17;3). En efecto, conocer la verdad sobre Jehová Dios y sobre Jesucristo puede llevarle a vivir para siempre en un paraíso terrestre (Jn 14;6). (Testigos de Jehová en “¿Qué enseña realmente la Biblia?” Cap. 4 (pág. 37 – 46)
Análisis:
Para empezar, podemos decir que no hay ningún
versículo en la Biblia que apoye directamente lo que los TJ aseguran con sus
palabras, o sea, que “conocer la verdad sobre Dios y sobre Jesucristo nos
puede llevar a vivir para siempre en un paraíso terrestre”. De una manera
indirecta y errando en las interpretaciones podemos llegar a esta o a la
interpretación que se quiera. El propio versículo que presentan los TJ para
apoyar esta doctrina -(Jn 14;6)- no tiene ni siquiera nada que ver con la
misma, ni directa ni indirectamente.
Mucho antes de que Jesús naciera, la Biblia predijo la llegada del enviado
de Dios, el llamado Mesías o Cristo. Los títulos Mesías (derivado de una palabra hebrea) y Cristo (derivado de una palabra griega) significan
“Ungido”. De modo que el enviado prometido sería ungido, es decir,
nombrado por Dios para ocupar una posición especial... Seguramente, ya antes de
que Jesús naciera, muchas personas se preguntaban: “¿Quién será el Mesías?”.
En el siglo primero de nuestra era, los discípulos de Jesús de Nazaret estaban totalmente convencidos de que él era el Mesías predicho (Jn 1;41). Uno de ellos, Simón Pedro, le dijo sin rodeos: “Tú eres el Cristo” (Mt 16;16). Ahora bien, ¿por qué estaban tan seguros aquellos discípulos de que Jesús era en verdad el Mesías prometido? ¿Y por qué podemos estar seguros nosotros?
Los profetas de Dios que vivieron
antes que Jesús predijeron muchos detalles que ayudarían a identificar al
Mesías. Por poner una comparación: suponga que usted tuviera que ir a buscar a
un desconocido a una concurrida estación de autobuses o de trenes, o a un
aeropuerto. ¿Verdad que le vendría bien conocer algunas características de la
persona? Pues bien, mediante los profetas bíblicos, Jehová dio una descripción
bastante detallada de lo que haría el Mesías y de las cosas que le sucederían.
De este modo, las personas fieles podrían reconocerlo sin ninguna duda
cuando vieran cumplirse todas esas profecías.
La profecía de (Dan 9;25) está mal calculada por los
TJ porque para fijar el año “exacto” en que se presentaría el Mesías, parten de
una fecha que no coincide con la más generalizada para el primer año de
Artajerjes. Los TJ tradicionalmente parten del año 474 aC para efectuar sus cálculos,
pero los libros de historia de ahora y de hace más de un siglo, como “Lecciones
elementales de Historia Universal” editado en 1877, fijan el año 465 aC para el
primer año de Artajerjes.
La Biblia enseña que Jesús vivió en el cielo antes de venir a la Tierra.
Por ejemplo, además de predecir que el Mesías nacería en Belén, el profeta
Miqueas indicó que su origen tuvo lugar en “tiempos tempranos” (Miq 5;2).
De hecho, el propio Jesús dijo en muchas ocasiones que antes de nacer como
hombre había vivido en el cielo (Jn 3;13, 6;38, 62, 17;4, 5).
Allí era una criatura espiritual que disfrutaba de una relación especial con
Jehová. (¿Qué enseña realmente la
Biblia? Cap. 4 (pág. 37 – 46)
Los TJ dan por sentado que Miguel, es la primera cosa
que Dios creó, aunque no aportan ningún apoyo bíblico. Por eso, porque lo dan
por sentado, entienden que la Biblia en (Col 1;15) diga que es el “primogénito”
de toda la creación con la interpretación de que es la primera cosa creada. Sin
embargo, en ninguna parte de la Biblia, repito, se dice textualmente, o de
manera clara, que el Padre creó al Hijo, por lo que “primogénito” puede tener
–como de hecho tiene- otra interpretación que sea compatible con otros aspectos
del propio Hijo de Dios.
Otra cosa que lo hace especial es el hecho de ser el
“Hijo unigénito” (Jn 3;16). Esto significa que es el único a quien Dios creó
directamente (¿Qué enseña realmente la Biblia? Cap. 4 (pág. 37 – 46).
No se sabe en
qué se basan, pero los TJ han llegado a la conclusión de que ser hijo
unigénito quiere decir ser creado directamente por Dios. Es una definición que
no encontrarán Vds. en ninguna parte, pero los TJ la aplican al Hijo y la
difunden a todo el mundo. Así, pues, a la errónea interpretación de la palabra
“primogénito” que hemos visto en el punto anterior, le suman ahora la de
“unigénito” convirtiendo al Hijo en un ser creado directamente por Dios, o sea,
sin la ayuda de nadie. Es una definición totalmente errónea que no tiene el
mínimo apoyo bíblico.
También es el único que colaboró con Jehová en la
creación de todas las demás cosas (Col 1;16). (¿Qué enseña realmente la Biblia?
Cap. 4 (pág. 37 – 46)
Este punto de
la Biblia, (Col 1;16), no dice que el Hijo “colaboró con Jehová en la
creación de todas las demás cosas” (NM), dice más bien que “por él todas las
cosas fueron creadas”. Si se quiere entender, como hacen los TJ, que el Hijo
colaboró con Jehová en la creación, quiere decir que el Hijo, como un ser
creado y por lo tanto aparte de Jehová, intervino en la creación. Entonces, los
TJ tendrán que contestar, pero muy claro, a la pregunta que lanza el propio
Jehová: “Yo, Jehová, estoy haciendo todo, extendiendo los cielos yo solo,
tendiendo la tierra ¿Quién estuvo conmigo?” (Is 44;24) (NM). “Quién
me ayudó” (NC).
Jehová y su Hijo primogénito disfrutaron de una
relación muy estrecha durante millones y millones de años, mucho antes de la
creación de las estrellas y la Tierra. ¡Qué gran amor deben de haberse tenido!
(Jn 3;35; 14;31.) Este Hijo querido era tal como su
Padre. Por esa razón, la Biblia dice que él es “la imagen del Dios invisible” (Col 1;15). En efecto, igual que los hijos suelen
parecerse a sus padres de muchas maneras, este Hijo celestial de
Dios también reflejaba las cualidades y la personalidad de su Padre. (¿Qué enseña realmente la Biblia?
Cap. 4 (pág. 37 – 46)
“El Hijo es la
imagen del Dios invisible” (Col1;15) (NM)(NC). “El Hijo es la imagen de su
substancia” (NC) “El Hijo… es la representación exacta de su mismo ser” (NM)
(Hb 1;3) “Cristo es la imagen de Dios” (NM)(NC) ¿Cómo puede ser una cosa creada,
imagen de su creador, imagen de la substancia de su creador, representación
exacta de su mismo ser, imagen de Dios…? No estamos hablando de banalidades, de
que un niño se parece a su padre en los gestos o en las palabras… estamos
hablando de imágenes exactas de un ser que es Dios y creador…